El británico John Clarke, el francés Michel H. Devoret y el estadounidense John M. Martinis ganaron este 7 de octubre el premio Nobel de Física por sus investigaciones en el campo de la mecánica cuántica.
El trío, conformado por el británico John Clarke, el francés Michel H. Devoret y el estadounidense John M. Martinis, fue galardonado con el Nobel de Física "por el descubrimiento del efecto túnel cuántico macroscópico y la cuantización de la energía en un circuito eléctrico", señaló el jurado.
Camino hacia el "desarrollo de la próxima generación de tecnologías cuánticas"
La mecánica cuántica describe cómo funcionan las cosas de manera diferente a escalas increíblemente pequeñas, a nivel de partículas. Por ejemplo, cuando una pelota normal golpea una pared, rebota.
Los galardonados fueron distinguidos por experimentos realizados en la década de 1980, que demostraron que una partícula, a escala cuántica, puede atravesar directamente un muro comparable. Un fenómeno conocido como "efecto túnel".
El Comité del Nobel destacó que sus hallazgos "han abierto el camino al desarrollo de la próxima generación de tecnologías cuánticas, en particular la criptografía cuántica, los ordenadores cuánticos y los sensores cuánticos".
"Es maravilloso poder celebrar cómo la mecánica cuántica, con más de un siglo de antigüedad, sigue ofreciendo sorpresas. También es enormemente útil, ya que la mecánica cuántica es la base de toda la tecnología digital", declaró Olle Eriksson, presidente del Comité del Nobel de Física, en un comunicado.
"La sorpresa de mi vida"
Clarke, de 83 años, enseña en la Universidad de Berkeley, California, y Devoret, de 72, es profesor en la Universidad de Yale y en la Universidad de California, a la que también está ligado Martinis, nacido en 1958.
"Por decirlo suavemente, fue la sorpresa de mi vida", declaró Clarke a los periodistas por teléfono al enterarse de la noticia. "Nunca se me ocurrió de ninguna manera que esto pudiera ser la base de un Nobel", añadió, explicando que estaban tan centrados en sus experimentos que no se dieron cuenta de sus aplicaciones prácticas. "Nunca se nos pasó por la cabeza que este descubrimiento tendría un impacto tan significativo", afirmó.
El año pasado, el premio Nobel de Física fue concedido al estadounidense John Hopfield y al británico-canadiense Geoffrey Hinton por sus trabajos pioneros sobre el aprendizaje automático, una herramienta empleada en el desarrollo de la inteligencia artificial.
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