La brecha de género en la manufactura local ha ido disminuyendo con los años. La participación de la mujer ha incrementado incluso en sectores menos tradicionales y donde el empleo masculino era mayor, como es el caso de la elaboración de productos de tabaco, la fabricación de productos de caucho y plástico o la instalación de maquinarias.

De acuerdo con la Encuesta Nacional Continua de Fuerza de Trabajo (ENCFT) del Banco Central, el empleo femenino en la manufactura local ha ido en ascenso desde 2016, aunque con fluctuaciones.

El número de mujeres empleadas en este sector pasó de 59,616 en 2016 a 72,002 en 2024, lo que representa una tasa de crecimiento promedio anual del 2.4 %, superior a la tasa del 1.3 % registrada en el empleo masculino en el mismo período.

Sin embargo, la manufactura local está entre los sectores que registraron una reducción en el empleo femenino en 2024, (también está la agricultura, ganadería, electricidad, gas y agua, salud), atribuida principalmente a un descenso de los empleos informales.

Según el estudio realizado por el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM) para la elaboración de la Hoja de ruta para el cierre de brechas de género en la industria de manufactura local, junto a la Asociación de Industrias (AIRD), las brechas de género se manifiestan en patrones diferenciados entre hombres y mujeres dentro del sector como el nivel de empleo, el grado de formalidad laboral, la remuneraciones y las actividades desarrolladas.

La incorporación de las mujeres al mercado laboral generalmente se concentra en sectores y ocupaciones relacionadas con las tareas domésticas y de cuidados dentro del hogar, esto a su vez conduce a la segregación ya sea para tipo de puesto, calidad de empleo y en la brecha de género en el ingreso.

El estudio sostiene que si bien la elaboración de productos alimenticios (31.8 %), prendas de vestir (13.5 %), productos textiles (8.6 %) y productos farmacéuticos (7.2 %) continúan siendo las principales actividades empleadoras de mujeres en la manufactura local, representando el 61.1 % del empleo femenino en el sector, el pasado año se observó un incremento en la participación femenina en sectores menos tradicionales y donde hace solo tres años más del 65 % del empleo era masculino.

Entre los sectores que las mujeres han incrementado presencia y que son tradicionalmente dominados por hombres destacan: la elaboración de productos de tabaco, la fabricación de productos de caucho y plástico, de madera y productos de madera, de muebles, de papel y productos de papel, así como la impresión y reproducción de grabaciones, otras industrias manufactureras y la reparación e instalación de maquinaria y equipo.

Estas actividades aumentaron su participación en el empleo femenino de la manufactura local, pasando del 10.3 % en 2022 al 23.6 % en 2024.

Por funciones

El estudio del MICM realizado en 2024, sostiene que la mujer también aumento su participación en los puestos de gerentes y administradores, profesionales e intelectuales, y técnicos de nivel medio, pasando del 18.9 % del total de mujeres empleadas en la manufactura local en 2022 al 28.7 % en 2024.

Asimismo, la participación de las obreras y operarias también aumentó en 2024 en comparación con 2022.

“En los grupos ocupacionales de gerentes y administradores, así como en el de técnicos de nivel medio, la brecha de empleo por género se redujo entre 2022 y 2024. En 2022, por cada mujer empleada como gerente o administradora en la manufactura local había 3.9 hombres, mientras que en 2024 la proporción se redujo a 1.4 hombres por cada mujer. De manera similar, en el grupo de técnicos de nivel medio, la proporción pasó de 1.4 hombres por cada mujer en 2022 a una paridad de 1.0 en 2024”, indica el estudio.

De acuerdo con el MICM, a nivel nacional la manufactura local presentaba una relación de 3.3 hombres ocupados por cada mujer, independientemente del sector (formal o informal).

Brechas por ingreso

En 2024 la brecha de género en el ingreso laboral dentro de la manufactura local se redujo, alcanzando su nivel más bajo desde 2016, con excepción de 2020.

Según la ENCFT, en 2024 el ingreso laboral promedio de los hombres empleados en la manufactura local fue un 25% superior al de las mujeres. No obstante, la brecha varía significativamente según el tipo de empleo.

Sostiene que el ingreso laboral promedio mensual de los hombres con empleo formal en la manufactura local fue de RD$ 36,907.5, un 8.6 % superior al percibido por las mujeres en el mismo tipo de empleo, cuyo ingreso promedio ascendió a RD$ 33,993.

En el caso del empleo informal, la brecha es considerablemente mayor. El ingreso laboral promedio mensual de los hombres en la manufactura local alcanzó RD$ 24,353.1, mientras que el de las mujeres se situó en RD$ 14,346.8, lo que representa una diferencia del 69.7% a favor de los hombres.