Según la neuropsicología, cuando una persona se interesa en leer una letra, el cerebro activa una pequeña región de la corteza occipital izquierda; mientras que, cuando la persona se motiva a leer una oración o un texto, el cerebro activa e involucra múltiples áreas cerebrales de la corteza occipital izquierda.
Por su parte, la corteza occipital izquierda es una estructura ubicada en el área del hemisferio izquierdo del cerebro, cuya función principal es procesar todas las informaciones visuales que el cerebro percibe en tiempo real.
Asimismo, la corteza occipital izquierda se encarga de recibir, interpretar y procesar la información visual que proviene de los ojos, la percepción de los colores, los objetos y el movimiento espacial.
Además, el hemisferio izquierdo del cerebro es responsable de las habilidades del lenguaje, el razonamiento lógico, la memoria verbal, el análisis y la resolución de problemas complejos.
En tal sentido, un grupo de expertos del Instituto Max Planck de ciencias cognitivas y cerebrales en los seres humanos, ubicado en Múnich, Alemania, revisó alrededor de 150 estudios sobre las áreas cerebrales que se activan durante la lectura.
Al segregar e interpretar los resultados de dichos estudios, los expertos del referido Instituto lograron identificar científicamente los patrones generales de la actividad cerebral durante la lectura de las palabras, las pseudopalabras, las oraciones y los textos complejos.
No obstante y según comprobaron los expertos, durante el proceso de lectura se activan áreas específicas en la corteza occipital izquierda, según el tipo de lectura que realice una persona con condiciones cognitivas normales.
Según los expertos, durante la lectura en voz alta, el cerebro no sólo activa áreas del lenguaje, sino que activas regiones vinculadas con el movimiento y el sonido; mientras que, durante la lectura mental o en silencio, el cerebro activa todas las regiones cerebrales que tienen que ver con la interpretación del sentido de las palabras, las oraciones y los textos.
También constataron, que las decisiones léxicas de identificar palabras y sus significados, activan áreas cerebrales relacionadas con la toma de decisiones, lo que resalta la complejidad del procedimiento cognitivo involucrado en la comprensión de la lectura y la agilidad mental de cada persona en particular.
Al profundizar en los estudios, los expertos en ciencias cognitivas y cerebrales del Instituto Max Planck observaron, que la lectura silenciosa de palabras y/o pseudopalabras, activó consistentemente las cortezas izquierdas orbitofrontal, la cerebelosa y la temporal; mientras que, las decisiones léxicas de identificar palabras o significados, activó las áreas del cerebro que son relevantes para las tomas de decisiones.
De nuestro lado, los especialistas en higiene y salud mental sabemos, que la corteza orbitofrontal izquierda, es la parte del cerebro ubicada en el lóbulo frontal, justo por encima de las órbitas oculares. En tal sentido, dicha corteza desempeña un papel crucial en el procesamiento de la información emocional y en la toma de decisiones, especialmente en situaciones que tienen que ver con las recompensas y los castigos.
Por su parte, la corteza cerebelosa izquierda es una capa externa de sustancia gris que cubre el hemisferio cerebeloso izquierdo. Como tal, dicha corteza es fundamental para la coordinación de los movimientos, el equilibrio, el aprendizaje motor y recibir y procesar las informaciones cerebrales sensoriales.
De su lado, la corteza temporal está ubicada en el lóbulo temporal izquierdo del cerebro, la cual juega un papel crucial en el procesamiento del lenguaje, la memoria y la audición. Asimismo, dicha corteza juega un rol importante en la comprensión del lenguaje hablado y de la memoria verbal y, a su vez, es responsable de reconocer los objetos y la percepción de los movimientos.
Según sabemos los neuropsicologos, la región frontal inferior del cerebro regula el lenguaje, el control motor y las funciones ejecutivas; mientras que, la ínsula juega un papel crucial en la conciencia corporal, las emociones, la percepción del dolor y la toma de decisiones importantes y/o complejas.
Como usted ha podido observar en el cuerpo de este artículo, los aportes de los expertos en ciencias cognitivas cerebrales humanas del Instituto Max Planck de Alemania, son valiosísimos para la comprensión de los aspectos relacionados con la lectura y la agilidad mental de las personas.
En tal sentido, los aportes a los que nos hemos referidos en el párrafo anterior, son insumos extraordinarios para los neuropsicólogos y los neurólogos, comprender científicamente, las complejidades de las arquitecturas neuronales cerebrales involucradas en los diferentes tipos de lecturas y el lenguaje.
Finalmente, los descubrimientos de los expertos del Instituto Max Planck de Alemania permiten que los especialistas en higiene y salud mental profundicemos aún más, sobre los procesos neuronales que están detrás de las dificultades que tienen los/as niños/as para aprender a leer, como es el caso de los/as niños/as diagnosticados/as con trastornos de Dislexia, así como sobre los demás trastornos de aprendizajes conocidos hasta ahora.
“La mente es un musculo, ejercítalo” (ANONIMO).
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