En la entrega Trabajos académicos: tipos y estructuras, se expresa que “Los más comunes son el comentario de texto, resumen, reseña, monografía, ensayo, tesina y tesis”. De estos 6 tipos, los últimos 4 requieren “realizar una investigación sobre el tema escogido y recurrir a distintas fuentes que proporcionen la información necesaria […] La información utilizada debe ser correctamente citada (Vargas Santiago, 2021).
Las referencias bibliográficas y los lineamientos de estilo son un elemento fundamental en los trabajos académicos. Se afirma que las citas y referencias bibliográficas son imprescindibles para considerar que un trabajo cumple con todo el rigor de un trabajo científico y permite al lector profundizar y comprobar el sustento de los argumentos. Por eso, la elaboración de citas y referencias bibliográficas es una actividad necesaria y obligatoria cuando se realizan investigaciones.
Las referencias bibliográficas consisten en la lista de todos los documentos u otras fuentes utilizadas para la elaboración y presentación de trabajos de investigación. Su función “es apoyar, refutar y/o confirmar las conclusiones que se muestran en el documento, a fin que el investigador dé fe de los trabajos de otros autores” (https://biblioteca.utec.edu.sv/web/APA-6Ed.pdf). Mientras que una cita es cuando se menciona un texto o solo una idea o frase de otra persona en el desarrollo de un trabajo. Se coloca una referencia para enviar al lector a la fuente de dónde se obtuvo la información.
En la elaboración de trabajos académicos es fundamental hacer un uso responsable, ético y legal de la información que se incluye. De ahí que “Citar correctamente a los autores no solo es una cuestión de protocolo y respeto al trabajo de otros profesionales, sino que también implica aspectos legales” (universia.net, 2018). Los documentos consultados y utilizados deben quedar registrados en el mismo texto, con la finalidad de aportar rigor académico y ayudar al lector a encontrar información.
La normalización de las citas es de suma importancia en favor de la rigurosidad de los datos referenciales y las bibliografías de los textos que producen investigadores, profesores y estudiantes (Kolesas, 2008). De ahí que la información utilizada hay que clasificarla y presentarla correctamente, para que se pueda evaluar la veracidad de los datos al consultar cualquiera de las fuentes empleadas. Además, el uso de diversas fuentes y el contraste de ideas proporcionan rigor científico y solidez intelectual al texto elaborado. De no hacerlo, se estaría apropiando de ideas, pensamientos o conceptos de otros, cayendo en una práctica académica deshonesta, conocida como plagio. De modo que referenciar y citar adecuadamente es un acto de honestidad, de ética y de valía profesional, afirman López Gil, et al (2017).
Las citas bibliográficas cumplen propósitos como reconocer a los autores de las fuentes utilizadas. Ofrecer a los lectores del texto la oportunidad de consultar la fuente directamente y evitar el plagio.
Durante una investigación se utilizan ideas y estudios de otros investigadores. De manera que cuando se utiliza una fuente bibliográfica, se requiere elegir entre citar bibliográficamente o parafrasear esa fuente. En el primer caso, se copia literalmente la cita y en el segundo se presenta la idea de otra persona con palabras propias. Además, se informa al lector dónde encontrar dicha fuente. Esta última parte constituye una referencia.
Un estilo de referencias bibliográficas es un conjunto de reglas que indica la forma en que se referencian las fuentes utilizadas en textos escritos. De ahí que se publiquen manuales que contienen ejemplos, instrucciones y explicaciones. En la actualidad existe una gran variedad de estilos de referencias bibliográficas, pero años atrás cada disciplina aplicaba sus propias reglas. Hoy día, la tendencia de las instituciones educativas de nivel superior y universitario es escoger un estilo único, siendo los más populares en los países hispanohablantes APA, Chicago y Harvard. Por sus facilidades y uso solo se tratará el estilo APA.
Las normas de la American Psychological Association (APA), constituyen actualmente uno de los estándares más reconocidos para la transmisión del conocimiento científico y académico. Su primer esbozo data del año 1929 hasta el presente, convirtiéndose en un extenso manual para la divulgación del trabajo científico. Son utilizadas por disciplinas como la psicología y otras ciencias sociales. Luego se expandieron a otros campos de investigación.
Este estilo se basa en un “sistema fecha-autor” en el que se coloca la cita de forma abreviada en el texto y se completa con un apartado de referencias al final del documento donde aparecerán todas las referencias utilizadas en la investigación, organizadas en orden alfabético. Cada una debe tener sangría francesa, definida como el espacio que se deja del lado izquierdo en la primera línea del primer párrafo. Pasos para aplicarla en Word.
El estilo APA es el más utilizado por estudiantes, investigadores y profesionales de las ciencias sociales y del comportamiento, pero además existen softwares para generar referencias bibliográficas en cualquier estilo. Al respecto, Bas Swaen (2015) ha desarrollado el Generador APA de Scribbr que genera automáticamente referencias precisas y citas en el texto de forma gratuita.
La lista de referencias incluye solo referencias que tengan datos recuperables. Las normas APA se basan en una serie de reglas para redactar las referencias bibliográficas, incluyen: 1) Orden: Las referencias se organizan en orden alfabético, según los apellidos de los autores citados. 2) Estructura: Apellidos, título del trabajo, año, lugar de publicación y enlace si es un documento digital. 3) Interlineado: El interlineado de la lista de referencias debe ser de 1.5 cm. 4) Posición: Las referencias se sitúan antes de la bibliografía. 5) Estilo. Sangría francesa.
Cada vez que se agregue una cita a un trabajo, se debe incorporar a las referencias. Por tanto, todo lo que se ha incluido en las referencias es porque está citado dentro del cuerpo del trabajo de investigación. Es importante tener presente que la Biblia y el Corán, y las referencias a comunicaciones personales se citan en el texto, pero no se incluyen en la lista de referencias.
Las referencias bibliográficas incluyen las fuentes impresas, electrónicas, audiovisuales o de otra naturaleza que han sido citadas en un texto. Esta lista se presenta ordenada alfabéticamente. Para registrar estas referencias, hay normas fijas que dependen del estilo de referencias que se utilice. Un estilo de referencias ampliamente utilizado es el formato APA.
Las normas APA se basan en un sistema autor-fecha en el que se cita la fuente de forma abreviada dentro del texto y en la lista de documentación se enumeran todas las referencias.
Los estilos de referencias bibliográficas se caracterizan por la forma en que se incluye la fuente en la lista de referencias y por los tres sistemas de cita de una fuente dentro del texto: Autor-fecha, numérico y de notas. Ver ejemplos.
El formato de citación y de estilo APA establece los estándares en cuanto a las citas y referencias de un trabajo escrito, así como los lineamientos generales referentes al formato de presentación de un texto académico. Se considera el más clásico de todos los estilos y puede usarse en el teléfono celular e incluso sin conectarse a internet. Basta con elegir el tipo de trabajo para el que se quiere citar y completar una serie de campos, luego la app automáticamente crea las referencias bajo este formato. Cuando se elige un estilo se debe utilizar en todo el documento.