En la presente etapa de la historia humana toda organización, si se propone avanzar eficazmente, ha de  considerar las Tecnologías de Información y Comunicación- TIC- como  un componente  vital.

La realidad de las TIC es que ya hoy son parte omnipresentes en nuestras vidas. Sólo considerar ese aparato inteligente que nos acompaña permanentemente  que erróneamente  aún  llamamos teléfono.

De las TIC en las organizaciones no se trata nada más de aceptar su presencia y efectos. Si se asume un verdadero liderazgo organizacional ha de procurarse estar al día, incorporando  y proyectando sus avances.

Si es una institución universitaria está obligada a estar entre los principales exponentes y líderes de tales avances. De ahí que  en un Plan Maestro UASD 2022-2042 las TIC han de ser consideradas en lo más profundo.

Sólo al referirlo a la Docencia ya se ha dicho del extraordinaria potencial que tiene como para cambiarlo todo; pero procede repetirlo, los  impactos de las TIC  en el aprendizaje no vistos por más de 500 años, están llamados a transformarlo  y ya están transformándolo todo, incluyendo además Investigación y Extensión universitarias.

Con respecto a la Docencia-procede repetirlo- las TIC han de expresarse  en lo que se conoce hoy como Sistema de Gestión del Aprendizaje o Learning Management System (LMS) así como el Sistema de Gestión de los Contenidos o Content Management  System (CMS). Al mismo tiempo la plena incorporación de la Inteligencia Artificial-IA- avanzando con el Metaverso,  etapa superior de la evolución del Internet, la realidad aumentada, tecnología inmersiva,  avatares y la  gamificación en general promoviendo el gusto por aprender.

Al considerar además en el título de la presente entrega los procesos, no se trata de reducirlo solo a lo que puedan ser impactados por las TIC. Es que como componente fundamental de la Gerencia han de ser  vistos los procesos como Procesos Estratégicos, Procesos Operativos y Procesos de Apoyo, en una precisa incorporación a las organizaciones de forma sistemática como un factor de clara diferenciación y sobre todo de efectivo progreso.

De lo dicho referido a las TIC y los Procesos se esperaría que la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) sea también una obligada referencia, a partir de su mayor cualificación y el liderazgo nacional que ha de corresponderle.

No se trata de que de las grandes transformaciones que requiere la UASD se procuren respuestas en lo inmediato. Consiste en  proyectarlas en distintas fases en un  período de 20 años.

Las próximas autoridades universitarias pueden impulsar transformaciones tales que la UASD  alcance a ser un caso de estudio, modelo de Gerencia para el propio Estado dominicano.