Entrevistamos al vicecanciller hondureño Antonio García sobre un nuevo caso vinculado a la política antiinmigrante de Donald Trump: la deportación de dos hondureñas, Jenny López Villela, quien fue expulsada junto a su hija de dos años, y otra mujer no identificada que viajaba con sus hijos de cuatro y siete años. El funcionario aseguró a RFI que el gobierno está brindándoles ayuda y recordó que desde 2015 más de medio millón de hondureños han sido deportados desde Estados Unidos.
Las familias de estas dos mujeres hondureñas, deportadas junto con tres niños estadounidenses —uno de ellos enfermo de cáncer— y una niña hondureña, enfrentan una situación traumática, según denunciaron sus abogados y activistas de derechos humanos. La información fue revelada por la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) y el Proyecto Nacional de Inmigración (NIP). Los tres menores son ciudadanos estadounidenses.
"Hemos tenido contacto con las familias. La institución encargada de este caso es la Secretaría de la Niñez y la Familia, no la Cancillería hondureña. El niño que padece de cáncer está siendo remitido a un hospital. No puedo ofrecer más detalles sobre ellos, ni sus nombres ni su lugar de origen, porque han solicitado confidencialidad", declaró a RFI el vicecanciller hondureño Antonio García.
Las mujeres fueron detenidas la semana pasada cuando acudieron a citas rutinarias de control migratorio con funcionarios en Nueva Orleans, estado de Luisiana. Según versiones de sus abogados, habrían sido "engañadas" por los agentes para concretar su deportación. El zar fronterizo del gobierno de Trump, Tom Homan, afirmó este lunes ante la prensa en la Casa Blanca que fueron las madres quienes "tomaron la decisión" y "solicitaron" llevarse a los menores con ellas a Honduras.
El vicecanciller Antonio García aseguró que el gobierno de Xiomara Castro investigará el caso del niño enfermo y está atento a la audiencia prevista para el 16 de mayo en relación con la situación de Jenny López Villela.
"Un juez quiere confirmar que la salida del menor no fue una deportación forzada, sino que se realizó con el consentimiento de la madre. El juez desea asegurarse de que todo se hizo correctamente. Nosotros, como autoridades, también esperamos esa audiencia para conocer su decisión", explicó el vicecanciller.
Según García, el gobierno hondureño "va a apoyar a la madre en lo que ella decida hacer. Tiene todo el respaldo del gobierno. Si el juez solicitara su regreso a Estados Unidos, Honduras hará todo lo necesario para facilitar ese retorno", precisó.
Más de medio millón de hondureños han sido deportados
El vicecanciller admitió que muchas deportaciones de hondureños desde Estados Unidos "no han seguido el debido proceso", aunque subrayó que la cooperación en esta materia entre ambos países tiene una larga trayectoria.
"Llevamos diez años recibiendo vuelos chárter con hondureños deportados. Estados Unidos envía entre cuatro y seis vuelos semanales. El acuerdo permite hasta diez vuelos por semana. Honduras se comprometió a recibir a sus compatriotas deportados y lo ha venido haciendo desde hace más de una década. Desde 2015, cuando comenzamos a recopilar estadísticas, más de medio millón de hondureños han sido repatriados. Esto ha sido posible gracias a la cooperación con Estados Unidos, que reconoce nuestra buena disposición", afirmó.
"También hemos apoyado a venezolanos. Honduras ha sido un puente humanitario para facilitar su regreso a Venezuela. Mantenemos una excelente relación con Estados Unidos en este tema", agregó García.
Estas deportaciones de menores ciudadanos estadounidenses se producen en medio del debate legal sobre un decreto firmado por Trump en enero, que busca eliminar el principio constitucional de ciudadanía por nacimiento en territorio estadounidense.
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