1.- En nuestro país hay toda una generación de mujeres y hombres que se inició en el quehacer político en procura de crear un ambiente de contenido democrático resultado de la lucha en esa dirección.
2.- Aquellos jóvenes de ayer tenían más que justificadas razones para creer que en un tiempo cercano podíamos disfrutar de una situación en la cual la democratización de la vida pública sería el modo normal del accionar ciudadano.
3.- Basta con decir que en un pasado reciente aquí existió un movimiento sindical dirigido por sindicalistas surgidos del mismo seno de la incipiente clase obrera dominicana. Ellos fueron auténticos representantes de su sector.
4.- Conocer el trabajo llevado a cabo por Justino José del Orbe, Quirico Valdez, Julio de Peña Valdez, Barbarín Mojica, Francisco Santos y otros de la misma línea era aprender sindicalismo honesto.
5.- Los citados dirigentes que marcaron toda una época se puede decir que unos y otros fueron los continuadores de la línea trazada por Mauricio Báez.
6.- El líder sindical de ayer se orientaba por un conjunto de normas y métodos de cómo estaba llamado a funcionar un sindicato en provecho de sus miembros.
7.- La voluntad de los integrantes del sindicato, de la masa de los trabajadores, estaba expresada en la dirección que cumplía la función delegada por quienes hicieron de mandatarios.
8.- Conviene destacar que aquellos pasados líderes sindicales sabían cuál era la función del sindicato. No confundían el movimiento sindical y la lucha económica de los trabajadores con la brega política en su partido para la toma del poder.
9.- En la actualidad está muy presente en el movimiento sindical el oportunismo, que lleva a los trabajadores al conformismo, a la conciliación, a la adaptación y confabulación con el gobierno y sus enemigos de clase.
10.- En el afán por conquistar un gobierno democrático, ayer se tenía a un verdadero abanico de organizaciones que, al igual que la de los trabajadores, contaban con personas de suma valía.
11.- Está comprobado que lo principal en el trabajo de organización es la selección de los hombres y mujeres. La unión es la forma material en que se expresa la unidad ideológica.
12.- Conquistar un espacio verdaderamente democrático, por ahora, no está al doblar la esquina por la ausencia del material humano adecuado para tal propósito.
13.- Lo que señalamos en el movimiento sindical del pasado como modelo, también lo podemos indicar en otras organizaciones, como la de mujeres y de los estudiantes.
14.- Hace rato que no se ven en la plaza pública dominicana instrumentos de lucha de mujeres encabezadas por dirigentes de la talla de Altagracia del Orbe, o un frente estudiantil dirigido por estudiantes del calibre de Amin Abel y Asdrubal Domínguez.
15.- Con todo pesar escribo diciendo que, por el momento, no será fácil al pueblo dominicano contar con un gobierno de contenido democrático, porque no existen, para que se coloquen a la ofensiva, los segmentos con condiciones y capacidad para regatearle el poder a la minoría nacional y a su aliado extranjero.
16.- La existencia hoy de un grupo como dueño del poder del Estado dominicano no quiere decir, en modo alguno, que lo será para siempre. Hay que luchar para instaurar un gobierno democrático al servicio de todas y de todos.
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