República Dominicana y en especial Santiago de los Caballeros, fueron uno de los grandes laboratorios de proyectos exitosos en América Latina, promovidos por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Organismo creado por una ley del estado y nación norteamericana de 1961 por iniciativa derivada de la estrategia Alianza para el Progreso (APP). La estrategia incluyente, promovida por el presidente John F. Kennedy; aprobada en la Conferencia de Punta del Este, Uruguay (1961) por la Organización de Estados Americanos (OEA).
El muy bien recordado presidente de USA y su esposa, la primera dama Jacqueline Bouvier de Kennedy, de los cuales se preservan cartas a mi familia, en mi casa paterna, tuvo de contexto la guerra fría. En esa coyuntura gestó un sistema prevención y contención para que el resto de América Latina utilizara otros modelos de desarrollo, diferentes al cambio radical promovido por la revolución cubana.
USAID fue la primera base para que la Fundación Interamericana (IAF), la Fundación Rockefeller, la Bloomberg Filantropía, la Fundación W. K. Kellogg, el BID y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), utilizaran a Santiago como referencia operativa. Teniendo claro estos antecedentes 55 años después, me integré a una delegación científica de Santiago hacia la ciudad de Dubuque Iowa, Estados Unidos.
Anteriormente, USAID facilitó una de las primeras universidades de agricultura de América, ISA. También aportó al modelo para rescatar el río Gurabo y sus riberas, utilizado posteriormente por el presidente Abinader e INAPA. Asimismo, aportó las primeras casas de justicia. También el Instituto Dominicano Americano, las escuelas de ciudad Santa María y el Plan de Ordenamiento Territorial con adaptación climática, igualmente, los humedales como herramientas de saneamiento.
De esta misma forma, apoyó al Plan Estratégico de Santiago en su momento crítico, vía el embajador Robert Fannin y el director de USAID, Richard Goughnour con recursos frescos ratificados en comunicación a quien suscribe, fechada el 16 de enero de 2008.
Uno de los proyectos de planificación de adaptación climática más exitosos de USAID en República Dominicana, fue elaborado por nosotros, Jesús de los Santos y Jefferey Pérez de la Fundación REDDOM.
Mediante esta iniciativa, el municipio de Santiago fue parte clave en conjunto con otros municipios de la República Dominicana, del proyecto que auspició la USAID, bajo la gestión operativa y las relaciones de la Asociación Internacional de Gestión de Ciudades y Condados (ICMA) de los Estados Unidos.
Las doctoras norteamericanas de Dubuque, Cori Burbach y Denisse Ihrig, facilitaron un amplio intercambio de experiencias en planificación y acción climática. Ambas como técnicas y funcionarias públicas del Estado de Iowa, en conjunto con representantes de Santiago y su Ayuntamiento. Acumulamos decenas de enseñanzas aprendidas en planificación, gestión de riesgos, información y adaptación climática de una de las ciudades más emblemáticas para el río Mississippi de los EUA, Dubuque.
Fue nuestro interés institucional promover la participación de todos los actores estratégicos de la planificación para que se involucren en el proceso de información, planificación y adaptación al cambio climático que se ha iniciado en Santiago con el auspicio de USAID. De aquí surgió la iniciativa de impulsar el proyecto de gestión de riesgo en el río Gurabo que más tarde se transformó en una referencia del exitoso rescate de este curso hidrográfico.
Por eso destacamos que, aunque incumbe al presidente Donald Trump, como primer mandatario de Estados Unidos de América (EUA), evaluar, reestructurar, reorganizar, robustecer y hasta cerrar por ley, no por decreto, la Agencia USAID, la República Dominicana sea una referencia al respecto.
Trump, tiene derecho constitucional para juzgar USAID, como organismo del Departamento de Estado, vía la ley de asistencia extranjera de 1961. Sólo otra ley podrá prescribirla como demuestra la sentencia del juez Carl Nichols del Tribunal del Distrito de Washington, nominado por el mismo Trump para este tribunal de primera instancia.
Ratificamos, el mejor territorio para encontrar evidencias del buen hacer de USAID en República Dominicana es Santiago. Desde 1962 a la fecha, esta ciudad muestra más de 100 iniciativas, donde la agencia colaboró con asistencia técnica y financiera.
Las experiencias de gestión de Dubuque, Iowa evidenciaron los éxitos de esta ciudad norteamericana en materia de gestión de inundaciones y de intervención exitosa en ríos y arroyos. Desde ese entonces Santiago de los Caballeros, avanzó significativamente en materia de planificación estratégica y territorial, aprendiendo mucho de Dubuque y de otras ciudades del Estado de la Florida.
Como director en ese entonces, de la agenda oficial de Santiago, constaté el conjunto de iniciativas que nos ha permitido convocar y atraer un concierto de agencias internacionales y organismos multilaterales, de apoyo al desarrollo de la ciudad como nunca antes. Hemos avanzado muchísimo con el BID-ICES, ya tenemos un coherente Plan de Acción de intervenciones concretas para Santiago que transitan ahora a un programa de pre-inversión y acciones.
El programa de planificación para la adaptación climática de la USAID, fue dirigido en República Dominicana por la Asociación Internacional de Gestión de Ciudades y Condados (ICMA) de Estados Unidos en asociación con INTEC, FEDOMU, Ayuntamiento y nosotros. Además, por su parte, el Instituto Dominicano de Desarrollo (IDDI) impulsó el componente Clima-Adapt, aliado a la Corporación Ciudadana Santiago Solidario (CCSS) y APEDI.
Se impulsaron acciones en comunidades vulnerables para la adaptación que reduzcan el impacto del cambio climático con herramientas técnicas de elevada eficiencia. Por igual impulsamos la información climática para incorporar en la gestión estratégica necesaria para promotores y agentes comunitarios privilegiando el trabajo con mujeres y jóvenes.
Esta gran iniciativa es parte de las cooperaciones de USAID con la República Dominicana, que se dividió en tres ejes de trabajo que tienen como meta principal “Mejorar la Seguridad Ciudadana para Promover el Crecimiento Económico en la República Dominicana”. Para alcanzar esta meta, la USAID se enfocó en los objetivos de: i) fortalecer la prevención del crimen, ii) aumentar la resiliencia de las personas frente al impacto del cambio climático y iii) avanzar hacia una generación libre de SIDA.
Fueron contribuciones de USAID que como dijera el presidente Bosch en 1962, “los proyectos de Santiago, siempre tienen una contrapartida debajo del brazo”.
El morbo político dramatizado por las redes sociales, manipula fondos para la democracia, transparencia y gobernabilidad que colocó USAID en la organización política no partidista, Participación Ciudadana.
Entidad de la cual formamos parte de su fundación en 1993, junto a los santiagueros como Mariana Moreno García, Pengsien Sang, Juan Castillo y otros. Líderes que asumieron la iniciativa generada por Juan Bolívar Díaz, Isidoro Santana, Gianna Sangiovanni y Antonio Isa Conde.
Participación Ciudadana con apoyo de USAID, contribuyó a la democracia y transparencia pública, al colocar en primer plano los altos niveles de corrupción en casi todos los órganos del Estado en administraciones públicas precedentes y dejar las herramientas para medir la actual gestión. Se encontrarán fallas y errores de esta agencia, pero todos sus aportes a los sectores sociales y empresariales, facilitaron el fortalecimiento de la democracia, la inversión y el desarrollo.
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