El multimillonario y asesor del presidente de EE. UU., Donald Trump, Elon musk, acudió este viernes 21 de marzo al Pentágono, donde pidió procesar al personal que haya filtrado al diario ‘The New York Times’ que el CEO de Tesla iba a ser informado sobre el plan del Ejército estadounidense ante cualquier posible guerra con China. Donald Trump negó la información.
El magnate sudafricano Elon Musk afirmó que cualquier trabajador del Pentágono que haya hablado con periodistas de ‘The New York Times’ debería ser procesado, después de que el diario informara que el multimillonario iba a ser informado sobre el plan del Ejército estadounidense ante cualquier posible guerra con China.
"El New York Times es pura propaganda (…) Además, espero con interés el procesamiento de quienes en el Pentágono están filtrando información falsa y maliciosa al NYT. Serán encontrados", declaró Musk este viernes en una publicación en su plataforma de redes sociales X.
Los comentarios de Musk se produjeron después de que el presidente Donald Trump también negara la historia sobre su aliado cercano.
"Ni siquiera se mencionará ni se hablará de China", declaró Trump el jueves en una publicación en su plataforma Truth Social sobre la reunión.
Un funcionario estadounidense, que habló bajo condición de anonimato, declaró a Reuters que la sesión informativa para Musk contaría con la presencia de altos funcionarios militares estadounidenses en el Pentágono y que ofrecería un resumen de diversos temas, incluyendo China.
El acceso a un plan militar celosamente guardado marcaría una fuerte expansión del papel de Musk como asesor de Trump, quien ha encabezado los esfuerzos para recortar el gasto del Gobierno estadounidense.
También generaría cuestionamientos sobre los conflictos de intereses de Musk, quien, como director de Tesla y SpaceX, tiene vínculos comerciales en China y con el Pentágono.
La Casa Blanca ha declarado previamente que Musk se recusará si surge algún conflicto de intereses entre sus negocios y su papel en el recorte del gasto del Gobierno federal.
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La semana pasada, la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, declaró que había ordenado una investigación sobre filtraciones dentro de la comunidad de inteligencia y que también está investigando las salas de chat internas para detectar cualquier conducta indebida por parte de los empleados.
Durante el primer mandato de Trump, su administración remitió más filtraciones de medios a investigaciones criminales cada año que en cualquiera de los 15 años anteriores, según registros publicados en 2021 por el Departamento de Justicia al grupo de vigilancia independiente Project on Government Oversight, en respuesta a una demanda de la Ley de Libertad de Información.
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