Tres jóvenes fueron arrestados en el marco de una pesquisa sobre un plan de ataque terrorista. Dos de los individuos fueron acusados de conspiración criminal y posesión de explosivos, mientras un tercero deberá responder por no denunciarlos.
Dos hombres fueron inculpados el domingo en París de conspiración criminal terrorista y posesión de explosivos, y puestos en prisión preventiva, informó la Fiscalía Nacional Antiterrorista (Pnat).
Un tercer hombre fue acusado de no denunciar un delito de terrorismo y puesto bajo vigilancia judicial, según la misma fuente.
Todos son mayores de 18 años, según la Pnat, que no precisa su edad exacta ni el avance de sus planes.
Según la radio RTL, el principal sospechoso es un joven de 19 años residente en Dunkerque (Norte), que afirma en internet pertenecer al movimiento yihadista.
Durante el registro de su domicilio, los investigadores encontraron un chaleco de fabricación casera repleto de petardos conectados y un dispositivo de disparo.
Según el diario Le Parisien, había escrito un juramento de lealtad al grupo Estado Islámico (EI) y planeaba atentar en un lugar público. Según el periódico francés, uno de los detenidos llamaba en las redes a “ahogar en la sangre a los infieles”.
“En cuanto a los objetivos, los aprendices de yihadistas mencionaron varios lugares públicos en sus conversaciones, entre ellos un albergue juvenil en el norte de Francia, un restaurante y un club nocturno, así como un lugar perteneciente a la comunidad judía”, señala Le Parisien.
Su detención condujo al arresto de dos personas cercanas a él.
Una de ellas, de 21 años, es sospechosa de haberle proporcionado un arma simulada que exhibía en las redes sociales, según la prensa.
“Mi cliente no está radicalizado y no defiende ninguna teoría yihadista”, declaró a RTL su abogada, Réda Ghilaci, argumentando que “el delito de asociación de malhechores terroristas carece de rigor jurídico”.
A mediados de marzo, un adolescente de 17 años detenido en Haute-Saône (centro-este de Francia) fue acusado y puesto en prisión preventiva como sospechoso de planear un atentado violento “durante el Ramadán”.
El 26 de febrero, un argelino -que presentaba un perfil "esquizofrénico", según el ministro del Interior, Bruno Retailleau- también fue acusado de asesinato terrorista y puesto en prisión preventiva, tras matar a un transeúnte en Mulhouse (este de Francia) y herir a otras seis personas.
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