República Dominicana tiene una meta clara para este 2025: dinamizar sus comunidades a través del impulso al turismo comunitario sostenible, al tiempo que busca descentralizar los destinos tradicionales como Punta Cana (La Altagracia), Puerto Plata y La Romana.

Dajabón, provincia fronteriza con Haití, se presenta como una alternativa con gran potencial. Aunque es reconocida principalmente por su comercio fronterizo, que moviliza más de RD$ 50 millones cada viernes, esta región en el noroeste del país ofrece mucho más que transacciones económicas.

Ubicada a poco más de cinco horas de Santo Domingo, Dajabón invita a un recorrido lleno de recursos naturales, tradiciones, sabores auténticos y una comunidad emprendedora que no sólo dinamiza la economía local, sino que también apuesta por el desarrollo de una oferta turística cercana, auténtica y sostenible.

Katia Sarit, directora ejecutiva del clúster, destacó que el enfoque es presentar “una nueva cara de Dajabón”, tras haber sido recientemente declarada provincia ecoturística.

“Estamos enfocados en promover el turismo, la cultura, nuestros destinos… y acabamos de ser declarados provincia ecoturística”, expresó Sarit. “Queremos que la gente no solo venga al mercado binacional, sino que también descubra la otra cara de Dajabón: la turística y la cultural”.

Enfatizó que parte esencial de la misión del clúster es cambiar la narrativa que ha definido históricamente a Dajabón. “Queremos seguir promoviendo a Dajabón como un destino, no como el pueblito pegado a Haití con problemas fronterizos. Dajabón tiene mucho más que ofrecer que solo conflictos”.

El turismo en República Dominicana representa una parte significativa de la dinámica económica nacional y del desarrollo de la industria turística, que según el Banco Central (BC) los ingresos por la actividad de ocio ascendieron a US$ 5,800 millones entre enero y junio por la llegada de 4,514,093 extranjeros no residentes.

Además, el gasto en viajes nacionales aportó el 25.8 % del gasto interno total, equivalente a RD$ 229,800 millones, en contraste con el 74.2 % (RD$ 661,000 millones) correspondiente a los ingresos por turismo internacional en 2024, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC).

La sostenibilidad en el centro del desarrollo

La sostenibilidad ya no es una opción, sino una necesidad, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC). Se estima que el sector de viajes aportará US$ 16.5 billones al producto interno bruto (PIB) global para 2035, lo que evidencia su peso económico y la urgencia de hacerlo compatible con el cuidado ambiental.

El turismo está conectado con la biodiversidad. Más del 50 % de la demanda del sector se basa en el deseo de disfrutar la naturaleza, y forma parte de los seis sectores económicos cuyos bienes y servicios dependen en un 80 % de los recursos naturales a nivel global, destacan organismos internacionales.

El destino cuenta con 255.4 kilómetros cuadrados que fueron declarados como provincia ecoturística por la Cámara de Diputados en 2025. La pieza legislativa tiene por objetivo “impulsar y fomentar el uso racional sostenible de los recursos naturales”.

Daritza Zapata, diputada, señaló que convertir esta zona fronteriza en un modelo de desarrollo sostenible, inclusivo y culturalmente enriquecido. 

Dajabón no es un límite, es una oportunidad. La provincia representa una puerta de entrada al desarrollo, al comercio ordenado y a la reafirmación de la soberanía dominicana”, sostuvo.

La ley contempla la creación del Consejo de Desarrollo Ecoturístico de la provincia Dajabón, un organismo que aprobará iniciativa y fomentará microempresas turísticas sostenibles. El Gobierno establecerá un Fondo Provincial de Desarrollo Ecoturístico, con un presupuesto de RD$ 10 millones anuales por cuatro años. 

La provincia cuenta con cuatro áreas protegidas como laguna Saladilla, río Chacuey, las reservas forestales Cayuco y Cerro Chacuey, y forman parte del Sistema Nacional de Áreas Protegidas por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales. Y no es para menos, el 7 % de la superficie total de la provincia es área protegida, conforme los ministerios de Turismo y Medio Ambiente y Recursos Naturales.

