¿Pueden Israel y USA bloquear el programa nuclear de Teherán?

Respetando el inviolable derecho de autor, declaro que, como el tema nuclear es un asunto de grado superlativo de especialización, el presente articulo está basado en un escrito del experto Richard Nephew, que fue publicado en junio 14 del 2025.

La decisión de Israel y USA de atacar el programa nuclear de Irán en junio 2025 podría quedar en la historia como el comienzo de una guerra regional significativa o el punto de inflexión de la decisión que llevó a Irán a querer tener, finalmente, armas nucleares. También los ataques podrían recordarse como el primer momento desde “La crisis de octubre 1962” en Cuba, cuando el mundo se enfrentó al evidente riesgo de una guerra nuclear; en ese sentido, por mucho tiempo los expertos han analizado los que podrían ser los resultados de este tipo de ataque y llegar a conclusiones muy diferentes. Ahora, con esta realidad todos los expertos descubrirán cuál pronóstico fue cierto.

Todavía en este mes de junio es demasiado temprano para saber cuál va a ser el resultado final de este conflicto, porque podrían pasar semanas antes de que los expertos entiendan el alcance de los daños que Israel y USA han causado. También, saber cómo Irán se podrá recuperar sabiendo que esos ataques solamente han realizado en su primera etapa. Solo después de profundas evaluaciones se podrá determinar si los ataques fueron un éxito que bloqueó la capacidad nuclear de Irán.

Entre los factores a ser analizados hay que averiguar si los ataques detuvieron totalmente o disminuyeron seriamente los avances de Irán en su programa nuclear. Para constatar la gravedad de los daños hay que tomar en cuenta en grado extremo qué era necesario para que los bombardeos de Israel y USA destruyeran todos los equipos básicos para construir una bomba nuclear. Asimismo, sería necesario que el bloqueo de la fabricación de la bomba implicaría que Israel y USA lograran desaparecer todo el material radiactivo que Irán venia almacenando desde hace varias décadas, que incluiría principalmente el uranio enriquecido.

En otro contexto, cuando no se había desarrollado ampliamente la Inteligencia Artificial ni los misiles guiados, Israel fue capaz de destruir completamente la infraestructura nuclear del Irak de Sadam Husein mediante ataques repetidos de aviones Cazabombarderos que despegaron de Tel Aviv burlando totalmente la vigilancia de los radares de aquella época. Ese indiscutible éxito de Israel se debió a que toda la infraestructura de Irak para construir bombas atómicas y el material radioactivo necesario estaba colocado a nivel de tierra, a la vista de todos.

Sin embargo, en el caso de Irán su infraestructura para construir bombas atómicas y su material radioactivo estaba colocado en forma oculta a nivel subterráneo a más de 100 metros por debajo del nivel de la tierra, por ello no era posible que un ataque de Israel con misiles a larga distancia fuera efectivo para bloquear el programa nuclear de Irán. Por ello, fue necesario un bombardeo de USA con su “Bomba Chuck Norris”.

Desde tiempos bíblicos Israel ha sido un pueblo exitoso en todo tipo de batallas, aun en circunstancias en que tenía inferioridad de equipo bélico y de número de combatientes; esto se ha  puesto de manifiesto en múltiples  ocasiones: Guerra de independencia 1948, “Guerra de Seis días 1967” y Guerra de Yom Kipur 1973.

Sin embargo, en las luchas actuales, basadas principalmente en misiles manejados con IA, la ventaja significativa de Israel consiste en  poder contar con la “Inteligencia real” del Mossad, que es una organización cuya capacidad de espionaje se considera que es superior a la de la CIA y la KGB. Este espionaje ha servido para que Israel elimine físicamente a jefes militares y a técnicos nucleares de Irán.

Siguiendo la lógica histórica de la finalización de conflictos, no sería absurdo que la actual tregua culmine con un acuerdo definitivo en el cual Israel y USA incluirían una cláusula mediante la cual Irán se compromete a descontinuar su programa nuclear con fines militares, concentrándose exclusivamente en el desarrollo atómico con fines pacíficos, obligándole a aceptar estrictas inspecciones de la Organización Internacional de Energía Atómica.

Es decir que el objetivo de Israel y USA culminaría implementándose por vía diplomática no por bombardeos.