En 2010, el Gobierno promulgó la Ley de Cine con el objetivo de fomentar el séptimo arte nacional y atraer a productores extranjeros, encaminado a diversificar la economía y apoyar con incentivos y exoneraciones el cine.

Esta política fiscal ha evidenciado sus frutos en los 253 largometrajes dominicanos estrenados durante la última década y los 25,000 puestos laborales generados.

Pero, además, las cifras indican que las arcas estatales han dejado de percibir RD$ 24,000 millones en los 14 años de la legislación cultural que movilizó 4 millones de personas en 2023.

El Ministerio de Hacienda, en la Ley 80-23 del Presupuesto General del Estado, estimó el gasto tributario para el séptimo arte en RD$ 5,805 millones en 2024, un 24.6 % más que el año pasado, cuando le costó al país RD$ 4,655.5 millones en impuestos dejados de pagar.

Hasta octubre del 2024, los montos validados por el Consejo Intersectorial para la Promoción de la Actividad Cinematográfica en República Dominicana (Cipac) ascendieron a RD$ 4,742 millones, mientras que las proyecciones de aprobaciones para noviembre y diciembre son de RD$ 1,342.9 millones, cifras que hacen un total de RD$ 6,085 millones.

Es decir, 4.6 % más que el tope que situó Hacienda para este año. En términos absolutos significan RD$ 280 millones más.

Esta diferencia de más de RD$ 200 millones motivaron al Cipac pausar por un período de dos meses “la emisión de nuevos certificados provisionales que busquen acogerse al incentivo previsto en el Artículo 34 y los permisos únicos de rodaje del Artículo 39 de la Ley 108-10”.

El permiso único de rodaje (PUR) se refiere al permiso otorgado por el Sistema de Información y Registro Cinematográfico (Sirecine) a las películas que realizan su filmación en lugares públicos 30 días antes.

Asimismo, el Certificado Provisional de Nacionalidad Dominicana (CPND) para los proyectos de obras que acrediten el cumplimiento de los requisitos del Artículo 7, es decir, que el idioma sea el español y que el capital dominicano invertido sea mayor del 20 % del presupuesto. 

Suspensión para analizar los incentivos fiscales

Realizar una película puede ser un proceso cuesta arriba, y demandar cuantiosas sumas de dinero para presentarla en la pantalla grande. Esto ha demandado que la mayoría de los países establezcan legislaciones que aboguen por incentivos “generosos”, como el 100 % de exención del impuesto sobre la renta (ISR), el impuesto de valor agregado (IVA) y aranceles, destaca la Asociación Dominicana de Productores Cinematográficos y Audiovisuales (Aprodomcine).

El país ofrece, por ejemplo, un crédito fiscal transferible del 25 % a producciones internacionales y exoneración de impuestos de hasta el 100 % a quienes inviertan en largometrajes dominicanos.

“Es preciso invocar el Decreto 370-11 que establece el reglamento de aplicación de la Ley 108-10, donde otorga a la Dirección General de Cine (DGCine) realizar evaluaciones, verificaciones y recomendaciones en los procedimientos para la aplicación de los incentivos fiscales”, detallan los miembros del Cipac.

Agregan que la evaluación se desarrollará para identificar mejoras en los procesos, “ajustar la política de la industria cinematográfica según las condiciones económicas y sociales, optimizando y garantizando su eficacia en el tiempo”.

Además señalan que luego de culminar la revisión y análisis emitirán sus “recomendaciones en torno a los procedimientos respecto a la elegibilidad de los incentivos fiscales y monitoreo del gasto tributario”.

Entre enero-octubre de este año se han emitido tres resoluciones en forma de “autorregulación” del cine nacional. En la resolución 2024-232, los documentales acogidos en el Artículo 34 tendrán un presupuesto no mayor de RD$ 25 millones.

En julio de 2024, la entidad estatal emitió la resolución 2024-259 y estableció un tope presupuestario de no mayor de RD$ 75 millones a las obras cinematográficas de género ficción que se acogieran al incentivo del Artículo 34, “y no pudiendo aprobar presupuestos por encima de RD$ 80 millones”.

Un análisis de ACENTO reveló que 10 películas dominicanas entre 2013 y abril del 2024, contaban con un presupuesto mayor de RD$ 80 millones, siendo Capitán Avispa, de Juan Luis Guerra la de mayor presupuesto con RD$ 128.5 millones. Mientras, que El año del tigre, tuvo un presupuesto avalado de RD$ 81.2 millones.