Estados Unidos y la Unión Europea se han visto sumergidos en un cruce de amenazas arancelarias, que este jueves sacudió a los productores de vino y champán europeos que según el mandatario estadounidense, Donald Trump, podrían enfrentar impuestos de un 200%.
Donald Trump amenazó este jueves a Francia y a la Unión Europea (UE) con imponer aranceles del 200% a su champán, vino y otras bebidas espirituosas si no se retiran los próximos aranceles del 50% que la UE impondrá al whisky estadounidense.
Este miércoles, la UE anunció aranceles a una serie de productos estadounidenses, como el bourbon, las motos y los barcos, en represalia por los recargos estadounidenses del 25% sobre el acero y el aluminio que entraron en vigor ese mismo día. La entrada en vigor sería a partir del 1 de abril, un día antes de los aranceles llamados “recíprocos” que pretende Donald Trump.
“La Unión Europea, una de las autoridades más abusivas y hostiles del mundo en materia de impuestos y derechos de aduana, (…) acaba de imponer aranceles del 50% al whisky. Si estos aranceles no se eliminan inmediatamente, Estados Unidos impondrá rápidamente aranceles del 200% a todos los vinos, champanes y productos alcohólicos de Francia y otros países de la UE”, escribió el presidente estadounidense en su red Truth Social.
Los exportadores franceses de vinos y licores reaccionaron con contundencia, afirmando estar “hartos de ser sistemáticamente sacrificados por cuestiones que no tienen nada que ver con nosotros”, y pidiendo “a la Comisión Europea que muestre un poco de realismo”.
Francia lista a contraatacar
El ministro francés de Comercio Exterior, Laurent Saint-Martin, aseguró que Francia seguía “decidida a contraatacar” ante la reacción estadounidense, deplorando “la guerra comercial que (Donald Trump) ha decidido desencadenar”.
Los productores europeos de este tipo de bebidas alcohólicas pidieron a la UE y a EE.UU. que dejaran a su sector “al margen de sus disputas”, una petición que no fue atendida por la Casa Blanca.
Un basto mercado estadounidense
Estados Unidos es el primer mercado internacional del sector. Las ventas francesas allí crecieron un 5% en 2024, hasta alcanzar los 3.800 millones de euros, sobre todo las exportaciones de vino y coñac, según la Federación Francesa de Exportadores de Vinos y Espirituosos.
La gran mayoría de los productos alcohólicos procedentes de Europa entran en Estados Unidos libres de aranceles, y sólo un 2% se aplica a los vinos espumosos, según datos de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Con AFP
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