La escritora, periodista y poeta española Aroa Moreno Durán participó del podcast Una página a la vez, conducido por la autora dominicana Ángela Suazo, en el marco de su participación en el Festival Internacional Mar de Palabras. En esta conversación, Moreno Durán reflexionó sobre el peso de la historia en la vida privada, la maternidad como territorio literario, y la escritura como forma de justicia simbólica.
Reconocida por novelas como La hija del comunista —Premio Ojo Crítico de RNE y traducida a siete lenguas— y La bajamar, ganadora del Premio Grand Continent y finalista del Premio Vargas Llosa 2023, Aroa compartió detalles del proceso creativo detrás de sus obras, así como sus vínculos con la poesía y el pensamiento político.
“La historia, incluso nuestro presente, condiciona profundamente nuestras decisiones privadas”, dijo. “Lo que se decide en espacios lejanos acaba tocando lo más íntimo de nosotros”.
Moreno Durán confesó que La hija del comunista surgió del interés juvenil por la memoria y el exilio, mientras que La bajamar nació de su experiencia reciente como madre:
“Pensé en cómo fue la crianza en el tiempo de mi madre, de mi abuela. Lo íntimo también está atravesado por la política”.
Al hablar de la dimensión emocional de sus libros, Aroa estableció una diferencia clara entre ambas obras:
“La hija del comunista la levanté hacia arriba. La bajamar la excavé hacia abajo. Esta segunda novela me cuesta releerla: está llena de mi propia revolución”.
La poesía como territorio primero
A pesar de que su visibilidad internacional ha venido de la narrativa, Aroa se reconoce antes que todo como poeta. Ha publicado los poemarios Veinte años sin lápices nuevos (2009), Jet lag (2016) y Todavía una noche (2025), su entrega más reciente.
“La poesía fue mi primera forma de escribir. Es el lenguaje que intenta la belleza incluso cuando duele. No puedo llamarla. Llega sola, como una conmoción”.
También explicó cómo su formación poética permea la estructura y el ritmo de sus novelas:
“Hay una prosa poética que se cuela. Y en la estructura también: la poesía me ha enseñado a organizar la información con sentido simbólico, con ritmo interno”.
Sobre la responsabilidad política de escribir
Al ser cuestionada sobre si la literatura tiene un deber ético, respondió con claridad:
“No es el deber de la literatura reparar la historia, ese deber es del Estado. Pero escribir puede ser un modo de explicarnos el presente, de iluminar los rincones que otros prefieren dejar en sombra”.
En esa línea, explicó que muchas historias de su país —España— siguen pendientes de una lectura pública:
“Desde 1977 se optó por tirar hacia delante sin mirar atrás. Yo quiero leer esos renglones llenos de dolor que se quedaron en los márgenes”.
Lecturas que nos hicieron
A propósito de su participación en el conversatorio “Leer para vivir”, compartió los libros que la marcaron en su infancia y adolescencia:
“Recuerdo Miguel Hernández para niños, aunque no era realmente para niños. Y luego El diario de Ana Frank. Me impresionó cómo un libro podía sostener tantas cosas, atravesar el tiempo y decirme algo tan profundo”.
También reflexionó sobre el acto de releer:
“Volver a los libros después de años es una experiencia fascinante. No solo el libro cambia: tú ya no eres la misma lectora”.
Recomendó leer a autoras como Lara Moreno, Brenda Navarro, y la periodista Leila Guerriero:
“Hay que leer autoras contemporáneas que están mirando el mundo con una fuerza crítica y literaria al mismo tiempo”.
El oficio y sus rituales
Sobre su proceso de escritura, Aroa explicó que suele trabajar con una escaleta muy detallada, aunque en su última novela —que saldrá publicada este año— tuvo que soltar el control:
“Soy de guión cerrado. Pero esta vez me dejé llevar por la escritura. Saltarme mi propia rigidez también fue parte del proceso”.
Confesó que la presión de los plazos la llevó a escribir con disciplina diaria, incluso antes del mediodía, y que el proceso de documentación fue extenuante:
“Me metí en un universo tan cerrado que terminé agotada. Lo próximo, ojalá sea pura ficción… nacida y muerta en mi imaginación”.
A quienes desean comenzar a escribir, les dejó un consejo directo y honesto:
“Grandes libros no nacen de ideas felices. Hay que leer mucho y escribir cada día. La frustración es parte del camino. Persistir es la única salida”.
Participaciones en Mar de Palabras
Mar de Palabras es el primer festival internacional de literatura en la región del Caribe, creado para celebrar la literatura, la cultura y el diálogo a través de la palabra escrita y oral. Moreno Durán estará presente en dos paneles fundamentales:
- Narrar la cicatriz: escritura, memoria y testimonio
28 de junio del 2025 Con Juan Villoro (México), Gonzalo Mallarino (Colombia), Carmen Imbert (R.D.), moderado por Margarita Cordero. - Leer para vivir: los libros que nos hicieron
29 de junio del 2025 Con Benito Taibo (México), Freddy Ginebra (R.D.), Aura García Junco (México), moderado por Sofía Rivas (México).
El episodio completo titulado “Aroa Moreno Durán: escribir desde la herida, con belleza y sin morbo” está disponible en Spotify, Apple Podcasts, y otras plataformas bajo el canal oficial del podcast Una página a la vez. También se transmite en RFI Santo Domingo los martes a las 6:00 p.m. y los miércoles a las 8:30 a.m.
Compartir esta nota