El Real Madrid derrotó este miércoles al Partizan de Belgrado (93-86) en la cuarta jornada de la Euroliga y sumó su tercera victoria continental, todas en el Movistar Arena, inexpugnable en este inicio de curso, en la reaparición y debut en la competición de Théo Maledon.
El francés, ya recuperado de su lesión en el aductor corto del muslo izquierdo, fue autor de 16 puntos y una de las claves del triunfo.
Al igual que en la pasada jornada de Liga Endesa en Vitoria, los de Sergio Scariolo, que tuvieron rentas de hasta 19 puntos, acabaron sufriendo mucho para cerrar un partido que parecía controlado, ante un Partizan que llegó a colocarse a sólo cuatro puntos a menos de dos minutos para el final. Además de Tavares, resaltaron los nuevos fichajes Maledon, Okeke y Lyles para poner el 3-1 en el balance de los blancos.
El Madrid comenzó muy serio de salida con Deck y Tavares generando en el poste bajo, con ambos equipos aceptando un ritmo alto y fluido de juego. La actividad de los exteriores blancos unida a la versatilidad de Okeke al '4′ dio muchas opciones en defensa a los de Scariolo, que controlaban el rebote propio (17 en la primera mitad), mientras Partizan se desesperaba desde el tiro exterior (1/6 en triples), 13-5 (min.5).
Una penetración dividiendo la zona de Campazzo puso al Madrid 11 arriba (19-8) y obligó a Zeljko Obradovic, que fue ovacionado en su reencuentro con la afición merengue, a pedir el primer tiempo muerto del encuentro. Tras un ligero amago de mejoría, los de Belgrado no finalizaron varias acciones sencillas cerca de canasta y acabaron por debajo, 24-12, al final del primer cuarto.
El inicio del segundo periodo tuvo al canadiense Trey Lyles como protagonista, autor de ocho puntos de manera consecutiva (32-16, min. 12), y al francés Théo Maledon, que anotó sus primeros puntos con el Real Madrid en Europa. También se estrenó, con menos fortuna, el joven finlandés de 18 años Miika Muurinen en Partizan, fichado como una de las grandes sensaciones del último Eurobasket.
Si las cosas le salían en ataque al conjunto blanco, con dos triples consecutivos de Mario Hezonja, atrás sin Tavares, el equipo volvía a dejar cierta sensación de inseguridad al cerrar la zona (40-26, min.15). Salió de nuevo el caboverdiano y el Madrid volvió a verse más sólido, ayudado con varias acciones de calidad en uno contra uno de Maledon. Dos triples casi seguidos de Okeke dejaron la máxima al descanso, 52-33.
El paso por vestuarios sentó mejor a los visitantes, que recuperaron la versión más anotadora de Jabari Parker, autor de ocho puntos, en un bonito intercambio de canastas con el madridista Lyles, y despertó el ánimo y el aliento de los ruidosos aficionados serbios presentes en las gradas (61-45, min.24).
El trabajo atrás de los de Belgrado provocó tres pérdidas de balón de Campazzo y redujo la distancia a 11 puntos (61-49, min.26). Permisivo en defensa y cortocircuitado en ataque, el Madrid se encomendó a Maledon, Okeke y Hezonja para no revivir los fantasmas de Vitoria y poner tierra de por medio, 75-56.
Otro triple de Okeke (4 de 4) rompió un parcial de 5-0 liderado por el alero serbio Vanja Marinkovic (78-61 min.33), pero no cesó en el empeño de Partizan, que seguía plantando cara tras otro acierto desde el 6,75, obra de Duan Washington (82-71, min.36).
Un nuevo parcial de 5-0 a favor de los de Obradovic, con tres puntos de Osetkowski y un mate de Parker, volvían a encender las alarmas a falta sólo de tres minutos para el final (84-76). Con el runrún en las gradas, Lyles también apareció en defensa para colocar un espectacular tapón y rebajar la euforia visitante.
Sin embargo, Washington, con otro triple más, dejaba a los suyos a sólo cuatro puntos (84-40) a falta de menos de dos minutos en el marcador. El Madrid simplificó y confió de nuevo en la calidad de Lyles y Maledon para pasar una noche tranquila y amarrar, esta vez sí, una victoria que parecía segura, 93-86.
– Ficha técnica:
93 – Real Madrid (24+28+23+18): Feliz (2), Krämer (-), Deck (6), Okeke (14), Tavares (19) -cinco inicial-, Campazzo (2), Maledon (16), Llull (3), Hezonja (12), Lyles (17), Fernando (2) y Garuba (-).
86 – Partizan (12+21+23+30): C.Jones (10), Brown (8), Bonga (5), Parker (23), T.Jones (5) -cinco inicial-, Muurinen (-), Washington (11), Osetkowski (11), Bosnjakovic (-), Marinkovic (13), Lakic (-) y Pokusevski (-).
Árbitros: Emin Mogulkoc (Turquía), Borys Ryzhyk (Ucrania), Ioannis Foufis (Grecia). Sin eliminados.
Incidencias: partido de la cuarta jornada de la Euroliga disputado en el Movistar Arena de Madrid ante 8.467 espectadores.
Ahora, el Real Madrid buscara su primer triunfo fuera ante un Estrella Roja en transición
El Real Madrid, que en su única salida en la Euroliga durante la presente campaña cayó en la pista del Virtus Bolonia italiano, intentará estrenar su casillero de victorias a domicilio en la competición ante un Estrella Roja que recientemente ha realizado cambio en el banquillo, anunciando la llegada de Sasa Obradovic.
Con él, los de Belgrado fueron capaces de superar a un Zalgiris de Kaunas, que hasta ese momento estaba invicto, y buscarán repetir el triunfo contra el conjunto blanco, que viene de ganar como anfitrión al otro equipo de la capital serbia, el Partizan, en un duelo en el que ofreció una gran imagen en algunos tramos.
Los de Sergio Scariolo afrontan el choque con el base francés Theo Maledon recuperado, hasta el punto de que el miércoles disputó catorce minutos, y la duda del alero Alberto Abalde por molestias físicas. Quien sí estará es el pívot caboverdiano Walter Tavares, que cree que les espera "un ambiente muy difícil"
"Tenemos que dar ese paso que nos falta de ganar un partido fuera, de hacer un partido completo y serio desde el principio hasta el final para poder ganar fuera de casa, que es lo más complicado. Nuestra mente está en hacerlo lo mejor posible para poder ganar fuera, que es muy importante", señaló en la previa.
"Es un partido peligroso, no sabes lo que te vas a encontrar. Al final es nueva energía para ellos y para los jugadores, que querrán demostrar al entrenador que merecen estar en la cancha. Todo el mundo va a tener muchas ganas de querer hacer el mejor partido posible y si es contra nosotros mejor. Tenemos que estar lo más concentrados posibles, jugar duro y ver si podemos sacar la victoria allí", manifestó.
Tavares cree que el Estrella Roja es "un poco parecido al Partizan": "Es un equipo al que le gusta correr, dinámico, que puede tener gente abierta para tirar. Intentaremos hacerlo lo mejor posible para poder sacar la victoria porque juegan en casa y ahí van a tener mucho más acierto de lo normal".
"Lo importante para nosotros este año es intentar conseguir todas las victorias posibles como locales para que eso nos pueda dar un poco de respiro y luego salir fuera e intentar ganar lo máximo posible. Fuera es más difícil porque no tenemos a nuestra gente detrás empujando. Es el paso que nos falta por dar", completó.
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