El primer ministro francés, François Bayrou, advirtió el miércoles que París revisaría un pacto migratorio de 1968 con Argel si la antigua colonia francesa se niega a aceptar a los deportados. La amenaza de Bayrou surge tras un ataque mortal con arma blanca ocurrido el fin de semana en la ciudad de Mulhouse, perpetrado presuntamente por un ciudadano argelino que Francia había intentado repatriar sin éxito.
Francia anunció el miércoles que revisará un acuerdo de décadas de antigüedad que facilita la migración de ciudadanos argelinos a territorio francés, a menos que Argelia acepte recibir a las personas expulsadas por las autoridades francesas.
Las ya tensas relaciones entre París y Argel se han deteriorado aún más después de que un ciudadano argelino, cuya repatriación Francia había intentado sin éxito durante mucho tiempo, presuntamente matara a una persona e hiriera a tres más en un ataque con cuchillo en Mulhouse el sábado pasado.
"El drama en Mulhouse fue posible porque este ciudadano argelino tenía una orden de expulsión y fue presentado para su repatriación en 14 ocasiones… y en cada una de ellas fue rechazado", declaró el primer ministro François Bayrou, primer ministro francés, en una conferencia de prensa.
Según un pacto firmado en 1968 entre Francia y su antigua colonia, los ciudadanos argelinos gozan de varias excepciones a las leyes de inmigración francesas, lo que les facilita establecerse en el país.
El ministro del Interior francés, Bruno Retailleau, ha pedido reiteradamente que se revise este acuerdo debido a la negativa de las autoridades argelinas de aceptar el regreso de sus ciudadanos sujetos al régimen de deportación "OQTF" (obligación de salir del territorio francés).
Bayrou afirmó que la negativa de Argelia a recibir a sus ciudadanos representa "un ataque directo a los acuerdos que tenemos con las autoridades argelinas y no lo aceptaremos", y añadió que su Gobierno tomará entre cuatro y seis semanas para revisar la aplicación del pacto de 1968 por parte de Argel.
Durante ese período, el gobierno francés presentará a Argelia una lista de personas que considera deben regresar a su país de origen. Bayrou no precisó cuántos individuos figuran en la lista, pero indicó que el número era "considerable".
"Si esto no se cumple, el Gobierno considera que los beneficios otorgados por el acuerdo de 1968 tendrán que ser reconsiderados… Existe un fuerte sentimiento de que el acuerdo ha sido traicionado", afirmó Bayrou.
En los últimos meses, las relaciones entre París y Argel se han deteriorado aún más después de que Francia reconociera la soberanía de Marruecos sobre el disputado territorio del Sáhara Occidental, cuya anexión Rabat busca que la comunidad internacional reconozca.
Esa decisión ha enfurecido a Argel, que respalda al Frente Polisario en su lucha por un estado independiente.
(France 24 con AFP)
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