El Parlamento Europeo vuelve a estar en el punto de mira por un presunto caso de corrupción. Esta vez se trata de un posible trato de favor de antiguos y actuales eurodiputados a la empresa china Huawei.
Un centenar de policías registraron este jueves 13 de marzo las oficinas de la multinacional Huawei en Bruselas y los domicilios de varios trabajadores de la empresa que ejercían como lobbistas en la Eurocámara y que han sido detenidos.
Según las informaciones publicadas por la prensa, la multinacional presuntamente pagaba a miembros del Parlamento con transferencias, regalos como teléfonos móviles y reservados para ver partidos de fútbol.
Aproximadamente una quincena de eurodiputados estaría bajo el radar de los investigadores.
Despliegue de la 5G
La multinacional china habría intentado tener un trato de favor para que la legislación europea ayudara al despliegue del 5G y a las telecomunicaciones del gigante asiático, después de que Estados Unidos le cerrara la puerta hace seis años.
El caso ha coincidido en plena sesión parlamentaria en Estrasburgo, donde estaban reunidos todos los eurodiputados, y pone nuevamente bajo sospecha a la institución europea dos años después del escándalo del Qatargate.
En esta trama, Qatar pagó a varios eurodiputados y asistentes dinero en metálico para limpiar la imagen del país.
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