
Esta historia se inicia el día de Corpus Christi, luego de rendirle nuestros respetos a la memoria del Gral.® Juan Bautista Rojas Tabar, amigo y ejemplo de bonhomía, templanza, disciplina y solidaridad humana, y haberle dado nuestro pésame a su viuda Matilde Franco, emparentada con mis hijas que me ha dado la vida.
Luego, cuando estaba en el almuerzo con mi nieto, Andrés Alejandro McFarlane Franco, éste me pide que le hablara sobre el enfrentamiento Israel vs Irán, un tema actualísimo.
Preparando, más tarde, este artículo sobre la “hidra de tres cabezas” y de mi búsqueda por las redes, me aparece un texto identificado como resultado de la aplicación de la “inteligencia artificial” que presento a continuación:
«El escenario de confrontación política y económica entre las grandes potencias actuales se caracteriza por una dinámica compleja que combina la competencia estratégica con la interdependencia económica. Las grandes potencias, como Estados Unidos, China, Rusia, la Unión Europea y Japón, se enfrentan en una lucha por la influencia global, el poder militar, el liderazgo tecnológico y el acceso a recursos, pero también están interconectadas a través del comercio, la inversión y las cadenas de suministro globales.
Factores clave en la confrontación:
Competencia estratégica:
Las grandes potencias compiten por expandir su influencia política y militar en diferentes regiones del mundo, incluyendo Asia, África y América Latina. Esto se manifiesta en alianzas militares, despliegue de fuerzas, venta de armas y participación en conflictos regionales.
Competencia económica:
La rivalidad económica se centra en el comercio, la inversión, el desarrollo tecnológico y el acceso a recursos estratégicos como el petróleo, el gas y los minerales. Las guerras comerciales, las sanciones económicas y la competencia por la innovación son elementos clave de esta dimensión.
Desafíos transnacionales:
Las grandes potencias también deben hacer frente a desafíos globales como el cambio climático, las pandemias, el terrorismo y la ciberseguridad, que requieren cooperación pero también pueden generar tensiones y desconfianza.
Cambio en el equilibrio de poder:
La creciente influencia económica y política de China, así como el ascenso de otras potencias emergentes, están generando cambios en el equilibrio de poder global, lo que puede llevar a una mayor volatilidad y competencia.»
El texto continuó mostrando ejemplos de Conflictos que desbordaban mi propósito con este artículo. Pero, me presentó un esquema similar a mi pensamiento en Geopolítica, Relaciones Internacionales o Politología: nos encontramos en un cambio «epocal» por la búsqueda de un nuevo orden global. Y el punto de partida es por la supremacía mundial entre la pretensión de Donald Trump en convertirse en Teddy Roosevelt del siglo XXI (el presidente norteamericano de la política del “Big Stick o del Garrote” en el siglo XX), y la pretensión de Xi Jin-Pin su contrapeso en la Neo-Guerra Fría que se está recalentando a través de estados satélites o proxis. Curiosamente, Irán siendo una teocracia de Jure, se enfrenta a Israel, una teocracia de facto por la coalición ultra derechista de Netanyahu, rebautizada como Israel por sus fundadores sionistas.
Esta es la primera cabeza que emerge de la hidra que nos amenaza al mundo actual.
(La leyenda de la Hidra de siete cabezas, también conocida como la Hidra de Lerna, es un relato de la mitología griega. La Hidra era un monstruo acuático con múltiples cabezas, cuya particularidad era que cada vez que una cabeza era cortada, dos nuevas nacían en su lugar, y una de sus cabezas era inmortal. Hércules, en uno de sus doce trabajos, fue encomendado a derrotar a la Hidra. Para lograrlo, necesitó la ayuda de su sobrino Yolao, quien quemaba los cuellos de las cabezas cortadas para evitar que volvieran a crecer.)
La cabeza con nombre de mujer: “Cristina no se toca”.
Parece que fue escrita para estos momentos la canción del musical “No llores por mí, Argentina” cuando una pretendida reencarnación de Eva Duarte, la original “Evita”, la condenada Ex Presidenta, Ex Vice, Ex Senadora y Ex Diputada pretende martirizarse para romper la institucionalidad de un país pretendiendo repetir la tramoya del evento de su adalid Juan Domingo Perón a su regreso a la Argentina y a la Presidencia allá en los años setenta que el peronismo ganó y el Presidente Héctor Cámpora renunció para facilitar el retorno a Perón. Cristina asume el libreto de la historia para repetirla. Ya el eslogan de la campaña se escucha: ¡Cristina robó pero repartió!
