Una persona ha fallecido y al menos nueve han resultado heridas en lo que ya se considera como el peor incendio del verano 2025. Cerca de 2.000 bomberos, asistidos por aviones y helicópteros cisterna, intentan apagar las llamas. Es un dispositivo excepcional porque los expertos consideran este incendio como uno de los más rápidos jamás registrados en la historia de Francia. Ha destruido más de 16.000 hectáreas en menos de 24 horas.
Este miércoles 6 de agosto, la Unión Europea aseguró estar preparada para intervenir y ayudar a apagar lo que se considera ya el peor incendio de los 9.000 registrados este verano en Francia.
Unos 2.000 bomberos siguen movilizados en el departamento francés de Aude, en el sur del país, donde ya se han quemado 16.000 hectáreas.
Una mujer mayor murió en su vivienda en la localidad de Saint-Laurent-de-la-Cabrerisse, otra persona se encuentra desaparecida y dos personas resultaron heridas, una de ellas en estado grave por las quemaduras, según la prefectura local. Siete bomberos han resultado heridos por inhalación de humo.
El fuego se ha propagado por 16.000 hectáreas de terreno y por 15 municipios. Se considera que avanza a la velocidad de un humano caminando, alcanzando hasta 6 km por hora. Es dos o tres veces más rápido de lo registrado en el pasado.
El incendio se desató en la tarde del 5 de agosto en la localidad de Ribaute y provocó la evacuación de zonas de camping y viviendas.
Sequía y vegetación muerta
El departamento de Aude lleva tres años consecutivos afectado por la sequía y las restricciones de agua. Además, con un viento soplando a 60 km por hora, el incendio se esparce en la gran cantidad de leña y vegetación muerta disponibles en su camino.
La justicia ha abierto una investigación para determinar el origen del incendia, que el primero ministro francés François Bayrou calificó de "catástrofe de magnitud inédita".
"Se han movilizado todos los recursos del país", dijo por su parte el presidente francés, Emmanuel Macron.
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