“El afán del día no entra en conflicto con dedicar algunos minutos para mejor comprender dónde estamos y qué somos”.
El gran conocimiento ya logrado sobre el mundo subatómico ha tenido como una de sus principales bases la realización de comprobaciones mediante experimentos.
En el descubrimiento del electrón a partir de lo cual se comenzó a entender que el átomo no era único e indivisible; así como posteriormente el núcleo atómico, el protón y el neutrón, la acción experimental era relativamente modesta y de muy pocas personas con participación directa.
Con el Gran Colisionador de Hadrones (LHC, de Large Hadron Collider) considerado como la máquina más grande construida por el ser humano, se ha logrado uno de los más trascendentales avances. Además de una inédita acción colectiva de cooperación de países, así como de expertos en las correspondientes áreas; más 10 mil científico y cientos de universidades y laboratorios, así como de 100 países en todo el mundo. El LHC fue construido por la Organización Europea para la Investigación Nuclear -CERN- entre 1989 y 2008 cuando entró en funcionamiento por primera vez. El LHC se encuentra en un túnel de 27 kilómetros de circunferencia y 175 metros de profundidad en la frontera francosuiza.
Lo de colisionador corresponde a una generación de dispositivos diseñados para impulsar partículas que se hacen mover en direcciones contrarias, a velocidades próximas a la velocidad de la luz con el soporte de potentes imanes; para hacerlas girar y chocar, creando así otras partículas a partir de la energía de movimiento o energía cinética; lo de hadrones es porque principalmente las partículas son protones, es decir, formados por quarks.
El LHC está llamado a ampliar significativamente el conocimiento del mundo subatómico; pero ya su contribución es del mayor alcance, pues el 4 de julio de 2012 se confirmó experimentalmente el medio que da masa a las partículas, Campo de Higgs. Como contribución tecnológica “marginal” pero extraordinaria, en el CERN se creó la ¡Web! que hoy intercomunica al mundo.
Ante lo maravilloso del LHC, la pregunta sobre la inversión que ha requerido. Se estima en 10 mil millones de dólares y de ahí otra pregunta, si es mucho dinero; pero depende desde qué enfoque se considere. Pues comparado solo con una guerra, la Guerra de Ucrania en 3 años ya es mas de 30 veces superior al costo del LHC, además con 150 mil vidas perdidas y más de 10 millones de desplazados.
No dejar de pensar y aspirar por un mundo de paz que multiplique las maravillas como el LHC.
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