Casandra Ventura, exnovia de Sean 'Diddy' Combs y testigo estrella de la Fiscalía en el juicio por tráfico sexual contra el rapero, testificó el martes 13 de mayo y afirmó que el artista la obligó a asistir a reiteradas fiestas sexuales con drogas que él organizaba.
Ventura, una cantante de rhythm and blues (R&B) conocida como Cassie, dijo que participó en las fiestas de Sean 'Diddy' Combs conocidas como "Freak Offs" durante aproximadamente una década, primero para complacerlo y después porque la chantajeó con videos de los encuentros.
“Los 'Freak Offs' se convirtieron en un momento en el que no había espacio para hacer nada más que recuperarse y simplemente tratar de sentirse normal nuevamente”, sostuvo Ventura, de 38 años, a los jurados en el tribunal federal de Manhattan.
Aseguró que las fiestas podían durar entre un día y medio y cuatro días y que Combs le daba medicamentos para mantenerla despierta y controlaba minuciosamente su apariencia.
"Si no me estaba arreglando las uñas, me estaba bronceando", se quejó Ventura. "Al cabo de un tiempo eso te va desgastando, la confianza y la autoestima".
Otro de los golpeados fue su carrera musical, con un contrato de 10 álbumes firmado en 2006 con el sello Bad Boy Records de Combs, del que sólo se produjo un álbum, testificó Ventura.
A los jurados también se les mostró un video de vigilancia de 2016, ampliamente difundido, del pasillo de un hotel de Los Ángeles, donde Combs, vestido solo con una toalla, arrojó a Ventura al suelo, la pateó y la arrastró.
Ventura narró que el incidente ocurrió después de que Combs le dejara un ojo morado durante un "Freak Off".
"Lo único que podía pensar era en salir de allí sana y salva", agregó.
Combs, de 55 años, se declaró inocente de cinco cargos graves de conspiración con fines de extorsión, tráfico sexual y transporte para ejercer la prostitución.
Si es declarado culpable de todos los cargos, enfrenta un mínimo de 15 años de prisión y podría ser sentenciado a cadena perpetua.
Los abogados de Combs aseguran que los fiscales querían criminalizar indebidamente su estilo de vida "swinger", donde él y sus novias invitaban a los hombres a unirse a ellos para tener relaciones sexuales.
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"Este caso trata sobre decisiones voluntarias tomadas por adultos capaces en relaciones consensuadas", defendió el abogado Teny Geragos ante el jurado.
El juicio comenzó el pasado 12 de mayo y podría durar dos meses. Combs se encuentra recluido en una cárcel de Brooklyn.
"El control era todo"
Ventura, que llevaba un vestido marrón, relató que comenzó a salir con Combs cuando tenía unos 20 años, en lo que pensó que era su "primera relación adulta real".
Afirmó que amaba a Combs en ese momento y quería hacerlo feliz. Pero,Combs cambió con el paso del tiempo y comenzó a golpearla con frecuencia, dejándola con ojos morados y moretones por todo el cuerpo.
"Me golpeaba la cabeza, me tiraba, me arrastraba, me pateaba, me pisoteaba en la cabeza si estaba en el suelo". sostuvo llorando.
Combs a menudo cruzaba los brazos mientras Ventura testificaba.
La mujer contuvo las lágrimas mientras describía las fiestas con gran detalle.
Dijo que tenía 22 años durante su primer "Freak Off" y que las únicas partes que disfrutó fueron cuando ella y Combs estaban solos.
Pero a menudo no era así, testificó, y Combs pagaba a los acompañantes masculinos, incluido uno apodado "El Castigador", entre 1.500 y 6.000 dólares para participar.
La cantante aseguró que no quería participar cuando otros estaban involucrados, pero tenía miedo de hacer enojar a Combs.
"Tenía los ojos negros", dijo. "La versión que me enamoró ya no existía".
Ventura también señaló que Combs controlaba gran parte de su vida y carrera.
"El control lo era todo, desde mi aspecto hasta lo que estaba haciendo ese día y con quién estaba hablando", dijo.
Combs, por su parte, se disculpó por su conducta en el vídeo.
Su abogado principal, Marc Agnifilo, indicó que el vídeo mostraba las consecuencias de una disputa por infidelidad.
Agnifilo afirmó en una audiencia que Ventura tenía antecedentes de violencia doméstica, lo que indica que podría usarlos durante el interrogatorio para socavar su credibilidad.
La mujer presentó una demanda civil en noviembre de 2023 acusando a Combs de violación y abuso sexual en serie. Llegaron a un acuerdo al cabo de un día.
Los jurados previsiblemente van a oír el testimonio de dos o tres de las otras mujeres que denunciaron a Combs y de exempleados que, según los fiscales, ayudaron a organizar y encubrir la conducta criminal.
Con Reuters
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