El secretario general de la ONU, António Guterres, celebró este lunes el ofrecimiento de Kenia para liderar una fuerza de policía internacional que ayude a combatir a las bandas armadas en Haití y pidió a más países que se sumen.
Según el portavoz Farhan Haq, Guterres "valora" la decisión de Kenia de encabezar esta fuerza que él mismo solicitó y agradece la "solidaridad expresada por el Gobierno keniano".
"El secretario general reitera su llamamiento al Consejo de Seguridad a apoyar esta operación internacional -que no se hará bajo bandera de la ONU- y anima a los Estados miembros, particularmente de la región, a unir fuerzas con Kenia".
Tras meses de dificultades para encontrar un país dispuesto a encabezar esta fuerza policial solicitada por el Ejecutivo haitiano y por Naciones Unidas, Kenia finalmente anunció este sábado que ha aceptado hacerlo y desplegar 1.000 agentes en la isla.
"A petición del Grupo de Naciones Amigas de Haití, Kenia aceptó considerar positivamente la posibilidad de liderar una Fuerza Multinacional en Haití", dijo el ministro de Asuntos Exteriores keniano, Alfred Mutua, en un comunicado.
El ministro indicó que esta medida forma parte del esfuerzo del país por solidarizarse con los afrodescendientes de todo el mundo y que se alinea con la política de la diáspora de la Unión Africana y el compromiso panafricano de Kenia.
Mutua señaló que "el despliegue propuesto por Kenia se concretará una vez que se obtenga un mandato del Consejo de Seguridad de la ONU y se emprendan otros procesos constitucionales kenianos".
El ministro también informó de que en las próximas semanas está prevista una misión de evaluación por parte de un equipo especial de la Policía keniana.
EE.UU. apoyará a la fuerza multinacional liderada por Kenia en Haití
Estados Unidos prometió este lunes apoyo y recursos para la fuerza multinacional liderada por Kenia que se desplegará en Haití para combatir la crisis, aunque no detalló si esta ayuda será económica o si mandará efectivos.
"Estamos comprometidos con encontrar los recursos para apoyar a esta fuerza multinacional, pero todavía es demasiado pronto para entrar en detalles sobre cuáles podrían ser esos recursos", dijo el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en su rueda de prensa diaria.
Miller recordó que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas todavía tiene que aprobar una resolución que avale el despliegue de la fuerza multinacional, para que luego Kenia envíe una primera misión de evaluación sobre el terreno.
El Gobierno de Kenia anunció el sábado su disposición a liderar esa misión y desplegar 1.000 policías en el país caribeño, casi 10 meses después de que el primer ministro de Haití, Ariel Henry, pidiera la ayuda de una fuerza multinacional.
Seis años después del fin del mandato de la cuestionada Misión de Estabilización de la ONU en Haití (Minustah), la posible llegada de dicha fuerza, aunque esperada, genera inquietud en el país más empobrecido de la región, donde este tipo de misiones -10 en los últimos 30 años- siempre ha sido objeto de controversias.
El Gobierno de Joe Biden se ha negado a liderar la fuerza multinacional, pero ha estado tanteando a otros países para asumieran ese papel.
Miller aseguró que Estados Unidos ha estado "trabajando entre bastidores" para lograr que se configure esta fuerza internacional, un esfuerzo que dijo ha resultado "más apropiado y más útil" que liderar la misión.
Inmerso desde hace años en una crisis sociopolítica y económica, Haití vio agravarse aún más su situación tras el magnicidio en julio de 2021 del entonces presidente Jovenel Moïse.
A ello se suma la batalla que libran las bandas armadas en Puerto Príncipe y sus alrededores, que ha causado ya la muerte de centenares de personas y la huida de miles de la zona capitalina.
Una enfermera estadounidense y su hijo han sido secuestrados en Haití, informó el domingo la organización religiosa para la que ella trabaja.
La noticia se supo pocos días después de que la Embajada de Estados Unidos en Haití pidiera a todos los estadounidenses que abandonaran el país cuanto antes, pero Miller no confirmó si ambos hechos están relacionados.
Haití vive una situación de extrema violencia y gran parte de Puerto Príncipe y sus alrededores se encuentran bajo el control de las bandas armadas, lo que ha obligado a miles de sus vecinos a irse de sus casas y convertirse en desplazados internos.