El Observatorio Nacional para la Protección del Consumidor (Onpeco), reiteró este lunes la propuesta del pago de un salario 14 para que las familias puedan enfrentar el gasto del año escolar.

Consideró que el gobierno debe adoptar frente al alto gasto que enfrentan las familias dominicanas en el mes de agosto, con motivo del inicio del año escolar.

La entidad propuso liberar de impuestos los principales insumos escolares —zapatos, uniformes, mochilas y útiles básicos— y establecer un incentivo adicional, como un “sueldo 14”, que permita a los hogares cubrir de manera más holgada los compromisos educativos de sus hijos.

Onpeco advirtió que más del 70% de las familias con ingresos fijos se ven obligadas a endeudarse en este período, de acuerdo con un levantamiento realizado el pasado año.

“Cada agosto es un dolor de cabeza para las familias. Muchas recurren a préstamos o adelantan la regalía pascual para poder enviar a sus hijos a clases”, indicó la organización.

Aunque el Estado suple materiales a estudiantes de planteles públicos, Onpeco recordó que los padres deben asumir gastos adicionales que no están cubiertos, mientras que las familias que envían a sus hijos a colegios privados cargan con la totalidad del costo.

Onpeco llamó a las familias a realizar “compras inteligentes” mediante la planificación del presupuesto, la comparación de precios, la compra anticipada, la priorización de calidad sobre cantidad y la reutilización de materiales en buen estado.

El organismo de defensa del consumidor subrayó que la inflación y la depreciación del peso frente al dólar han encarecido los útiles escolares respecto al año anterior, reduciendo aún más el poder adquisitivo de los hogares.

En paralelo, Onpeco llamó a las familias a realizar “compras inteligentes” mediante la planificación del presupuesto, la comparación de precios, la compra anticipada, la priorización de calidad sobre cantidad y la reutilización de materiales en buen estado.

Asimismo, recomendó evitar compras compulsivas, participar en intercambios comunitarios de libros y uniformes y exigir comprobantes de compra para garantizar sus derechos.

Entiende que con medidas de política pública y consumo responsable, el regreso a clases no tiene por qué convertirse en un golpe tan fuerte al presupuesto familiar.