La sociedad dominicana viene demandando los derechos fundamentales de las mujeres, entre ellos, el derecho a Libertad de Conciencia, la salud y la vida, en caso de que un embarazo impida su salud física, social, mental, y también impida su vida.
Así lo establecen varios artículos de la Constitución 2010, 2015. El derecho de la libertad de conciencia y de cultos es consignado en el artículo 45. El artículo 42 contra la violencia y el 37 sobre su derecho a la vida.
En estos días la organización Alianza Cristiana Dominicana colocó este derecho defendiendo la libertad de conciencia como un derecho fundamental para las personas; no solo para la mujer, sino para la familia, el cuerpo médico de poder actuar según su conciencia y cumplir con las normativas defendiendo la vida de la mujer.
Si se excluye del Código Penal la penalización del aborto; los médicos dominicanos, todo el equipo de salud, las familias, las mujeres, podrían ejercer estos derechos; el aborto dejaría de ser un estigma y las mujeres no sufrirían los maltratos de ser consideradas asesinas, como sospechosas; no serían tratadas con violencia obstétrica, o trasladadas presas cuando su salud es precaria; cuando tengan un aborto en proceso, o pierdan un embarazo.
Si la mujer expulsa un feto tiene el temor de ser maltratada, motivada por el miedo, busca esconderlo y todo el mundo se siente con el derecho de acusarla, apresarla, condenarla, encerrarla. Tener la condición de dar vida es una tortura, sólo ella es juzgada y maltratada.
El Artículo 45 otorga el derecho a la Libertad de conciencia y de cultos. El Estado debe garantizar la libertad de conciencia y de cultos. Dejar morir, desconfiar, insultar…no son buenas costumbres, y todos esos sentimientos recaen sobre la mujer cuando hay que hacerle un aborto.
Se está informando que la Comisión Bicameral del Congreso está trabajando con la propuesta llamada “Código Genao”, con la misma obsolescencia que fue rechazada por toda la sociedad en las vistas públicas del año 2024.
Hay aspectos sensibles como proponer rebajar como los montos de años de condena por la violencia sexual a niños/niñas. La diputada Dorina Rodríguez de la Provincia Duarte abandonó la Comisión Bicameral llorando, algunos diputados trataron el tema con crudeza. La prensa lució mostrando sensibilidad y asombro.
Se siente que hay un clima emocional de más respeto y comprensión de parte de la sociedad sobre la importancia de aprobar un Código a la altura del desarrollo del país y de las demandas de la sociedad: No corrupción, no impunidad, no privilegios, no aprobar maltratos a niños/as; no restar seriedad a los temas de igualdad de género, no discriminación, y que el Código contenga las tres excepciones para permitir un aborto.
Seguimos en pie de lucha por la dignidad, la salud, la vida de las mujeres; sin ningún tipo de violencia, como es la violencia obstétrica, tal y como lo establece la Constitución en su artículo 42.
Recordemos que somos de los únicos 5 países en el mundo donde el aborto no se trata como un tema de salud, sino como un tema penal.
Las mujeres merecen ser amadas, comprendidas y respetadas en sus derechos fundamentales como el de la libre conciencia.
Avancemos pues en los derechos fundamentales de las niñas, adolescentes y mujeres.
No corrupción, no impunidad, no discriminación, no violencia.
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