Lo que comenzó como una simple pelea por el proyecto de presupuesto estatal escaló rápidamente hasta el punto dc llegar este jueves a la esfera del tráfico sexual, una vez que el empresario multimillonario vinculó al presidente Donald Trump con el pederasta Jeffrey Epstein.
"Es hora de lanzar la bomba", escribió Musk en las redes sociales y disparó: "Trump está en los archivos de Epstein. Por eso no se han hecho públicos". sostuvo sin ofrecer pruebas y limitándose a advertir: "La verdad saldrá a la luz".
La administración Trump enfrenta una creciente presión por parte de la extrema derecha y de personas influyentes para que sean publicados los llamados archivos Epstein, documentos de la investigación de tráfico sexual del multimillonario que se ahorcó en una cárcel federal de Nueva York en 2019.
El simple hecho de aparecer mencionado en dichos archivos no significa necesariamente que Trump sea por ello delincuente también en esta trama, ya que los expedientes penales suelen estar repletos de identidades de víctimas, así como de nombres de testigos y otras personas inocentes que entraron en contacto con sospechosos o con las pruebas de determinado caso.
Chicas de secundaria pagadas por "masajes"
Trump y Epstein, ambos miembros habituales de los círculos sociales adinerados de Nueva York y Florida, se cruzaron a lo largo de los años. En una entrevista de 2002 con la revista New York, Trump afirmó conocerlo desde los años 1980 y lo tildó de "un tipo estupendo" con quien "era muy divertido compartir".
“Incluso se dice que le gustan las mujeres hermosas tanto como a mí, y muchas de ellas son más bien jóvenes”, añadió Trump.
Añadió que «lo conocía como todo el mundo en Palm Beach», aunque «no creo haber hablado con él en 15 años. No le tenía simpatía».
El caso Epstein ha sido durante mucho tiempo el foco de atención de supuestos detectives de Internet, teóricos de la conspiración y partidarios que intentan vincular los crímenes de Epstein con políticos demócratas o republicanos.
Generó un intenso interés público porque los primeros cargos criminales que enfrentó Epstein se resolvieron con un acuerdo de culpabilidad inusual , que impuso poco castigo por lo que se describió como años de abuso sexual de chicas de secundaria a quienes les pagaba por "masajes".
Epstein fue arrestado de nuevo en junio del año 2010 y acusado de delitos federales más graves y un mes después se ahorcó en la celda mientras esperaba el juicio por esos cargos.
Este caso y la muerte han generado años de especulación sobre la posibilidad de que personas poderosas encubrieran sus vínculos con él, lo que ha dado lugar a demandas de que se publique todo el expediente.
"Por esto no se han hecho públicos"
Este año, funcionarios de la administración Trump, incluida la fiscal general Pam Bondi, publicaron en febrero lo que ella llamó la “Fase 1” de los archivos de Epstein, que fueron recibidos con desprecio y burla cuando se hizo evidente que la mayor parte del material ya se había hecho público.
Desde entonces, la fiscal Bondi y el director del FBI, Kash Patel, han reclutado a decenas de agentes y fiscales para examinar y preparar otros archivos de Epstein para una publicación de la «Fase 2».
Durante meses, los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley federal asignados a la tarea han luchado con el modo de manejar responsablemente dicha información, especialmente cuando existe la posibilidad de que personas inocentes nombradas en los documentos puedan sufrir daños significativos a su reputación cuando los archivos finalmente se publiquen.
Se reclama que se publique la "lista de clientes" sexuales y Musk a sugerido qaue uno de ellos es el presidente Trump.
Trump hoy mismo advirtió que Musk ya no será cliente del Estado si decide anular los contratos por miles de millones de dólares firmados con sus empresas.
Hasta la semana pasada, Musk fue un importante asesor presidencial de Trump, quien le dio vía libre para recortar drásticamente la plantilla federal y programas de repercusión planetaria.
"Sin mí, Trump habría perdido las elecciones, los demócratas controlarían la Cámara de Representantes y los republicanos tendrían 51-49 en el Senado. Qué ingratitud", añadió Musk.
Compartir esta nota