Aquí sobresale la segunda cabeza de la hidra: la desinstitucionalización y los resabios del caciquismo.

La polarización en Argentina se refiere a la creciente división de la sociedad en dos polos opuestos, con discursos y posiciones cada vez más extremas, especialmente en el ámbito político. Este fenómeno se ha intensificado en las últimas décadas, marcando un cambio significativo en la forma en que se desarrolla la política y la vida social en el país. Para documentarla, recomiendo el artículo siguiente: “Political culture in an electoral polarization scenario in Argentina” por Daniela Rocío Alonso (2018) Editorial: Universidad Mayor de San Andrés. Instituto de Investigación, Interacción y Postgrado de Psicología, Revista: Revista de Investigación Psicológica e-ISSN: 2223-3032, disponible en el siguiente enlace: https://ri.conicet.gov.ar/handle/11336/104399
El “sicariato” en Colombia: el negocio de la desestabilización
La tercera hidra se nos aparece bajo el disfraz de la perfidia, el engaño y la traición del mundo criminal de nuestras sociedades, como corolario de la sentencia evangélica de que “los hijos de las tinieblas son más sagaces que los hijos de la luz.”
El horror de la violencia política se materializó en Bogotá, con el atentado a la vida del senador Miguel Uribe Turbay, nieto de Presidente Turbay y pre-candidato a la Presidencia de la República de Colombia por un “sicario” menor de 15 años el pasado 2 de junio de 2025. Quiero postular cómo la tercera hiedra en escena es la “corporitización” o “empresarización” de la actividad del sicariato y cuyo resultado será la fragilización de la escasa “institucionalidad democrática” en Colombia y el mundo.

El periódico El Norte, de Colombia, revela el móvil político y fue ejecutado por un adolescente de 15 años, como lo pueden comprobar en el siguiente enlace: https://elnorte.com.co/fiscalia-revela-movil-politico-detras-del-atentado-contra-el-senador-miguel-uribe-turbay/ , sin señalar al pagador del contrato. Es sospechosa la posterior declaración de los disidentes de las FARC de que ellos no fueron los “financiadores” del servicio de sicariato realizado. En seguida transcribo el texto periodístico:
«La Fiscalía General de la Nación confirmó en audiencia preliminar que el atentado perpetrado el pasado 7 de junio contra el senador Miguel Uribe Turbay tuvo un móvil político y fue ejecutado por sicarios contratados.
Durante la imputación de cargos contra Catherine Martínez, alias Gabriela, el ente acusador aseguró que la tentativa de homicidio respondió directamente a su condición de senador en ejercicio y precandidato presidencial, así como a sus posturas críticas frente al Gobierno nacional.
“La víctima, Miguel Uribe Turbay, es senador en ejercicio, precandidato presidencial y la tentativa de homicidio se produce por el hecho de ser senador y estar desarrollando campaña política como precandidato a la presidencia”, declaró la fiscal del caso, al tiempo que subrayó la exposición pública y la reiterada solicitud de protección que el político había presentado ante la Unidad Nacional de Protección (UNP), sin recibir respuesta efectiva.
La Fiscalía dejó claro que no existen motivos personales, económicos o familiares que expliquen el atentado, fortaleciendo la hipótesis de que se trató de un ataque con un móvil político. “Había informado a la UNP en varias ocasiones la situación de riesgo en la que se encontraba por sus posturas contrarias a las políticas del Gobierno nacional y pertenecer a un partido que se declaró en oposición”, añadió la funcionaria judicial.
Durante la audiencia, se reveló la participación de varias personas en la planificación y ejecución del atentado. Según la investigación, Elder José Arteaga Hernández, alias El costeño, fue quien diseñó el plan criminal. Él contactó al menor de edad que disparó contra Uribe; a Catherine Martínez —quien le entregó el arma—, y a Carlos Eduardo Mora, conductor del vehículo usado en el operativo.
“Arteaga Hernández ejecutó un plan criminal para lograr el asesinato de Miguel Uribe Turbay utilizando un arma de fuego marca Glock y medios motorizados tipo automóvil y motocicleta”, explicó la fiscal. A Catherine Martínez se le imputaron cargos por tentativa de homicidio en calidad de coautora y porte ilegal de armas.
