Cuando del oro se trata las opiniones deben ponderarse con mucho cuidado. Tal y como lo describió Frank Moya Pons en su libro “El oro en la Historia Dominicana” (2016), el valor del metal deslumbra y la codicia por poseerlo desquicia a cualquiera. En consecuencia, opinar sobre el contrato de la Barrick Gold con el Estado Dominicano puede resultar arriesgado para un neófito. Pero en una democracia y bajo un estado de derecho al ciudadano le asiste la potestad de opinar sobre cualquier tema sin conocer todo en detalle. Por eso a continuacion presentamos nuestra impresión de que dicho contrato debe renegociarse.Captura-de-Pantalla-2025-02-23-a-las-2.31.49-p.-m-530x728

El soberano derecho del ciudadano a opinar se torna mas robusto cuando se apela a la rápida evaluacion de la inteligencia artificial. Una consulta a ChatGPT-4 resume el asunto: “El contrato entre el Estado Dominicano y Barrick Gold para la explotación de la mina de Pueblo Viejo ha sido objeto de múltiples renegociaciones debido a las condiciones inicialmente desfavorables para el país. Originalmente, el acuerdo firmado en 2002 establecía que el Estado recibiría solo un 3% de las ganancias netas de fundición, mientras que Barrick Gold se beneficiaba con el 97% restante. Además, el contrato permitía a la empresa comenzar a tributar al país únicamente después de recuperar completamente su inversión.”

“Estas condiciones generaron críticas y llevaron a una renegociación en 2013, durante la cual se acordó que el Estado recibiría un 51.3% de los beneficios si el precio del oro alcanzaba los 1,600 dólares por onza, además de ingresos adicionales por impuestos y regalías. El contrato original entre República Dominicana y Barrick Gold presentaba una participación estatal significativamente menor en los beneficios, lo que motivó las renegociaciones para equilibrar la distribución de ganancias y asegurar una mayor retribución para el país. Este patrón de contratos iniciales con beneficios limitados para el Estado, seguido de renegociaciones impulsadas por aumentos en los precios de los minerales y presión pública, es común en la industria minera a nivel global.”

Mas allá de los beneficios que genera al Estado la operación de la mina, los aspectos de la remediación ambiental y los beneficios a las comunidades aledañas son de los más controversiales. ChatGPT-4 reporta: “En 2016, el Ministerio de Energía y Minas y Barrick Pueblo Viejo firmaron un acuerdo para implementar un Plan de Administración Medioambiental del Estado, destinado a remediar pasivos ambientales históricos de las operaciones anteriores de Rosario Dominicana. Este plan, con una inversión total de más de 100 millones de dólares, incluye el cierre de la presa de colas de Mejita y la intervención en cuerpos de agua afectados, como la Cañada Honda y los ríos Maguaca y Margajita. Barrick aportó 75 millones de dólares, mientras que el Estado asumió alrededor de 25 millones de dólares.” Quien escribe desconoce si estos acuerdos fueron cumplidos, pero se sabe que el permiso ambiental para una nueva presa de cola ha sido otorgado por el Ministerio Ambiente.

En cuanto a los beneficios a las comunidades aledañas, la IA los resume así: “A principios de 2025, surgieron conflictos debido a un proyecto de expansión de la mina. Las comunidades locales, como El Naranjo, se opusieron a las propuestas de reubicación y consideraron insuficientes las compensaciones ofrecidas por la empresa, especialmente en relación con tierras y cultivos de cacao, fundamentales para la economía local.”

“En resumen, aunque existen disposiciones contractuales y compromisos para abordar la remediación ambiental y la compensación a las comunidades en proyectos mineros, la implementación efectiva de estas medidas sigue siendo un desafío constante en diversos países de América Latina.” Las manifestaciones surgidas recientemente contra la Barrick obedecen mas a las aspiraciones de las comunidades aledañas respecto a la justa compensación para su mudanza. Pero tambien ha habido voces que anticipan severos danos ecológicos derivados de una nueva presa de cola, incluyendo una exigencia de que la misma sea una presa seca.

Los conflictos y desavenencias sobre remediación ambiental y los beneficios a las comunidades, sin embargo, no son los motivos por los cuales el Estado debe emprender una renegociación del contrato vigente con la minera. La misma IA dice: “Dado que el precio de la onza troy de oro ha alcanzado los 2,900 dólares, es recomendable que el Estado Dominicano considere renegociar el contrato con Barrick Gold para ajustar los términos financieros y asegurar una participación más equitativa en los beneficios derivados de la explotación minera.” Es por esa misma razón que quien escribe tambien piensa que el Estado debe abocarse a una nueva negociación y un nuevo contrato con la Barrick.

ChatGPT-4 sugiere algunas enmiendas específicas que podrían introducirse en un nuevo contrata: 1) “Implementación de un Impuesto sobre Ingresos Inesperados (Windfall Tax): Establecer un impuesto adicional que se active cuando el precio del oro supere un umbral predeterminado, por ejemplo, 1,600 dólares por onza”; 2)Revisión de la Participación en las Utilidades Netas (PUN): Modificar la estructura de la PUN para que el porcentaje de participación del Estado aumente progresivamente en correlación con el incremento del precio del oro”; 3)  “Ajuste de Regalías e Impuestos: Incrementar las tasas de regalías y otros impuestos aplicables a la extracción de oro, asegurando que el Estado reciba una compensación justa por la explotación de sus recursos naturales.”

Apelando a la cláusula pertinente del contrato el gobierno debe anunciar su interés en una nueva negociación. Para llevarla a cabo podría nombrar una comisión compuesta por, por ejemplo, Ramon Alburquerque, Luis Carvajal, Apolinar Veloz, Osiris de Leon, Jorge Luis Polanco y un par de representantes de Participacion Ciudadana y de FINJUS. Al oro hay que caerle atrás cuanto antes, a pesar de que [El agua vale más que el oro”. Y procede dar crédito a la inteligencia artificial por haber corroborado con la hipótesis de quien escribe de que es tiempo de renegociar el mencionado contrato.

Juan Llado

Consultor económico

Con entrenamiento universitario en los campos de la psicología, las ciencias políticas, la educación y la economía, obtuvo títulos universitarios en EEUU y se desempeña actualmente como consultor económico y articulista. Su experiencia de trabajo ha sido diversa, incluyendo misiones de organismos multilaterales y gerencia de proyectos internacionales. El principal hobby es la investigación y las tertulias vespertinas en el Centro Histórico de Santo Domingo. Aunque no partidarista y un libre pensador, ha abrazado últimamente la causa de la alternancia en el poder como requisito cumbre para fortalecer la democracia dominicana.

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