El texto, no importa la forma en que nos sea presentado, es un universo sostenido por su base estética y soporte plurisémantico. Cada vez que usted dialoga con el texto, encuentra nuevos horizontes que consolidan su sentido. Eso ocurre porque el texto no es estático. La lengua que usa el sujeto creador está siempre en movimiento y, en ese proceso de interacción, entre el sujeto y el texto, el lector, en esa dinámica constante o en su dialogía con el texto, siempre encontrará nuevos valores o nuevos sentidos.
Basado en ese teorizar, es que he leído o dialogado con este libro reeditado del poeta y narrador dominicano, Rafael Peralta Romero. Esta primera reedición (enero, 2025) y la primera edición (febrero, 2025) se produjeron bajo la responsabilidad de Editorial Santuario, con diagramación y diseño de portada a cargo de Amado Santana, con foto de portada, bajo el título de "El muelle bajo el crepúsculo", de la artista Josanny Moni Soto Castillo. La obra fue impresa en Impresora Soto Castillo. 129 págs. Santo Domingo, República Dominicana.
Los veintitrés (23) relatos que integran estos "Cuentos libres" (2025) están centrados en el accionar y en el pensar del sujeto. Se trata de un narrar basado en la proyección psicológica del Ser y en su mirar del entorno que le sirve de plataforma. Lo existencial, como parte de la vida, es uno de los recursos al que recurre el sujeto-autor para presentarnos aquí sus escenas narrativas. Puedo confesarles que, por razones éticas, no quise leer antes un "Prologuillo"que el sujeto-autor sujeto presenta en este libro (ver pág. 11, obra citada), ya que no quería ni quiero condicionar mi mente de lo que el autor dice sobre su obra, ya que, aunque respeto esa decisión, espero que sea el libro o la obra la que me hable sobre el autor.
En mi dialogía con la obra, he recibido varias notas sobre el autor y su quehacer creativo. En este narrar, hay una discurridad caracterizada por la fluidez en el decir o en su relatar, por lo que el uso de la lengua, en la narración, está sostenido en el dominio de las pausas en los diálogos y la expansión de los detalles, fijados en descripciones presentes en cada escena.
Veamos: "El visitante sintió que sobre él caía una tonelada de piedras. La voz de Graciosa le pareció chillona y desempleada. Y fue una alarma contrastante con las ocasiones anteriores. Ella solía tararear esta canción que canta Marco Antonio Muñiz quienquiera que sea "que me esté tocando las puertas del alma…" Era la clave para que el visitante nocturno empujara la puerta que da al patio de la casa". (Ver relato "El zapato", pág. 59, obra citada).
Lo narrado es parte del objetivo de sorprender al lector, en aquel ambiente de intimidades, infidelidad y amoríos que allí se vive. El narrador sugiere e insinúa qué ocurre, aunque no lo proyecta de manera directa en su narrar.
Estamos ante una narrativa avalada por las vivencias y la subjetividad del sujeto-creador. Es un narrar basado en el sugerir al lector, desde un decir que asume como recurso la presentación de detalles contextuales que puedan inducir al lector a los hechos finales del relato.
Estos relatos, no breves, están presentados en tiempo pasado. En cuanto a los contextos escogidos, vemos que son parte del potencial creativo y ficcional del sujeto-autor. Son ambientes que forman parte del imaginario del sujeto creador.
"Cuentos libres" es un libro de cuentos que se apoya, no solo en los problemas de nuestros barrios, sino en la picardía de nuestra gente y en el humor y los mitos que forman parte de nuestro vivir. En estos "Cuentos libres", hay libertad en el relatar, como referente temático y expresivo que el sujeto-autor le ha otorgado en discurso narrativo. Porque aquí no hay limitaciones en la proyección del problema asumido, como referente narrativo.
No puedo cerrar mis conceptos sobre estos relatos sin poner de relieve el dominio en el uso de la simbología, presente en estas narraciones, lo que contribuye a darle una ambientación estética, al discurso narrativo del sujeto-autor en esta obra.
La ironía y el humor son también recursos expresivos que hacen de este narrar un espacio de recreación y aprendizaje, donde el lector y/o la lectora pueden encontrar un espejo ambiental, donde verse y encontrarse con sus cotidianidades vivenciales.
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