La semana pasada la elección del nuevo papa fue tendencia mundial dejando sorprendidos a todo el mundo al escogerse una persona que nadie daba como favorito excepto las apuestas de Las Vegas.
El escogido fue el cardenal norteamericano Robert Francis Prevost quien escogió como nombre León XIV y las razones que expone para esta elección fueron las siguientes:
«Precisamente, al sentirme llamado a proseguir este camino, pensé tomar el nombre de León XIV. Hay varias razones, pero la principal es porque el Papa León XIII, con la histórica Encíclica Rerum novarum, afrontó la cuestión social en el contexto de la primera gran revolución industrial y hoy la Iglesia ofrece a todos, su patrimonio de doctrina social para responder a otra revolución industrial y a los desarrollos de la inteligencia artificial, que comportan nuevos desafíos en la defensa de la dignidad humana, de la justicia y el trabajo». (Papa León XIV, discurso a los cardenales).
Quienes conozcan la doctrina social de la Iglesia Católica sabrán la importancia del pensamiento del papa León XIII. Este papa le tocó ejercer su ministerio papal en el tiempo que iniciaba la afamada Revolución Industrial iniciada en Europa, específicamente en Inglaterra, entre 1760-1914.
El Papa León XIII, observando el rumbo que estaba tomando el tema laboral, la explotación de los trabajadores en las fábricas sin horarios establecidos, y el eterno temor de la sustitución del hombre por la tecnología escribió una encíclica titulada Rerum Novarum (de las cosas nuevas).
Una encíclica es una carta solemne que el Papa dirige a los obispos y fieles de la Iglesia católica para tratar temas importantes sobre fe, moral, doctrina social o problemas actuales. Son documentos oficiales que orientan la reflexión y la acción de los católicos en el mundo.
En esta encíclica, publicada en 1891, el papa defiende la dignidad del trabajador y la necesidad de establecer una justicia social en las relaciones laborales. León XIII propone una vía intermedia entre el socialismo (que él rechaza por negar la propiedad privada) y el liberalismo extremo (que deja al obrero desprotegido), basada en la doctrina social cristiana.
Esto es importante saberlo porque el papa no es ni de derecha ni de izquierda y el predecesor del nombre del papa actual mantuvo una crítica constante sobre ambas ideologías, tanto al comunismo como al capitalismo.
La encíclica Rerum Novarum fue publicada, cuando el crecimiento de las fábricas generó condiciones laborales muy duras: bajos salarios, largas jornadas, inseguridad laboral y explotación infantil.
También se difundían ideas socialistas y comunistas como respuesta a las injusticias, lo que preocupaba a la Iglesia. Rerum Novarum fue la primera encíclica de doctrina social y marcó el inicio de una reflexión sistemática de la Iglesia sobre los problemas sociales modernos.
Tres ideas fundamentales de la encíclica:
Derecho a la propiedad privada: La Iglesia afirma que cada persona tiene derecho a poseer bienes y tierra, como fruto de su trabajo.
Justicia en el trabajo: Los empleadores deben pagar un salario justo, garantizar condiciones dignas y respetar los derechos del obrero.
Papel del Estado y la Iglesia: El Estado debe intervenir para proteger a los más débiles y evitar abusos, y la Iglesia debe orientar moralmente la sociedad.
La Iglesia Católica es la única que ha definido una doctrina social y esta empezó con el Papa León XIII y su encíclica Rerum Novarum. El papa León XIV ha escogido este nombre inspirado en el trabajo y visión social de León XIII.
Conocer el pensamiento del papa León XIII puede darnos una orientación de cuál será la línea de pensamiento del nuevo papa porque cada uno elige el nombre de con quien se identifica en su accionar y forma de pensar.
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