En términos de recursos naturales, Martín Duquela, director de Turismo Interno, destacó zonas como El Pino y Loma de Cabrera, que ofrecen ríos y paisajes verdes similares a los de Jarabacoa. Además, la cercanía con el mar en Montecristi y Manzanillo, a menos de una hora de distancia, permite articular una oferta turística diversa y competitiva.

“Dajabón puede combinar lo verde de sus montañas con el azul del mar, y eso no todas las provincias lo tienen. Además, su mercado binacional es un atractivo único que dinamiza toda la comunidad”, expresó.

La ONU Turismo define el turismo sostenible como aquel que considera plenamente las repercusiones económicas, sociales y ambientales con el objetivo de satisfacer las necesidades de los visitantes, la industria, el entorno y las comunidades.

Este enfoque está alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030. En particular, la meta 8.9 plantea que los países deben elaborar y aplicar políticas que promuevan un turismo sostenible, generador de empleo y promotor de la cultura y los productos locales.

Asimismo, el ítem 12 de los ODS subraya la necesidad de desarrollar herramientas que permitan monitorear los impactos del turismo en el desarrollo sostenible, con miras a fomentar un sector que contribuya al empleo digno y al fortalecimiento económico de las comunidades.

Es aquí cuando un emprendimiento femenino ha capturado la atención del público: se trata de “La comadre”, una muñeca inspirada en las figuras tradicionales del campo dominicano, adaptada a una visión moderna y educativa.

Detrás de esta idea está Ana Victoria Peralta, creadora del proyecto Club La Comadre, compuesto por 20 niñas que participan en actividades culturales en Casa de Arte.

“El proyecto nació durante la pandemia, en un carnaval virtual. Queríamos representar a las comadres del campo: sus faldas anchas, zapatillas, pañuelos… Pero les dimos un giro moderno agregándoles collares y aretes de perlas, y un bolsito que reemplaza el tradicional macuto con el que las mujeres iban al conuco”, explicó Peralta.

La idea tomó forma gracias a su hija, Laura, directora de Casa de Arte, quien la animó a crear muñecas inspiradas en estas comadres. A pesar de sus dudas iniciales, la fémina se embarcó en la creación artesanal de estas figuras.

“Hice un patrón mal hecho al principio, pero fabriqué unas cinco hasta dar con el modelo que queríamos”, relató.

El proceso de elaboración de cada muñeca es manual y detallado: desde el corte de los patrones, la costura a máquina del cuerpo, hasta la decoración final hecha a mano, incluyendo flores, bolsitos y accesorios. Aunque no puede precisar cuánto tiempo toma hacer una muñeca, aseguró que es un proceso que exige dedicación.

Agregó que estas muñecas elaboradas a base de tela se exhiben en ferias culturales, con precios de RD$ 1,500.

La propuesta incluye modelos con tres tipos de piel haciendo referencia a los orígenes africanos, españoles y taínos, reflejando así la riqueza multicultural de la identidad dominicana.

“Queremos que cada niña se sienta representada y orgullosa de sus raíces”, concluyó Peralta.

Más que mercado fronterizo

El mercado binacional es una fuente de ingresos para la provincia. El Banco Central dominicano (BC) destacó en 2021 que Dajabón es el principal mercado binacional, con un tercio de las exportaciones informales totales.

“Existen 17 mercados que operan bajo la Ley 216-11, que en registraron exportaciones dominicanas a Haití por US$ 331 millones en 2018, o sea, un tercio de las ventas formales vía terrestre al país vecino”.

Pese a esto, el Clúster Turístico de Dajabón ha intensificado sus esfuerzos por transformar la percepción de esta provincia fronteriza, enfocándose en promover su riqueza cultural y ecológica, más allá de su mercado binacional.

El turismo no ha sido explotado y se inicia en el nicho de turismo rural, el que puede ser explotado por sus bellezas naturales y atractivos turísticos”, destacó el Ayuntamiento de Dajabón.

Sin embargo, la alcaldía detalló que el mercado fronterizo, es uno de los atractivos con mayor potencial de esta provincia, debido a su vistosidad que provocan la diversidad de mercancías, ubicado a orillas del río Masacre junto al puente nuevo que conecta a Haití con República Dominicana. Aquí se da la principal actividad comercial y económica del municipio, que fusiona, además, dos culturas, los lunes y viernes de cada semana.

