Electromagnetismo, una joya: la electrónica y sus aportes

“El afán del día no entra en conflicto con dedicar algunos minutos para mejor comprender dónde estamos y qué somos”.

Una característica ya plenamente probada por la ciencia es que el campo electromagnético cual conjunción de los campos eléctricos y magnéticos es parte fundamental del mundo en que vivimos, aunque por mucho tiempo no se hizo totalmente evidente.

Hoy el campo electromagnético se ha hecho más que presente; pero de lo que se trata en esta oportunidad es de sus aplicaciones a partir de una disciplina de la ciencia y la tecnología que, desde el electromagnetismo, ha construido su propia senda, impactando muy positivamente la calidad de la vida del ser humano.  Hablamos de la electrónica.

Así como los electrones cual partículas constituyentes del átomo se les hacen mover mediante un generador en un conductor eléctrico lo que explica la electricidad, en la electrónica son también los electrones los protagonistas.

El fundamento de la electrónica se comprende mejor a partir de lo elemental o básico de un dispositivo crucial en su origen y que luego evolucionara en distintas fases o etapas, nos referimos al llamado tubo al vacío o válvula al vacío; consiste en un tubo de vidrio sellado conectado a una fuente de electricidad, con un filamento emisor de electrones (cátodo), otro colector de electrones (ánodo) y un tercero llamado rejilla de control, todos al interior del tubo de vidrio sin aire.

El cátodo calentado emite electrones siendo la rejilla la que modula la cantidad de electrones que llegan al ánodo. De ahí una de las bases para la generación, amplificación y recepción de ondas electromagnéticas, el funcionamiento de interruptores, la conmutación y el procesamiento de información.

El tubo al vacío fue solo el inicio de la electrónica. A partir de sus fundamentos en la actualidad y más que motivo para otro artículo al respecto, ha trascendido hacia la microelectrónica de estado sólido en la que esos principios se amplían de forma extraordinaria, a partir de la más impresionante miniaturización; con los transistores sustitutivos de los tubos al vacío y  otros componentes como los semiconductores, pero en un material sólido generalmente de silicio; surgiendo de ahí junto a otros componentes, los circuitos integrados o chips,  ya en escalas microscópicas,  de tal manera que pueden disponer hasta miles de millones de transistores;  óigase se bien, miles de millones de transistores presentes en tantos, variados y hoy ya imprescindibles equipos electrónicos.

De las grandes expresiones del electromagnetismo cual joya y en sus trascendentes aplicaciones, ahí está la electrónica entre nosotros y de qué manera.