En Moscú, el Kremlin reaccionó a la propuesta de tregua de 30 días acordada entre Kiev y Washington en Arabia Saudita el martes 11 de marzo. Las autoridades rusas no descartan nada, pero esperan a que su socio estadounidense les informe de los detalles precisos y de las modalidades de aplicación del alto el fuego.
Moscú parece buscar ganar tiempo continuando la expulsión de las tropas ucranianas de su territorio en la región fronteriza de Kursk.
Hasta ahora, Vladimir Putin siempre se ha opuesto a un alto el fuego temporal. Quiere lograr el cese total de los combates sobre la base de los territorios conquistados por las fuerzas rusas y concluir lo que denomina una paz a largo plazo, basada en el respeto de los intereses legítimos de todos los habitantes y pueblos que viven en la región.
Una posible conversación entre Putin y Trump
Para el presidente ruso, una tregua ofrecería un respiro que permitiría a las tropas ucranianas reagruparse y rearmarse, con vistas a reanudar eventualmente el conflicto. Por eso, el portavoz del Kremlin dijo que era demasiado pronto para que Moscú comentara la tregua de 30 días propuesta. Según el portavoz del Kremlin Dmitri Peskov, los enviados estadounidenses Marco Rubio y Mike Waltz informarán a las autoridades rusas del contenido preciso y los detalles del acuerdo.
Se espera que las conversaciones tengan lugar en las próximas horas. Y Dmitri Peskov no descarta la posibilidad de que Vladimir Putin y Donald Trump hablen directamente entre sí, incluso en un plazo “bastante breve”, si la situación lo requiere. Sólo entonces sabremos si Donald Trump ha logrado influir en las posiciones de Vladimir Putin.
China ha “tomado nota”
Los aliados occidentales de Ucrania instaron a Rusia a tomar partido. “La pelota está ahora en el tejado de Putin”, declaró el canciller alemán, Olaf Scholz, en la plataforma X. El martes por la tarde, los dos máximos responsables de la Unión Europea, Ursula von der Leyen y el Presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, habían acogido con satisfacción el acuerdo y afirmaron que ahora se esperaba una decisión del líder ruso. China, que se presenta como parte neutral en el conflicto, dijo el miércoles que había “tomado nota” de la propuesta de alto el fuego.
En cualquier caso, los aliados europeos “tendrán que implicarse”, dijo Rubio a la prensa sobre los europeos durante una escala técnica en Irlanda, y añadió que Rusia pedirá que se levanten las sanciones que se le impusieron desde el inicio de la guerra hace más de tres años.
Desconfianza
El presidente ucraniano Volodimir Zelenski puntualizó cauteloso que no confía en Rusia en cuanto a la aplicación de una tregua. Y declaró que espera que Estados Unidos aplique medidas "fuertes", incluyendo sanciones, si Moscú no acepta la propuesta de tregua.
Tras la reunión ucraniano-estadounidense, a algunos soldados ucranianos destacados en el este les cuesta creer en el alto el fuego previsto o temen que beneficie al enemigo ruso. Oficialmente, Rusia aceptará la tregua, pero “no la respetará, eso es 100% seguro”, declaró a la AFP un oficial con el nombre de guerra de “Maltchik”. En Kiev, la propuesta estadounidense también ha tenido una acogida desigual: “Dada la reciente situación política en Ucrania, no creo que esta tregua de 30 días ayude a alcanzar la paz”, declaró a AFP Oksana Evsukova, una profesora.
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