Estos dos países se encuentran en el espectro de países “Enemigos de la Democracia” por los Estados Unidos de Norteamérica y están sometidos a bloqueos y sanciones que les impiden utilizar el sistema swich para transacciones que son indispensables para comprar insumos y tecnología para su desarrollo, así les impiden a muchas empresas occidentales establecer cualquier tipo de comercio mediante un bloqueo económico.

Sin embargo, vemos mucha diferencia entre la economía de uno y del otro, siendo Nicaragua un país menos desarrollado que Venezuela, el modus vivendi o calidad de vida es mucho mejor que la de los venezolanos. Ambos países tienen como motor de su economía los carburantes fósiles y ambos cuentan con fértiles tierras aptas para la gran producción agrícola que puedan hacerlos autosuficientes para su mercado interno y poder exportar.

En Venezuela, la vida cotidiana nos demuestra que sus recursos, por alguna razón, no satisfacen las necesidades de la población, o por decir de alguna manera: del ciudadano de a pie. Por tiempos no hay abastecimiento de gasolina a pesar de ser el país con la mayor reserva mundial de petróleo, deben importar rublos agrícolas que pudieran ser de los mayores productores mundiales, en cambio, Nicaragua tiene uno de los precios más bajos de la gasolina y del gas del mundo, los mercados populares y supermercados se mantienen repletos de productos agrícolas propios.

La realidad venezolana nos cuenta que luego de más de 25 años de revolución bolivariana, su gobierno ha sido incapaz de elaborar programas de desarrollo capaces de impulsar la economía de manera que se satisfagan las necesidades vitales y profesionales de sus conciudadanos. Esto es muy notable en las características de sus emigrantes: los venezolanos pertenecen a las clases medias mientras que los nicaragüenses que emigran pertenecen los estratos más pobres al igual que los emigrantes de todos los países en vías de desarrollo como el nuestro.

Esta incapacidad del denominado “chavismo”, que para mí, es “madurismo”, de manera indiscutible ha mermado el gran apoyo popular que concitaba el continuismo de Maduro, lo que con sus altas y bajas no pasa con el continuismo de Ortega.

Nicaragua, con una aparente economía más débil, presenta una estabilidad que Venezuela no ha podido emular. Nicaragua es uno de los países mayores exportadores de café con excelente calidad. El maíz es uno de sus rubros más importantes ya que su alimentación se basa en este grano, cuenta con una gran producción que le auto abastece y da para exportar. El cacao de excelente calidad ha ocupado un lugar importante entre sus principales rubros de exportación. El aguacate y la pitahaya también son productos importantes en su producción agrícola. Otros rubros como el plátano, se consume mucho en ese país al igual que el arroz y los frijoles que son parte de la dieta popular. Pero también produce productos cárnicos y productos del mar para consumo interno. Solo un 17% de la población vive en la pobreza absoluta con una población de 7 millones de habitantes. A pesar de los contrastes de clase, tiene un programa de educación de los mejores de Centroamérica, por igual su sistema de salud que sigue mejorando.

Hoy, el continuismo “Madurista” tiene su “barba en remojo”, pues sus adversarios han ganado simpatías al una gran parte de la población de a pie cansarse de “coger lucha” y las carencias que sufren a cada rato ha llevado al empobrecimiento de su clase media.

Es evidente los ejemplos de corrupción de la cúpula gobernante de Venezuela que exhibe a un hijo del presidente Maduro luciéndose en un Ferrari bañado en oro en las calles y casino de Montecarlo (existe un video que no admite discusión). La corrupción que afecta al erario va tomada de la mano del deterioro de los servicios públicos y de carencias esenciales de bienes necesarios para la vida cotidiana del ciudadano. Aun así el venezolano vive y sobrevive, pero sus expectativas vitales de mejoría se desvanecen día a día mientras la nueva generación, que no conoció el “antes y después”, se pregunta: ¿Por qué un país tan rico tiene que vivir con tan poco? ¿Por qué teniendo la reserva de petróleo mayor del mundo vivimos con escasez de gasolina e insumos proveniente de este hidrocarburo fósil? ¿Por qué teniendo bastas tierras de las más fértiles del planeta, tienen que importar productos de la tierra? Esa masa silente es la que podrá sacar al “Madurismo” del poder.

Ahora bien, ¿cuál será la actitud del ejército venezolano el cual ha estado vinculado a los quehaceres gubernamentales y que, sin duda alguna, también a los beneficios de la corrupción…?

En estas próximas elecciones el pueblo venezolano hablará y al menos nos mostrará por dónde anda el apoyo al estatus quo actual.