(II de III)

En la proyección del filosofar que el sujeto-autor sujeto impregna en el discurso que recorre esta obra, hay un rebuscamiento semántico que induce al lector a ver y sentir la filosofía como un saber que conlleva a la búsqueda de profundizar en nuestro tiempo y en nuestro contexto existencial y/o vivencial.
Aquí, el filosofar no el repetir conceptos de los clásicos filósofos que, desde la escuela y en las universidades, nos obligaron a repetir o a memorizar.
 Aquí el filosofar entra a formar parte de la cotidianidad del sujeto en movimiento y se presenta como el tránsito para la construcción de nuevos conocimientos, haciendo de la cognición, el anatema de valor y de sentido humano que pervive en nuestro existir.
"Duda de la duda", es entonces, una apuesta para un mejor pensar, un mejor crear y un mejor vivir.
 
Ahí es donde nos ubica el sujeto-autor, desde los perfiles discursivos de esta obra. Se trata de una Hermenéutica del saber, y, por lo tanto, replantea una nueva mirada política, donde se cuestione todo cuanto nos rodea, como sujetos-pensantes.
Desde esa reflexión, estamos entonces, frente a un filosofar novedoso, que procura  conllevarnos a no admitir como verdad absoluta, todo cuanto nos ponen ante los espejos del vivir, sino dudarlo, cuestionarlo y razonarlo, hasta crear nuevas "verdades" que también han de ser puestas en duda, desde una reflexión crítica, racional y creativa.
Hay en esta obra, repito, un potencial sentido político que nos conlleva a la reflexión de confirmar que necesitamos enseñar a pensar de manera razonada.
Hermenéutica de la filosofía, la literatura y del sujeto creador: El caso de la obra 'Duda de la duda', de Joseph Mendoza
 
Enseñar a nuestros educandos a dudar, es lo que le hace falta a nuestro sistema educativo nacional, para la formación de sujetos actuantes, pensantes, reflexivos, creativos, críticos y funcionales, como  aspiramos que sean los que nos representen en las esferas de poder, en la sociedad dominicana.
 
Se trata, entonces, de una Hermenéutica indagatoria, desde un filosofar con hondas raíces humanísticas, lo cual, hasta el momento, no había sido indagado y puesto en evidencia, sobre la base académica e investigativa de la filosofía dominicana contemporánea. Así de simple.
No reconocer esa esa realidad, es como ignorarnos a nosotros mismos. Y si usted no admite este saber, eso nos alegra, porque, desde su duda, tendrá entonces que demostrar o justificar, el por qué no es verdad lo que confirmo.
 Yo me pregunto y le pregunto a usted, amigo (a) lector (a):  ¿Cuál otro autor ha filosofado sobre la duda de la duda, como se expone en esta obra, desde una hermenéutica del filosofar crítico, en la sociedad dominicana?
 
Estoy muy consciente del riesgo académico en que caigo, al sostener estos planteamientos; pero esa es la meta, generar un filosofar, a partir de postulados que, por necesidad epistémica, deben ser cuestionados o dudados, para asumir una postura objetiva que aflore un nuevo repensar  o nuevos sentidos o nuevos saberes.
En toda acción estético-literaria, hay un filosofar que fluye en su trasfondo discursivo. De ahí que en el engranaje literario de esta obra, en su macrosentido referencial y argumentativo, se desliza un referente literario que, desde las imágenes usadas por el sujeto-autor, evocan un profundo rebuscar, desde la duda, hacia la certeza .
Aquí, duda y certeza entran a formarte parte del vivir cotidiano del sujeto-creador. En esta obra, duda y certeza conforman la plataforma cognitiva del sujeto en movimiento. Son partes integrales del conocer, del indagar y del construir nuevos saberes,  desde la  experiencia vital del Ser.
Trasciende en el desarrollo epistémico de esta obra, un filosofar para el conocimiento y el potencial  creativo del sujeto, lo cual trasciende su campo de semanticidad, desde sus vínculos analógicos con la simbología y la ritmicidad de la lengua.
Duda y certeza entran en un diálogo abierto con la creatividad, por lo que el sujeto-autor, en esta obra, establece una autodialogía interna con su conciencia, y asume su duda como la apuesta que ha de conllevarlo a construir su propia realidad, desde una mirada racional, cuestionadora y posible de ser desplazada por otros saberes, en un tiempo y espacio determinados.
Esta obra no es para ser interpretada, ya  que se trata de un estudio para ser discernido y cuestionado, sin premura, desde la tesitura de una Hermenéutica analítica. 
En sí misma,  en esta  "Duda de la duda",  fluye un filosofar de lo epistémico que nos induce a una complicidad con el humanismo contemporáneo y su apertura al convivir solidario y revolucionario.
El potencial de creatividad del sujeto-autor, desde la filosofía, fluye en esta obra. De ahí el estilo armonioso y claro que predomina en su redacción simple, sin perder la profundidad expresiva, desde el manejo de la lengua, en la redacción.
La duda, como acción natural de cuestionamiento en el sujeto-oensabte, es tratada aquí  como un factor de cambio, de transformación y de estratégica renovación cognitiva.

Julio Cuevas

Poeta

Poeta, ensayista y crítico literario. Licenciatura en Educación, mención Filosofía y Letras-UASD. Maestria en Lingüística Aplicada-INTEC. Doctor en Derecho-O&M, con Maestria en Relaciones Internacionales, para el Área del Caribe-FLACSO-INTEC. Administración Cultural en Venezuela-OEA-CLACDEC. Fue Embajador, Encargado de Asuntos Culturales de la Cancillería dominicana. Ex-Secretario General de la Comisión Dominicana para la UNESCO. Es egresado de la Escuela Diplomática y Consular del Ministerio de Relaciones Exteriores. Actual Embajador Adscrito. Doctorado en Filosofía para un Mundo Global, Universidad País Vasco. OBRAS: ¨Epistolario del Crepúsculo¨, (poemas, 1974), ¨Visión Critica en Torno a la Poesía de Víctor Villegas¨, (Ensayo, 1975), ¨Testimonio del Tiempo¨ (poemas, 1986), ¨Homenaje en Tono Oblicuo¨ (poemas, 1992), ¨Los Cantos del Hierofante¨ (poemas, 1997),¨Poemas Tierra Adentro¨ (poema, 2008) y Literatura Infantil para el Desarrollo de la Creatividad y el Pensamiento Crítico (Ensayo,2013). Profesor Escuela de Letras UASD.

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