Esta misma semana transcurrieron las elecciones para elegir el candidato a la alcaldía de la ciudad de Nueva York, cuyos resultados electorales son dignos de un profundo análisis sociopolítico e histórico.
No se trata de un asunto entre republicanos y demócratas; ni siquiera del liderazgo o no de Trump o Biden, ni de la aceptación o rechazo de uno de ellos o de los dos al mismo tiempo.

El resultado de las elecciones de Nueva York para elegir al nuevo alcalde de la ciudad más singular del mundo, quiérase o no, es una clara señal del engendro de un proceso inadvertido, muchas veces por los políticos y cientistas sociales, sobre los cambios que se han estado produciendo y estarán produciéndose en las grandes ciudades de los países de las grandes economías, o del primer mundo, como se ufanan en decir los grandes poderes que habitan sobre la Tierra.

Las movilizaciones de Washington y en otros estados de Estados Unidos; en Francia y otras naciones de Europa, constituyen un fiel reflejo de los cambios sistémicos que coinciden con el final de una época políticamente agonizante y el nacimiento de otra, que no se trata de si se es capitalista o socialista, sino de un hartazgo frente a lo mismo: de la mentira vendida como propaganda para manipular a sus propios ciudadanos en las grandes naciones del mundo. Debemos sumar la suspensión de los servicios sociales. La inflación y la renta son dos factores que también están creando un gran descontento ciudadano.

Increíblemente, los ciudadanos de las potencias han develado las realidades por la fuerza del poder multicomunicacional que ha desbordado la ortodoxia de la manipulación mediática, desde el enfoque de Noam Chomsky.

Y es que, desde la humildad más extrema y la marginalidad social más espantosa, el ciudadano puede construir su verdad y desconstruir los mitos que oscurecieron la vida de sus ancestros o abuelos.
El nuevo alcalde de Nueva York lo es Zohran Mamdani, un joven, hijo de inmigrantes, de 34 años, nacido en Uganda, quien obtuvo, entre siete candidatos a la alcaldía de esa ciudad, un 50.4% de los votos. Si le sumáramos los votos de los otros cinco aspirantes no republicanos, ninguno de ellos, frente al único que lo es, Curtis Sliwa, con una votación favorable de 7.1%, tendríamos la suma total de un 92.9%. Este porcentaje, casi absoluto, representa a diferentes tendencias políticas.

Sin embargo, esta es una realidad política y electoral muy importante en unas elecciones cualquiera, pero este resultado político y la cifra estadística simplemente pueden expresar la matemática de una coyuntura de un proceso eleccionario, no así la crisis profunda de la sociedad estadounidense, que apenas da señales de un fenómeno en desarrollo que ineludiblemente ocurrirá como resultado de la crisis sistémica que está afectando a muchos países y que todavía se nos hace difícil imaginar.

Rafael Nino Féliz

Educador

Nacido en El Cachón, Barahona. Graduado de Licenciado en Educación con mención en Filosofía y Letras en la Universidad Autónoma de Santo Domingo UASD. Se desempeñó como técnico de varios departamentos del Ministerio de Educación. Director de Organización de la Oficina de Desarrollo de la Comunidad (ODC). Director de la Dirección de Bienestar Estudiantil; Tesorero General y dos veces Vicerrector de Extensión. Actualmente docente en las cátedras de Teorías y Crítica de la Literatura y Letras Básicas. Ha publicado más de diez libro de poesía.

Ver más