En Guatemala, la policía pide colaboración ciudadana para localizar a 19 de los 20 pandilleros del grupo Barrio 18 que siguen prófugos en una semana en la que ha habido cambios en la cúpula de seguridad del gobierno para calmar las críticas al presidente Bernardo Arévalo. También se ha reforzado el control de las fronteras.
En un solo día las autoridades guatemaltecas han recibido 121 alertas ciudadanas, sin embargo hasta el momento sólo se ha conseguido capturar a uno de los 20 pandilleros que se fugaron de la cárcel Fraijanes 2. La fuga se produjo en agosto, pero la información trascendió este pasado domingo.
Los prófugos pertenecen a la pandilla Barrio 18, declarada por Estados Unidos como grupo terrorista, algunos están acusados de violación, extorsión, asesinato y trata de personas. La policía pide a la ciudadanía colaboración y asegura que se garantizará el anonimato y la seguridad a cualquier persona que dé datos sobre los fugados.
El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, ha sido esta semana muy criticado por las fallas de seguridad y la corrupción en los centros penitenciarios. Para conseguir un poco de aliento, el mandatario decidió cambiar a la cúpula de seguridad con la destitución del ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, de José Portillo, viceministro de Seguridad y de Claudia Palencia, viceministra de antinarcóticos y seguridad fronteriza.
La tasa de homicidios ha aumentado en Guatemala de 16 por cada 100.000 habitantes a 17 y medio. Un aumento leve pero que representa el doble que la media mundial.
Esta semana el Congreso guatemalteco ha iniciado debates sobre un proyecto de ley para aumentar las penas de prisión a los pandilleros.
Compartir esta nota