El historiador y presidente de la Academia Dominicana de la Historia, Juan Daniel Balcácer, dijo que la descripción de Dante en la Divina Comedia es una especie de cómic si se le compara con la tragedia que vivieron los dominicanos luego del mes de junio de 1961, cuando Ramfis Trujillo asumió personalmente la venganza contra los héroes que complotaron para eliminar la dictadura.
Explicó que los conjurados para eliminar a Trujillo, que no se conocían entre sí, salvo contadas excepciones, eran 25 personas, de las cuales solo se salvaron 6 o 7, pero que 14 fueron asesinados por la dictadura, y además fueron asesinados algunos de los hijos y otros familiares de los héroes del 30 de mayo, además de que las mujeres fueron maltratadas, agredidas, pisoteadas.
Explicó que los principales torturadores y criminales de los sucesos a partir de junio de 1961, además de Ramfis Trujillo, fueron Roberto Figueroa Carrión y Jonny Abbes García, que se dedicaron a la tortura, a saquear las residencias donde vivían los héroes y sus familias. Entre los asesinados había adolescentes que nada tenían que ver con la política ni con la planificación de la eliminación de la dictadura.
La forma en que descubrieron a los tiranicidas fue fácil, porque hubo un herido, Pedro Livio Cedeño, a quien hubo que llevar a una clínica, y porque en la escena del tiranicidio quedaron una pistola de Juan Tomás Díaz, el carro de Salvador Estrella Sadhalá y el propio vehículo de Trujillo, además de que el chofer del dictador, Zacarías de la Cruz, fue al centro médico Marion y dio informaciones sobre la muerte de la bestia.
El general Arturo Espaillat, que estaba en El Pony, vio pasar el carro del tirano y luego otros vehículos, dicen que escuchó los disparos y fue a la casa del jefe de las Fuerzas Armadas Puso Román, los que fue un impedimento para que la segunda fase del plan se ejecutara, que era un golpe de Estado y establecimiento de un gobierno civil provisional.
La segunda fase del plan indicaba también eliminar a todo compañero que no pudiera valerse por sí mismo, si resultaba herido, el fusilamiento de los hermanos del tirano, a excepción de Héctor Trujillo, deportación de las hermanas y demás parientes del dictador, proclamación de Juan Tomás Díaz como jefe de las Fuerzas Armadas, por no más de seis meses, integrar una Junta de Gobierno civil, arresto de personeros de la dictadura, y ejecución de los esbirros, cerrar la frontera con Haití, declarar como propiedad del Estado las empresas y riquezas en manos del dictador y su familia, y cortar las telecomunicaciones y emisoras de radio, o ocuparlas y ponerlas al servicio de las autoridades nuevas.
Juan Daniel Balcácer dijo que Juan Bosch no hizo nada para perseguir a las fuerzas y criminales trujillistas porque llegó al gobierno con la consigna de borrón y cuenta cueva, y allí se integró lo malo y lo bueno, y porque los trujillistas dieron apoyo a esa candidatura para evitar a Viriato Fiallo.
Declaró que aún no es tarde para establecer una Comisión de la Verdad, frente a los crímenes que se cometieron. Porque permanecen familiares y descendientes directos de las víctimas. Aquí no hubo reconciliación, pero tampoco nadie reclamó nada en justicia.
Explicó que cualquier intento de reivindicar el trujillismo es fallido y “no va a ninguna parte”, porque el pueblo dominicano “se acostumbró a vivir en democracia, con libertades públicas, libertad de expresión, sin ofender”. También dijo que la libertad que vivimos en la sociedad dominicana “se debe a esa hazaña de los héroes del 30 de mayo”.
Juan Daniel Balcácer fue entrevistado por el periodista Fausto Rosario Adames, en su programa ¿Y tú…qué dices? que se divulga todos los días en AcentoTV.
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