Martín Duquela, director de Turismo Interno, valoró el potencial turístico de Dajabón, destacando su diversidad geográfica y cultural, así como la comunidad por desarrollar una “oferta turística robusta”.

“Cada rincón tiene una potencialidad importante, porque su estructura a nivel del turismo está muy bien organizada. Tienen una oferta excelente y, además, muy motivada”, afirmó. “Eso es vital para crear un producto y un destino atractivo”, agregó.

Duquela enfatizó que existe un “fuerte interés” de parte de la comunidad local en emprender iniciativas turísticas. “Hay una necesidad emprendedora muy palpable. Ellos quieren hacerlo, y nosotros debemos aprovechar eso y llevarlo al plano nacional e internacional”, indicó.

De hecho, ONU Turismo ejemplificó que el desarrollo del turismo comunitario mediante el empoderamiento y la inversión en poblaciones locales, así como el impulso de la innovación en sus productos.

“Es necesario seguir explorando modelos que promuevan la autonomía y la participación de las comunidades en la gestión turística de sus territorios. La creatividad, la colaboración y el compromiso con las tradiciones locales son pilares fundamentales en este viaje hacia un turismo más inclusivo y responsable”, destacó.

El turismo comunitario es una gran oportunidad para la innovación social y “permite ser creativos con el propio producto turístico”. En 2022, ONU Turismo estimó que el mercado global para este tipo de turismo representaba US$ 575,900 millones. 

En el caso de América Latina y el Caribe, con sus recursos naturales, anunció 80 proyectos en greenfield representando US$ 389 millones entre 2018-2023.

Una provincia que aún tiene retos

La zona fronteriza de República Dominicana enfrenta importantes desafíos en términos de desarrollo rural y condiciones de vida. El informe “Ruralidad en la zona fronteriza: relevancia, límites y oportunidades”, elaborado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), resaltó que el 28 % de la población en la zona fronteriza vive en áreas rurales, en comparación con sólo el 16 % en el resto del país.

Además, uno de cada 10 habitantes rurales de República Dominicana reside en la región fronteriza. En el caso específico de Dajabón, el 29 % de su población habita en zonas rurales.

Según el boletín “Mi Frontera RD: estrategia de desarrollo para la zona fronteriza”, el 54 % de la población en esta región pertenece a los niveles socioeconómicos bajo y muy bajo. Asimismo, el 43 % de los hogares carecen de acceso al agua potable dentro de la vivienda, el 9 % carece de energía eléctrica, y un 22 % cocina utilizando carbón o leña como principal fuente de combustible.

Uno de los principales retos identificados es el estado de las carreteras que conducen a los principales atractivos turísticos. No obstante, Duquela aseguró que estos temas ya están siendo considerados dentro de los planes del Ministerio de Turismo (Mitur).

“Estos detalles se incluirán en un informe técnico que será entregado al ministro David Collado. Él ha demostrado compromiso con este programa (Turismo en cada rincón) y siempre traza acciones a corto, mediano y largo plazo”, aclaró. Asimismo, confió que mediante la articulación con otros ministerios se podrán mejorar los accesos y condiciones viales, fortaleciendo así la competitividad de Dajabón como destino turístico.

Aún así, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) señaló que República Dominicana tiene oportunidades de un desarrollo y crecimiento inclusivo al modernizar los sectores estratégicos, como el turismo sostenible.

“La fórmula todo incluido impide que los viajeros extiendan su experiencia por fuera de los hoteles y así se beneficien otros negocios”, citó el organismo multilateral en el informe “Panorama de oportunidades de República Dominicana”.

Destacó que Quisqueya, que recibe más del 80 % por el all inclusive, debe ampliar el turismo sostenible, al reforzar el papel del Estado con el diseño de un plan nacional de turismo sostenible que preserve el capital natural e impulse la competitividad turística.

El Banco Central dominicano (BC) contabilizó que 214,369 extranjeros no residentes eligieron el país por la oferta ecoturística, es decir, el 0.6 % de los 31,157,414 extranjeros no residentes totales desde 2020 hasta 2024.

Por año, el 0.6 % de los extranjeros no residentes indicaron que fueron atraídos por el ecoturismo en 2024. El porcentaje es minúsculo frente a los que eligieron por la calidad de playa (50.5 %), clima (15.3 %) y hospitalidad (11.9 %), pero equivale a 51,214 turistas que vieron el país más allá de su tradicional ‘sol y playa’.

