Porque: Pocas ilusiones sobreviven al contacto con la realidad.

La moda puede, en su momento,
establecer algunos tipos de
prioridades que perecen al
paso del tiempo.

De muchos es sabido que, en la guerra, cual que esta sea, aun ganando, siempre algo se pierde y hoy, donde el mundo realmente está en guerra, las pérdidas son incontables sin que haya un triunfador o un definitivo perdedor, ya que no lo hay ni lo habrá, solo destrucción y odio es que queda. Basado en esto es que cuestionamos si habrán considerado en algún momento nuestros políticos en hacer una pausa, solo una pausa para pensar en la moderación de sus acciones frente a las heridas causadas al paciente, es decir, al pueblo.

Esto, con la finalidad de que no perezca por su culpa el manoseado sistema democrático, del cual tanto aluden, pero, haciendo muy poco para que, por lo menos si no se desarrolla, no continue su rápida degradación. Y no es mucho pedir solo un respiro entre sus guerras intestinas de intereses particulares o partidarios con la finalidad de encontrar el camino intermedio entre los intereses generales y sus intereses particulares. No, me parece que no se sienten dueños, amos y señores de este su feudo. Y desconozco si lo mejor fuese decirles simplemente Mazel tov o lanzarnos al ruedo, en cuyo resultado pocos han pensado.

Ante la realidad de que el clientelismo político o partidista ha subrogado la profesionalidad honesta por el servilismo y la sumisión de los intereses nacionales a los personales, hasta podríamos hablar de guerra, no aquella de armas a tomar o rebeldías absurdas y suicidas si no, más bien, tomando en consideración aquellos que muchos desconocen, que es aquel que el objetivo de la guerra no es, precisamente ganar muchas batallas, más bien, es ganar una paz duradera, justa, equitativa y donde reine la ley, pero con la única condición de que sea igual para todos, no como ahora nos encontramos.

O acaso, ¿por qué hacer marchas callejeras con el fin de obtener que se haga justicia contra tal o cual hecho? La respuesta es simple; porque los llamados a ejecutar las leyes no lo hacen; porque la policía nacional es un fiasco, un barril que sale más caro que hasta los pobres padres vividores, perdón, quise decir de familia; porque los organismos de justicia, jueces o fiscales han sido maleados por los políticos y sus intereses personales y partidarios; porque la inteligencia para el gobierno bien operar es disfuncional y porque todavía no ha aparecido una “rarae ave” que le ponga el cascabel al gato.

Y por qué no progresamos dentro de este sistema, quizás sea por la desaparición de todo aquello que desde siempre fue considerado como bueno y que hoy ha sido degradado por una falsa modernización o libertinaje, incluyendo hasta el modo de hablar, y es que todo ha sido infiltrado por personas que han nacido dentro de la cautividad de todas las pobrezas, que, en su vida, jamás han tenido la facultad, aun y la tengan de frente, de poder ver una opción que los saque de esos infortunios y, aun las vean, las desechan, porque prefieren, como los cerdos, vivir en el estercolero que ya les es muy familiar.

Y, lo peor de todo esto, es que lo saben y, en las penumbras de sus frustraciones, al mirarse en soledad frente a un espejo, solo ven su rostro estampado por el engaño de sí mismo.

Ante esto, el silencio no puede ser la norma, ya que, aún hay muchos que se niegan a permitir el ser apresados dentro de un arnés antinatural que determinados grupos pretenden imponer a los hombres que se consideran libres. En tanto esto pasa, muchos solo contemplan, cual, si fuesen el pabilo de una vela quemándose, el cómo poco a poco, al igual que este se convierte en cenizas, de igual manera se han ido volviendo cenizas los valores morales, patrios y cívicos. ¡Sí señor!

Rafael R. Ramírez Ferreira

General retirado

Mayor General ® E. N. Nacido en Sto Dgo, D.N., Estado civil: Soltero Tres Hijos: Ramfis Rafael; Rissel y Ramsés Funciones desempeñadas: Director General de entrenamiento; Director del J-2, Inteligencia de las FF.AA; Rector del Instituto Especializado de estudios superiores; Presidencia de la Comisión Permanente de Reforma de las FF.AA. Presidente de la Junta de Retiro, FF.AA Vice-ministro de las FF.AA. Inspector General de las FF.A.A Presidente del Consejo Académico Superior de Educación Presidente de la Dirección Nacional de Drogas (DNCD) En la actualidad Asesor Sobre operaciones y estrategia.

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