España en una posición correcta y valiente de defensa a la humanidad y de rechazo al salvajismo de una guerra que desconoce todo sentido de respeto a la dignidad del Pueblo palestino y a la vida humana, asume un liderazgo necesario y vital para la PAZ.

Más de uno ha definido que el plan de guerra israelí no es de una guerra, en el sentido estricto de la palabra, sino; una matanza sin precedente de niños y niñas palestinas. Los desplazamientos forzosos, destrucción de toda infraestructura: escuelas, mezquita, hospitales, refugios de la ONU, hogares, universidades, empresas, iglesias, sistema de salud y de agua, sistema productivo de seguridad alimentaria y cultura propias de asentamientos humanos; tienen como fin hacer exitoso como nunca, “el proyecto sionista de limpieza étnica, extinción del pueblo palestino, borrar el imaginario colectivo palestino en Gaza y apoderarse de toda la región de Palestina”.

Con la caída del imperio de Otomano 1922 en alianza en la I Guerra Mundial con Alemania (1914-18) y, de ser el imperio más poderoso de la historia, se asesinaron 1,5 millones de armenios, muertos en “masacres y en “marchas de la muerte durante su expulsión del territorio otomano”.

Los desplazamientos obligados y amenazados por el ejército israelí de ir del sur al norte y del norte al sur, de no se sabe hacia dónde quién sabe; es el modelo de guerra practicado contra los armenios reeditado en Gaza-Palestina por Israel contra la población civil de: niñas, niños, jóvenes, ancianos, hombres y mujeres palestinas.  El ritmo de agresión que desarrolla Israel con la guerra en Gaza contra palestinos y palestinas provocada por Hamás, alcanzará la horrorosa cifra en pérdidas humanas de más de 75 mil víctimas y una devastación total de Gaza en esta segunda oleada de bombardeos y ataques directos a la población civil.

La soberbia sionista que ha llegado al extremo de no respetar los límites que impone el derecho humanitario internacional: el Papa, el secretario General de la ONU, el presidente de España y cualquier otro jefe de estado o de gobierno que exprese su horror por los crímenes cometidos contra civiles e inocentes niños y niñas, por parte de Israel y quienes le apoyan de forma incondicional en la llamada guerra contra el terrorismo de Hamás, han sido agredido moral y políticamente de forma  abominable.

Lo mínimo de que han sido objeto o tildados el o los que se han atrevido a expresar su repulsa contra tal salvajismo de Israel; es de terrorista o apoyadores de terrorismo. Israel ha hecho de las resoluciones de la ONU y de la ONU misma, medios adecuados para pasárselo por donde mejor le ha parecido.

Thomas Jefferson, 3er. presidente de Estados Unidos y su defensa de la democracia, de la igualdad, del derecho de los pueblos a disponer de ellos mismos y del derecho natural de los hombres «a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad».  Derecho consignado en la constitución estadounidense y enarbolado en la doctrina jefferiana es: la lealtad incondicional a que se deben los que levantan y defienden el sueño americano de Thomas Jefferson de libertad, Democracia y Educación.

La antítesis de este ideal, jefferiano, lo fue el acuerdo Sykes-Picot firmado por Francia e Inglaterra (16 de mayo de 1916) orientado a repartir los territorios de oriente próximo, Asia menor y de manera específica la Palestina actual, en control del derrotado Imperio de Otomano. Por decisión inglesa, cuyo representante Herbert Samuel personaje este  que sugirió (1914), se entregara territorios palestinos para un hogar y fundar un Estado judío en recompensa por favores de guerra (mulería-judía) contra el Imperio Otomano.

La llamada Liga de Naciones repartió a británicos la costa del mar Mediterráneo hasta el Río Jordán, Jordania, el sur de Irak y una pequeña área que incluyó los puertos de Haifa y Acre. A los franceses se repartió el control del sureste de Turquía, el norte de Irak, Siria y Líbano. Los árabes lucharon al lado de los ingleses contra el imperio Turco de Otomano bajo promesas hechas a los árabes por el coronel T. E. Lawrence (británico) de una patria nacional y árabe unificada en el área de Gran Siria, hecho no cumplido.

¿Cuál es el derecho de Israel a someter seres humanos al horror criminal a que son sometidos palestinos y palestinas, de manera especial niñas y niños, con su guerra salvaje?

Movido por esta situación tan grave como trágica en Gaza, he fijado para fines de conclusión de semestre a mis estudiantes de Filosofía, Ética, Semiótica, Filosofía de la Educación y Derecho de Prensa y Filosofía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), un análisis crítico de esta Guerra desde una perspectiva del ensayo de Juan Bosch: Breve Historia de los Pueblos Árabes.

¡Por Dios que paren la Guerra!

Fuentes revisadas:

Bosch, J. (1991) Breve Historia de los Pueblos Árabes, Santo Domingo, República Dominicana, Editora Alfa y Omega.

OPINIÓN ACENTO/ El Estado de Israel y el Sionismo del siglo 21 (3)

Juan Tomás Olivero 10/08/2014   ·   09:23 AM

https://acento.com.do/opinion/el-estado-de-israel-y-el-sionismo-del-siglo-21-3-8163581.html