Según la reconstrucción de los hechos, el 6 de junio se coordinó la movilización del menor en motocicleta hasta las inmediaciones del Parque El Golfito, lugar del atentado. Catherine le entregó el arma a Arteaga, quien a su vez se la dio al menor. Instantes después, el joven se dirigió al lugar y disparó contra el senador durante un acto político.
A cambio, el menor habría recibido una promesa de pago de 20 millones de pesos, según la Fiscalía.
Colaboración con la justicia
Aunque alias Gabriela no aceptó cargos, su defensa anunció que está colaborando con la justicia. “Mi defendida se encuentra realizando una colaboración con la justicia y en este momento nos encontramos en diligencia de interrogatorio suspendida”, dijo su abogada, al solicitar la interrupción temporal de la audiencia.
Martínez fue capturada en Florencia, Caquetá, cuando intentaba esconderse con ayuda de alias Bayron, también conocido como El costeño, quien tendría nexos con otros implicados, incluido el conductor del vehículo utilizado en el atentado.
La Fiscalía General de la Nación confirmó en audiencia preliminar que el atentado perpetrado el pasado 7 de junio contra el senador Miguel Uribe Turbay tuvo un móvil político y fue ejecutado por sicarios contratados.
Durante la imputación de cargos contra Catherine Martínez, alias Gabriela, el ente acusador aseguró que la tentativa de homicidio respondió directamente a su condición de senador en ejercicio y precandidato presidencial, así como a sus posturas críticas frente al Gobierno nacional.
“La víctima, Miguel Uribe Turbay, es senador en ejercicio, precandidato presidencial y la tentativa de homicidio se produce por el hecho de ser senador y estar desarrollando campaña política como precandidato a la presidencia”, declaró la fiscal del caso, al tiempo que subrayó la exposición pública y la reiterada solicitud de protección que el político había presentado ante la Unidad Nacional de Protección (UNP), sin recibir respuesta efectiva.
La Fiscalía dejó claro que no existen motivos personales, económicos o familiares que expliquen el atentado, fortaleciendo la hipótesis de que se trató de un ataque con un móvil político. “Había informado a la UNP en varias ocasiones la situación de riesgo en la que se encontraba por sus posturas contrarias a las políticas del Gobierno nacional y pertenecer a un partido que se declaró en oposición”, añadió la funcionaria judicial.
El rol de los implicados
Durante la audiencia, se reveló la participación de varias personas en la planificación y ejecución del atentado. Según la investigación, Elder José Arteaga Hernández, alias El costeño, fue quien diseñó el plan criminal. Él contactó al menor de edad que disparó contra Uribe; a Catherine Martínez —quien le entregó el arma—, y a Carlos Eduardo Mora, conductor del vehículo usado en el operativo.
“Arteaga Hernández ejecutó un plan criminal para lograr el asesinato de Miguel Uribe Turbay utilizando un arma de fuego marca Glock y medios motorizados tipo automóvil y motocicleta”, explicó la fiscal. A Catherine Martínez se le imputaron cargos por tentativa de homicidio en calidad de coautora y porte ilegal de armas.
Según la reconstrucción de los hechos, el 6 de junio se coordinó la movilización del menor en motocicleta hasta las inmediaciones del Parque El Golfito, lugar del atentado. Catherine le entregó el arma a Arteaga, quien a su vez se la dio al menor. Instantes después, el joven se dirigió al lugar y disparó contra el senador durante un acto político.
A cambio, el menor habría recibido una promesa de pago de 20 millones de pesos, según la Fiscalía.
Otra dimensión es la internacionalización del negocio del sicariato por la denuncia de personas y contactos ecuatorianos en el caso de Miguel Uribe Turbay. ¿Se podría comprender cuando Colombia y Ecuador con Venezuela nacieron en el seno de la Gran Colombia? Si es así, el carácter peligroso para este escribidor, es el carácter empresarial de la organización criminal y la ejecución con protocolos y supervisión de terceros revelan la naturaleza permanente de la “Corporación Criminal de Sicariato, S.A.” Si es así, la cosa va para largo, previendo otros cincuenta años de homicidios de “guerra civil” disfrazada de bandidaje común y a la carta.
En resumen, nuestra hidra multi-cabezas puede estar cocinando nuevos procesos que degenerarán en nuevas cabezas para producir la “anarquía global y la violencia criminal como norma de vida cotidiana.” Porque la regla del “más fuerte” se reduce a sus caprichos que suelen ser nada racionales…
No hay un Hércules a la vista… ¡Caracho!
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