Lograr una sociedad igualitaria ha sido una lucha histórica, y República Dominicana enfrenta un enorme desafío en cuanto a la participación de las mujeres dentro de la política.

Todavía en el país no se logra la equidad de género dentro de la Ley Orgánica de Régimen Electoral, pero tampoco en la administración pública.

De esta manera, los hombres siguen ocupando las sillas y espacios que le corresponden a las mujeres dentro del Congreso Nacional, los ayuntamientos, el sector empresarial, en el Poder Ejecutivo, en el sector transporte, sindicatos, entre otras plazas.

Así lo considera la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez, quien entiende que se debe cambiar esta realidad histórica del país porque afecta el nivel democrático y el desarrollo de la sociedad.

Mayra Jiménez, ministra de la Mujer. Foto: Mery Ann Escolástico. Acento.com.do

La funcionaria menciona la modificación a la Ley de Régimen Electoral, aprobada en diciembre pasado por el Senado de la República, y en la que se rechazó una propuesta hecha por la Junta Central Electoral (JCE) de una paridad de género en un 50-50. En cambio, el Congreso acogió un 60/40.

El problema, según señala la ministra, es que las mujeres siempre irán en desventaja con esta cifra porque, a pesar de que la legislación no establece para qué género está destinado el 60 por ciento, esa cantidad le es concedida a los hombres y el restante 40 por ciento a las mujeres.

“Inmediatamente hablamos del 60/40 se asume de manera automática que es 60 para los hombres y 40 para las mujeres. Eso le dice a usted de lo naturalizado que está en la sociedad que las mujeres estemos participando en condiciones de desigualdad. La sociedad la ve como algo normal o natural. Y ni es natural ni es normal”, afirma Jiménez.

Para la ministra, esto es un retroceso, porque además de “quedarnos estancadas” en el 60/40, se vuelve a lo que ya se había superado, de que esa representación se produzca en cada demarcación electoral y no en la propuesta nacional de cada partido.

“Significa que los partidos, movimientos y organizaciones, a la hora de recibir las listas de sus candidatos, si por ejemplo, San Pedro de Macorís tiene cinco diputados y diputadas, estamos obligados a en ese territorio llevarlo a un 60/40, y eso no debe ser porque estamos frente a partidos políticos que están muy masculinizados, con una dirección casi hegemónica de los hombres”, precisa.

Indica que dentro de los partidos políticos mayoritarios las mujeres están en desigualdad en términos de participación.

“Y usted me dirá: ¿por qué pasa esto? porque estamos hablando de un tema de poder. Los hombres no ceden poder”, precisa.

Por esta razón, considera Jiménez, se hace necesario que los Estados adopten normas y políticas que aseguren el avance en este tema, y “que haya el cumplimiento de una norma que de alguna manera obligue a los partidos y a los políticos a que avancemos hacia el camino de la igualdad”.

La modificación de la Ley Orgánica de Régimen Electoral de más de 325 artículos fue estudiada por una Comisión Especial del Senado de la República y aprobada en primera lectura en diciembre pasado.

Después, el pasado día primero de febrero, el Senado volvió a aprobarla en segunda lectura y remitió el proyecto a la Cámara de Diputados.

El pasado 13 de febrero los diputados también aprobaron el proyecto que finalmente fue promulgado por el presidente Luis Abinader el domingo 19 de febrero.