El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunió este jueves en París con su homólogo francés, Emmanuel Macron, en un encuentro marcado por la voluntad de fortalecer la cooperación bilateral. El acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur fue uno de los temas más relevantes del encuentro. Lula instó a Macron a reconsiderar su postura crítica, mientras el mandatario francés reiteró que el pacto necesita modificaciones antes de poder ser aprobado.
Una visita que busca presionar la firma del acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, llegó a Francia este jueves 5 de junio y se reunió con su homólogo francés, Emmanuel Macron, en París.
Se trata de la primera visita de un jefe de Estado brasileño al país galo desde 2012. Los dos mandatarios dieron una rueda de prensa en la que resaltaron que buscarán fortalecer la cooperación entre ambos países, aunque existen algunos puntos de desacuerdo entre los líderes.
El principal, justamente, es ese acuerdo entre los países del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) y del bloque de los Veintisiete. Lula le pidió a Macron que se abra a la posibilidad de aprobarlo y recalcó los que cree que son los beneficios de un acuerdo como ese.
"Mi querido Macron, abra un poco su corazón a la posibilidad de concluir este acuerdo con nuestro querido Mercosur", sentenció el presidente de Brasil.
Y agregó: “Este acuerdo sería la mejor respuesta que nuestras regiones podrían dar ante el contexto incierto creado por el regreso del unilateralismo y el proteccionismo arancelario". Lula se hacía referencia al regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y a la guerra comercial que desató con buena parte de los países del mundo.
"No dejaré la presidencia del Mercosur sin haber concluido el acuerdo comercial", prometió Lula.
En marzo de este año, Lula había recibido a Macron en Brasil. Una reunión que también buscaba fortalecer los lazos estratégicos entre ambos países. Esta vez, se ha previsto la firma de acuerdos medioambientales, tecnológicos, de defensa y salud, entre otros.
Sin embargo, Macron se mostró reticente a aprobar este acuerdo. Según expuso el mandatario galo, este podría tener un impacto medioambiental que Francia busca evitar. "Los países del Mercosur no están al mismo nivel regulatorio", sentenció.
“No sé cómo explicarles a mis agricultores que, en un momento en que les estoy exigiendo cumplir con más normas, voy a abrir masivamente el mercado a personas que no cumplen en absoluto”, agregó.
Además, dijo que necesita que se “mejore” el acuerdo para que se pueda proteger a los agricultores franceses y europeos en general. Macron ha experimentado un fuerte rechazo por parte del sector agrícola del país, que ha alzado su voz en contra del acuerdo.
“¿Qué va a pasar? No será mejor para el clima, pero destruiremos completamente nuestra agricultura”, afirmó.
En ese sentido, abogó por "respetar” a los agricultores y a ser “coherentes” con sus ambiciones.
Las divergencias por el acuerdo dentro de la UE
El acuerdo, que busca crear una de las mayores zonas económicas del mundo, pretende eliminar buena parte de los aranceles entre las partes y facilitar el comercio bilateral.
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Incluyendo a Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, el acuerdo le permitiría al bloque europeo exportar más automóviles, máquinas y bebidas alcohólicas hacia esos países. Mientras que recibiría productos como carne, azúcar, arroz, miel y soja sudamericanos.
Francia se ha opuesto a la forma actual del acuerdo. Sin embargo, hay otros países de la UE que lo defienden, como Alemania y España.
La jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en diciembre, presentó el acuerdo entre Bruselas y los miembros del bloque Mercosur como un "ganar-ganar".
Sin embargo, para que se apruebe, debe contar por lo menos con el respaldo de 15 de los 27 países de la UE, que representan un mínimo del 65% de la población del bloque.
Los reclamos de los agricultores
La gran oposición la han dado los agricultores franceses, que se han llegado incluso a manifestar en las calles en contra del acuerdo. El año pasado bloquearon carreteras de todo el país denunciando ingresos bajos y el aumento de la competencia con importaciones con bajos costos provenientes de países como Ucrania y miembros del Mercosur.
De hecho, el miércoles, los diputados franceses reunieron este miércoles a varios sectores agrícolas en la Asamblea Nacional para reafirmar su oposición al acuerdo.
El presidente de la asociación interprofesional de la ganadería y la carne (Interbev), Jean-François Guihard, le demandó a Macron que sea "extremadamente firme" con el presidente brasileño "para decirle que este acuerdo no es posible".
"Sería una verdadera tragedia para nuestra industria", sentenció Alain Carré, director de la asociación azucarera francesa AIBS. "Estamos dando la voz de alarma", agregó.
Gaza y Ucrania, en la agenda de la reunión
Aunque el acuerdo ocupó buena parte del tiempo en la rueda de prensa, los mandatarios se refirieron a los conflictos en curso en Gaza y en Ucrania.
Lula reiteró que considera que Israel está cometiendo un "genocidio premeditado" en Gaza.
"Lo que ocurre en Gaza no es una guerra. Es un genocidio perpetrado por un Ejército altamente entrenado contra mujeres y niños", sentenció. Y fue más allá: "Vemos genocidio ante nuestros ojos, día tras día, y esto ya no es aceptable.
Además, dijo que reconocer el Estado palestino es "un deber moral y humano y una exigencia política de todos los líderes mundiales".
Esto vino después de que Macron pareciera cambiar su narrativa respecto a Israel. La semana pasada parecía estar alejándose de Israel y haciendo un guiño para también reconocer el Estado palestino.
Además, Macron intenta que Brasil sea un aliado en la conferencia organizada por Francia y Arabia Saudita en la ONU a mediados de junio, que busca dar un nuevo impulso a una solución diplomática del conflicto en Gaza.
Por otro lado, los mandatarios se refirieron a la guerra entre Rusia y Ucrania. Macron instó a no equiparar a las partes beligerantes rusa y ucraniana.
"Hay un agresor, y ese es Rusia. Hay un agredido, y ese es Ucrania. Todos queremos la paz, pero no podemos tratar a los dos beligerantes por igual", afirmó Macron.
También dijo que Brasil, junto con India y China, deberían presionar a Rusia para que deje de atacar a Ucrania y que tenían un papel "muy importante que desempeñar" en la búsqueda de una solución al conflicto.
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Lula no se ha alejado por completo de Rusia, de hecho, tienen una relación bastante cercana. Hace poco, el presidente fue a la conmemoración de la victoria rusa contra la Alemania nazi, donde se reunió con Vladimir Putin.
Con AFP, AP y Reuters
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