“El día en que la judicatura tenga miedo, no habrá justicia para nadie”, Juez de la Ejecución de la Pena, José Manuel Arias Martínez.

Cuando la opinión pública y los ciudadanos en las Redes Sociales empezaron a cuestionar la decisión del Juez de la Ejecución de la Pena de San Cristóbal José Manuel Arias Martínez, de otorgar un medio libre (permiso de trabajo) al ex embajador Donni Santana –condenado a 20 años de prisión por violación sexual e incesto-, también salió a relucir la libertad condicional que el magistrado concedió a José Esteban Ciprián Lebrón (alias Chuky), condenado a 10 años de prisión por su implicación en el atentado que casi le costó la vida al ex Grandes Ligas dominicano, David Ortiz.

Los titulares daban cuenta de que Chuky había caído abatido en un intercambio de disparos con miembros de la Policía Nacional a menos de un año de haber sido beneficiado con la libertad condicional, lo que ponía en entredicho el trabajo de Arias Martínez como juez de la Ejecución de la Pena.

Sin embargo, de acuerdo a videos de cámaras de vigilancia a los que ha tenido acceso Acento, -al parecer- “Chuky” fue mortalmente herido dentro de una jeppeta en movimiento producto de viejas cuentas del bajo mundo, y quizá de la última: Haber negociado un acuerdo de colaboración con la Fiscalía y los jueces a cambio de una pena menor en el caso de David Ortiz, lo que implicó testificar en contra de los otros encartados, a quienes les fueron impuestas penas privativas de libertad de 30, 20, 10 y 5 años de prisión.

Según los registros del Tribunal de la Ejecución de la Pena, Ciprián Lebrón estuvo firmando religiosamente el libro de control todos los meses, hasta caer producto de un aparente acto de sicariato en Herrera, y no de un intercambio de disparos con miembros de la Policía Nacional, como circuló en redes sociales.

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José Esteban Ciprián Lebrón (alias Chuky).

Para el juez de la Ejecución de la Pena, José Esteban Ciprián Lebrón estaba cumpliendo con la libertad condicional que le había otorgado, sin embargo, a raíz del escándalo generado por el medio libre que le otorgó al ex embajador Donni Santana, salió a relucir la muerte de Ciprián Lebrón como si éste estaba delinquiendo en ese momento.

Intentamos saber a través del relacionista de la Policía Nacional si existía una orden de arresto contra él, pero ni recordaba el caso y no tenía una respuesta, mas como dice el juez, de haber existido una orden por un ilícito penal nuevo, la habrían remitido a la Dirección para el Medio Libre del Sistema Penitenciario y Correccional de modo que se suspendiera la libertad condicional, y eso nunca ocurrió, en otras palabras: Para el Sistema Penitenciario y Correccional de la República Dominicana, Chuki no volvió a delinquir.

“Chuki” o limpiar el nombre de un convicto asesinado en la calle

Los otros dos hombres que también murieron esa noche en esa balacera fueron víctimas colaterales del gatillero. Uno era un chico con ciertos problemas mentales que siempre estaba merodeando las esquinas del barrio, y el otro un señor que estando en su casa salió a ver qué pasaba fuera, y se le pegó una bala.

“El día en que la judicatura tenga miedo, no habrá justicia para nadie”, son las palabras con las que el juez de la Ejecución de la Pena de San Cristóbal, José Manuel Arias Martínez, cierra este caso.

Algunos privados de libertad no lo saben o lo ignoran, pero muchos de ellos están más seguros en las cárceles dominicanas que en las calles, es una decisión de elegir donde morir, si dentro de una prisión o fuera.

Patricia Báez Martínez

Periodista

Patricia Báez Martínez es periodista profesional, escritora y activista ecológica.

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