Es una primicia en Europa: dos soldados israelíes fueron interrogados por la justicia belga el 20 de julio, en el marco de una investigación por crímenes de guerra, genocidio y otras acciones que podrían haber cometido en Gaza. Fueron localizados por la policía belga mientras participaban en un festival de música electrónica cerca de Amberes.
Con la corresponsal de RFI en Bruselas, Elena Louazon
Durante el fin de semana del 19 y 20 de julio, dos ONG, HRF (Hind Rajab Foundatio) y Global Legal Action Network (GLAN), presentaron una denuncia contra dos hombres ante la Fiscalía Federal belga por violaciones del derecho internacional cometidas en la Franja de Gaza y en las que presuntamente participaron, en el contexto de la guerra librada por Israel en el enclave tras los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023.
"Algunos de los crímenes más atroces"
Según estas ONG, estos dos militares estuvieron directamente implicados en ataques contra zonas civiles, detenciones arbitrarias y desplazamientos forzados de poblaciones. "En un momento en que demasiados gobiernos permanecen en silencio, esta acción envía un mensaje claro de que las pruebas creíbles de crímenes internacionales deben ser tratadas por la justicia, no por la indiferencia política", dijeron las ONG en un comunicado.
En detalle, acusan a los sospechosos de "ataques indiscriminados contra zonas civiles, viviendas y hospitales", del "uso de torturas y escudos humanos", así como de "detenciones arbitrarias masivas y desplazamientos forzados de civiles". En términos más generales, los dos hombres están acusados de estar "directamente involucrados en algunos de los crímenes más atroces cometidos durante la campaña militar israelí".
Traicionados por sus publicaciones en las redes
En el marco de la apertura de la investigación por parte de la Fiscalía belga, los dos soldados fueron localizados y abordados por la policía en el recinto del festival Tomorrowland, en el municipio de Boom, en la región flamenca donde se alojaban, para ser interrogados.
Fueron sus publicaciones en las redes sociales las que traicionaron a los dos soldados. Entre ellos había selfies tomadas durante el festival, pero también un video anónimo filmado durante un concierto y ampliamente compartido en línea en el que se puede ver a un grupo de hombres bailando y ondeando una bandera morada y blanca. Esta bandera resulta ser la de una unidad del ejército israelí, según las dos asociaciones demandantes.
Incluso si los sospechosos no son belgas y los actos se cometieron en el extranjero, el sistema judicial belga podría hacer valer la jurisdicción universal de sus tribunales sobre estas cuestiones de violaciones del derecho internacional (crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra, genocidio) para enjuiciarlos.
Los dos soldados salieron libres de audiencia y tienen derecho a abandonar el territorio belga. Pero la investigación sigue en curso. La Fiscalía Federal está tratando de garantizar que Bélgica pueda enjuiciar efectivamente a los ciudadanos extranjeros por delitos que no se cometieron en su territorio.
Compartir esta nota