Las Naciones Unidas, el conglomerado de países que, de vez en cuando, se reúne para "destilar" "situaciones" y conflictos del planeta, no ha podido detener la barbaridad que está ocurriendo en la Franja de Gaza.
Un pueblo secuestrado por un grupo de beligerantes (Hamás), que, independientemente de "tener o no la razón", ha expuesto a la mayoría del pueblo palestino como cómplices de su lucha. ¿Qué quieren? Recuperar la tierra que entienden es de ellos y que los israelitas han ido ocupando, arrinconándolos hasta casi expulsarlos a todos.
Esto no es nuevo, viene ocurriendo desde el 14 de mayo de 1948, cuando Israel declara su independencia poniendo fin al mandato británico sobre "Palestina".
¿Qué hubiera hecho cualquier pueblo ante semejante situación, llámense judíos, noruegos, colombianos? Me imagino que lo que han hecho los palestinos. Luchar por lo que entienden son sus derechos.
El terrorismo es una forma abominable de lucha; tanto los judíos como los palestinos y una infinidad de pueblos lo han hecho en "pro" de una causa, pero esa es una de las mierdas que provocan todas estas divisiones en un planeta que hace tiempo debió estar completamente integrado como ciudadanos del mundo.
Todavía nos faltan unos cinco mil años más para que nos olvidemos de religiones, nacionalidades y banderas, que son las causas de las guerras y los absurdos. ¿Que algunos se sientan superiores a otros solo por raza o cultura? Es parte de la inconsciencia humana que tenemos que erradicar también.
No tiene sentido lo que hoy sucede en Gaza. Nadie está de acuerdo, solo los insensibles y radicales, ante tantas muertes por inanición y aplastamiento. Hay miles de cadáveres sepultados bajo los escombros de edificios bombardeados.
¿Y qué hace el mundo ante esto? Solo denuncian y dicen y "parlotean" y luego se van a sus casas a dormir en sus cómodas camas después de degustar un banquete en la cena.
No es con indiferencia pasiva que vamos a componer este mundo. Las naciones poderosas deben tomar acción e intervenir, no con palabras, sino con hechos concretos.
Hay más de un millón de ciudadanos del planeta siendo aplastados por un ejército superior, sin posibilidades de defenderse. No es una trifulca como la actual entre Camboya y Tailandia, donde dos ejércitos igualitarios se enfrentan.
No es Ucrania siendo abastecida por Europa y Estados Unidos para contener la poderosa Rusia. Es la masacre de un pueblo indefenso, siendo aplastado ante los ojos de todos. ¿Qué los de Hamás asesinaron dos mil inocentes judíos en un acto atroz, no perdonable? Sí, pero los judíos ya han matado a más de 60 mil en venganza y siguen exterminándolos por docenas diariamente.
¿Qué piensa hacer el mundo ante esto? ¿Qué quiere usted, que me quede callado? ¿Que usted se quede callado? ¿Qué gano yo con meterme en asuntos que "no son míos"?
Si el abuso fuera contra los judíos, los rusos o ucranianos o cualquiera, también los tomaría como míos. Estamos retomando malos hábitos del pasado salvaje e incivilizado y esto nos podría suceder a todos.
Basta ya de vivir ignorando el desmantelamiento de la humanidad. Exijamos con nuestra voz, con nuestros escritos o como sea que se detengan las injusticias del mundo. Tanto el pueblo hebreo como el palestino tienen derecho a existir y vivir en paz.
Todo el mundo debe inmiscuirse y castigar al que cometa atropellos, llámese Hamás o Netanyahu o Pedro o Mr. Johnson. De lo contrario, terminemos de arrasarlo todo pensando que cuando nos quedemos "solos" seremos felices… que cuando seamos "una raza única" podremos respirar tranquilos y no viviremos pensando que la tribu cercana desea destruirnos porque seremos la única tribu.
Tal vez así ya nadie se pregunte: "¿Para qué sirve el mundo?", sino, ¿para qué servimos los hombres?
Los muertos responderán, para matarnos entre nosotros…
"El mundo está deshabitado; los animales al fin corren libremente ante la ausencia de la amenaza depredadora del hombre. Un verde, un azul, un amarillo brillan con una intensidad olvidada. El planeta se recupera de la pandemia". ¡Salud! Mínimo Mundero.
Compartir esta nota