¿Qué es una guerra proxy?
Es cuando esa guerra es subsidiada por una potencia extranjera que escoge a otro país para que luche por ella, en el terreno, aportando los muertos y la destrucción.
Es el caso de Ucrania e Israel, que son dos países a quienes los Estados Unidos de Norteamérica subsidian aportándole armas y financiamiento para que le hagan la guerra a Rusia y a los países del Medio Oriente que no son muy amigos de Washington o que poseen elementos de interés para EEUU.
En este sentido, Israel es el brazo armado que defiende los intereses norteamericanos en el Medio Oriente.
Años atrás, el poderío militar de Israel superaba el de sus vecinos por un margen considerable, pero hoy en día las cosas han cambiado y la nación iraní, luego de pacientes años de rearme y avances en tecnología ha logrado escalar a un nivel superior al de Israel, lo que se ha visto demostrado en este enfrentamiento a misilazos que protagonizan ambos países.
Israel, no solo agotó en 6 días su arsenal de misiles interceptores sino que Irán le jaqueó la electrónica de su llamada “Cúpula de hierro” que la hizo ineficiente. Ahora los sionistas dependen del rearme estadounidense.
El Medio Oriente es una zona del mundo rica en petróleo y posee un espacio estratégico para el comercio hacia Europa. Los EEUU sobre todo, Reino Unido y Francia han manejado la flota comercial que atraviesa el canal de Suez. Con el desarrollo alcanzado por China y Rusia, las relaciones comerciales con el mundo árabe han cambiado sustancialmente y la competencia disminuye las ganancias que obtenían los países mencionados al inicio. Con el advenimiento de los BRICS ya los países que responden al culto islámico dejaron de ser lacayos del imperialismo estadounidense y son más independientes al realizar acuerdos de todo tipo.
Los gobiernos estadounidenses se han vendado los ojos ante esta realidad que le ha quitado su hegemonía mundial y actúan con su esquema de hace 30 años atrás.
La misión impuesta a Israel es eliminar esta “mala influencia” que significa Irán y el movimiento de liberación de palestina, pero otro país islámico que es muy poderoso es Turquía que es enemigo de Israel y que siempre ha estado en la mira de los EEUU.
En armamento convencional Israelí ha sido superado por Irán y Pakistán que amenazó a Israel de utilizar contra ellos la bomba atómica si Israel la utiliza contra Irán. Turquía ha advertido a Israel de cuidarse de que sus misiles no caigan dentro de su territorio como ha ocurrido en el pasado.
Israel es un país pequeño con 20,325 kilómetros cuadrados, es decir menos de la mitad de nuestra media isla mientras Irán tiene 1,648 Km cuadrados, es decir más de 80 veces más grande.
Con todo el avance tecnológico actual, ganar una guerra implica ocupar el territorio enemigo lo que para Israel le es imposible ya que su ejército tiene que libraran guerra terrestre contra Hezbolá y debe cuidar su frontera con Egipto.
Los acontecimientos del Oriente Medio han vuelto loco al presidente Trump que, al parecer, no dio la orden de bombardear Irán, o si la dio, no visualizó la enorme respuesta de irán.
En definitiva, aunque la preferencia para Trump es el negocio y no la guerra, se ha visto envuelto en las redes del complejo militar industrial que lo ha abrumado.
La escalada militar pudiera tener consecuencias funestas para el mundo luego de los iraníes haber advertido a los EEUU de que el territorio estadounidense sufrirá las consecuencias de la guerra.
Irán cuenta con todo el derecho de responder a una agresión estadounidense en su territorio con un bombardeo contra los EEUU. Pero, dado que nunca se ha producido una realidad como esta, no sabemos cual sería la contra respuesta y cual sería la postura de las superpotencias.
China y Rusia están ayudando a Irán suministrando tecnología armamentista y de informática aeroespacial que aumentan las capacidades del ejército iraní. Por otro lado, Turquía, que sabe que es punto de interés de Israel tendrá que asumir una postura a pesar de que su islamismo es sunita mientras el Iraní es chiita. Mientras, el presidente Erdogan ha comparado a Netanyahu con Hitler colocándose en contra del sionismo.
Estados Unidos podrá utilizar todo su armamento contra Irán, pero será muy cuesta arriba emplear tropas en esta guerra pues las condiciones en el país norteamericano son muy malas y la corriente que impera es anti guerrerista y eso lo sabe Trump.
Es indiscutible que quien tiene en sus manos la conducción de la política exterior norteamericana es la Industria Militar Industrial por medio de la Agencia Central de Inteligencia que puede aprovechar lo tumultuoso de la situación generada dentro del territorio estadounidense para derrocar el gobierno de Donald Trump y colocar un personaje nefasto como Hilary Clinton.
El mundo transita por su momento más crítico en una situación de decadencia de un sistema imperial que puede conducirnos a la hecatombe nuclear.
Este peligro solo se puede detener por una acción dentro de los estamentos del poder estadounidense en donde se neutralicen las fuerzas culpables o por una insurrección del pueblo estadounidense.
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