El Centro de Análisis y Estudio de la Comunicación (Caesco) y Centro de Promoción de la Atención Integral a la Infancia (Proinfancia) hicieron un llamado conjunto a los medios de comunicación dominicanos para que asuman un rol más activo en la visibilización de la salud y educación menstrual como temas fundamentales para la equidad, el desarrollo y la cohesión social.
En ese orden, explicaron que los medios tienen el poder de transformar realidades cuando ejercen una comunicación con propósito, comprometida con los derechos humanos y la inclusión.
"En un país donde aún persisten tabúes y silencios sobre la menstruación, informar con enfoque educativo y ético se convierte en un acto de justicia social", expresaron.
Destacaron que un estudio realizado por Batey Relief Alliance (BRA) y la Universidad de Minnesota reveló que hasta el 20 % de las adolescentes en comunidades vulnerables como Monte Plata falta entre 2 y 3 días de clases al mes por no tener acceso a productos menstruales.
Algunas niñas recurren a materiales inadecuados como papel periódico, bagazo de caña o esponjas, lo que compromete su salud física y emocional.
Asimismo, muchas niñas inician su menstruación sin información previa ni acompañamiento adecuado. “Esto no solo genera ansiedad, sino que puede derivar en prácticas insalubres, mitos o embarazos no deseados”, señaló Martha Rodríguez, directora de Proinfancia.
Proinfancia señaló que en colaboración con sus socios nacionales e internacionales (AIRAC, Compassion International, HFL y Distritos 4060 de Rotary RD) han impactado a más de 50,000 niñas y adolescentes en el país con educación menstrual y kits de higiene menstrual reutilizables.
Estos kits son producidos por mujeres en situación de vulnerabilidad, generando además oportunidades de ingresos s y empoderamiento económico.
De su lado, Caesco indicó que se ha observado que los temas relacionados con la salud menstrual tienen escasa cobertura sistemática en los medios dominicanos. La mayoría de las veces solo se abordan durante efemérides, sin continuidad ni enfoque pedagógico.
“Esto no es un problema de espacio, es un problema de prioridades. Una comunicación con propósito es aquella que visibiliza lo invisible, que rompe estigmas y aporta a la cohesión social desde la información veraz y responsable”, afirmó Alba Martínez, miembros de la junta directiva de Caesco.
En ese orden, las organizaciones consideraron que visibilizar la educación menstrual en los medios aporta beneficios clave, tales como: informar con claridad, dignidad y valor a niñas, familias y comunidades; previene riesgos sanitarios y embarazos no planificados; reduce el ausentismo escolar causado por la pobreza menstrual.
Además, impulsa políticas públicas sensibles a la realidad femenina y refuerza la equidad de género y la cohesión social desde la base.
Finalmente, las organizaciones manifestaron que visibilizar la menstruación no es un lujo ni una moda, sino un acto de justicia, dignidad y cohesión social, donde los medios tienen la responsabilidad de educar, incluir y transformar.
“Hablar de menstruación no es tabú, es transformar. La dignidad empieza con el derecho a saber”, precisaron.
Compartir esta nota