El ecoturismo no ha dejado de crecer motivado por la cada vez mayor concienciación medioambiental y ofertas relacionadas con experiencias con el entorno natural. En números, Statista indicó que el mercado cerró con US$ 196,000 millones en 2023. Y no es para menos, el 69 % de los turistas globales busca opciones de viaje en esta modalidad.

Comunidad integrada con la experiencia del turista

Más de 74,810 personas viven en Dajabón, siendo 36,934 mujeres y 37,876 hombres en los municipios Dajabón, Loma de Cabrera y Restauración, de acuerdo con la Oficina Nacional de Estadística (ONE).

Esta provincia que colinda con Elías Piña registra 30,890 viviendas, de las cuales 25,165 están ocupadas y 5,629 desocupadas, según la Oficina Nacional de Estadística (ONE).

A pesar del impacto económico del turismo interno, solo el 35.1 % de los dominicanos ha realizado algún viaje dentro del país en los últimos 12 meses, frente a un 64.9 % que indicó no haberlo hecho, lo que evidencia una baja participación de la población local en el disfrute de los destinos nacionales.

De acuerdo con una encuesta realizada por el Centro de Estudios Turísticos y Desarrollo Local (Cetdel) y la Universidad Iberoamericana (Unibe), entre quienes sí viajaron, los principales motivos fueron: vacaciones (46.2 %), visitas a familiares y amigos (27.9 %), trabajo (22.7 %), estudios (1.7 %) y otros motivos (1.6 %).

El Clúster Turístico de Dajabón apuesta por consolidar una imagen positiva y sostenible de la provincia, impulsando el turismo responsable y posicionándose como un “destino emergente en la región norte del país”. 

De acuerdo con la Oficina Nacional de Estadística (ONE), la provincia cuenta con 114 habitaciones hoteleras distribuidas en nueve hoteles a 2021.

La historia también juega un papel central en el desarrollo turístico de la zona. El monumento al Grito de Capotillo, uno de los lugares más emblemáticos de la provincia, está siendo considerado para un mayor aprovechamiento turístico. “Es un monumento con áreas muy positivas que pueden generar una oferta cultural más completa”, señaló Duquela.

Otro aspecto es la puesta en valor del legado japonés en la zona. Dariela Acosta, guía y estudiante de la Universidad Tecnológica de Santiago (Utesa), explicó que la presencia japonesa responde a los profundos lazos que se remontan a mediados del siglo XX.

“Los japoneses llegaron al país con el propósito de asentarse en suelo dominicano, cultivar la tierra y contribuir al desarrollo agrícola con nuevas técnicas”, señaló Acosta.

Esta acción, según Acosta, responde al reconocimiento de la importancia de esta comunidad. “Fueron ellos quienes fundaron la colonia japonesa, y su legado se mantiene vivo en lugares como el monumento en La Vigía”.

Aunque en la actualidad la comunidad japonesa está más dispersa por todo el país, aún se conservan algunas familias tradicionales en la zona de La Vigía, como los Yamamoto, símbolo de una historia compartida entre Japón y República Dominicana que continúa fortaleciéndose.

“Dajabón fue el primer asentamiento japonés del país, y se está trabajando en la creación de un museo en honor a esa población procedente de Asia que será de gran valor tanto para el turismo nacional como internacional”, explicó Martín Duquela, director de Turismo Interno.

De acuerdo con los entrevistados por ACENTO, la provincia fronteriza busca ser más allá de ser recordado y visitado por su actividad comercial compartida con la República de Haití y encaminarse hacia un turismo sostenible.

Y no es para menos, la ejecutiva del Clúster provincial indicó que con cada muñeca artesanal, cada sendero ecológico y cada iniciativa comunitaria, Dajabón redefine lo que significa ser destino turístico en República Dominicana.

Karla Alcántara

Periodista. Abanderada por los viajes, postres y animales. Ha escrito sobre economía, turismo y cine. Ha cursado diplomados sobre periodismo económico impartido por el Banco Central, periodismo de investigación por el Instituto Tecnológico de Santo Domingo, finanzas por el Ministerio de Hacienda y turismo gastronómico por la Organización Internacional Italo-Dominicano.

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