Una de las características de la metropolis de Santo Domingo es la deficiencia de espacios públicos, tanto en cantidad como en calidad. Sin embargo la situación es diferente en la Ciudad Colonial y sus entornos, donde se encuentran las mejores plazas urbanas de toda la ciudad, tres de las cuales queremos comentar por su calidad y significado, tres modelos cuya sola existencia reconforta a los habitantes de la capital solo por saber que están ahi, como bien dice Amanda Burden, sobre el High Line de New York en su interesante charla TED. Tres plazas urbanas nombradas parques recipientes de parte importante de la historia dominicana.
En los dos extremos de la calle El Conde de la Ciudad Colonial de Santo Domingo están emplazadas las dos plazas más emblemáticas de la ciudad representando cada una a un momento histórico y respondiendo a dos modelos diferentes de espacio público.
En el extremo este se encuentra el Parque Colón, antigua Plaza Mayor de la ciudad histórica, que nace prácticamente con la ciudad cuando Nicolás de Ovando refunda Santo Domingo en la margen occidental del Ozama en 1502. En sus inicios Plaza de Armas, antes de ser intervenida para convertirla en el Parque Colon, en 1887, cuando se coloca la estatua de Colón obra del escultor E. Gilbert, la gente del pueblo la conocían como La Sabanita.
Definida espacialmente por edificios de poder político como el Ayuntamiento o Palacio Consistorial y antigua la cárcel colonial, que fuera una vez la Cámara de Diputados y del poder secular de la iglesia, con la Catedral de Santo Domingo. Con estas edificaciones la plaza asume su categoría urbana que articula la ciudad alrededor de los elementos de poder que albergan una arquitecturas magnificas.
Al oeste de El Conde se encuentra el Parque Independencia, con la Puerta del Conde y el altar de la Patria, mostrando su carácter de plaza cívica monumental. Ocupando parte de la llamada Sabana del Estado durante la colonia, el Parque cuenta con un foso defensivo, rescatado en los años de 1976, cuando se remodela y se desmonta la glorieta alegórica construida por el arquitecto norteamericano de origen checo, que trabajara intensamente en el país en la primera década del siglo XX y durante la intervención norteamericana de 1916 a 1924, Antonin Nechodoma, para construir el masivo Altar de la Patria y se instala la costosa y estroboscópica verja italiana de aluminio
Antes de 1884, año en que se le diera el nombre de Parque Independencia se le conocía como El Placer del Conde, una sabana donde una vez incluso, a principios del siglo XX habia una plaza de toros. Diferente al Parque Duarte esta plaza no la definen grandes edificaciones de poder y su dimensión cívica se la da el tramo de la muralla con la Puerta del Conde que en principio no era parte del parque y estaba separado de este por la calle Pina, posteriormente esa dimensión la consolidó el desaparecido Teatro Independencia
Sobre estos dos espacios públicos han gravitado los principales eventos en la historia de la ciudad desde su fundación hace mas de 500 años. Han sido un ejemplo de lo que deben ser o no un espacio público.
La otra plaza, esta vez del del siglo XX, es el Parque Eugenio Maria de Hostos, diseñado por Guillermo Gonzalez en 1936. Espectacularmente situado frente al mar Caribe, entre Gascue y Ciudad Nueva, el antiguo Parque Infantil Ramfis, no ha tenido la importancia cívica que tienen el Parque Colón y el Parque Independencia. Su importancia reside en ser la primera plaza de la modernidad con un contenido recreacional muy especifico.
El parque Eugenio Maria de Hostos, ocupa los predios de la llamada Plaza Colombina, anteriormente conocida como Sabana Real o Sabana del Estado que sirvió de fosa común para las victimas del Ciclón de San Zenón, restos que fueron movilizadas al cementerio de la Av.Independencia al inicio de los trabajos del parque.
El Eugenio Ma de Hostos asume escala política durante la guerra de abril de 1965 cuando se instala la Academia Militar Constitucionalista, que entrenaba los combatientes revolucionarios.
Independientemente de la preeminencia de estas plazas en la ciudad del siglo XX, su forma responde a tipologías históricas definidas: el Parque Colón a la tipología colonial, el Parque Independencia a la republicana y el Eugenio a la tipología moderna.
En términos de significado, el Parque Colón está lleno de historia y ha sido escenario de eventos relevantes de nuestra historia, desde la colonia hasta nuestros días. El parque independencia aloja el Altar de la Patria escenario de los momentos cumbre de la independencia y su poder político ha sido reconfirmado por la Marcha Verde, fue ademas uno de los espacios resemantizados por los gobiernos de Balaguer luego de la Guerra de Abril. Habiendo asumido carácter de símbolo de aquella conflagración del 65, se le despoja de su significado revolucionario interviniéndolo y cambiando significativamente su forma, cercado incluido.
Estas plazas, entiendo, representan lo mejor en espacios públicos de Santo Domingo, siendo la más completa el Parque Colón. Es una pena que no se hayan replicados sus modelos en una ciudad deficitaria de espacios públicos y donde no se acaba de entender el poder de esto espacios más allá de canchas deportivas y de rotondas cuestionables.
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