Hacer reír a las personas no es una tarea sencilla. Lograr que una sala de 45 personas se carcajee y divierta durante una hora y 45 minutos es un camino cuesta arriba. Sin embargo, los directores dominicanos parecen que encontraron la fórmula perfecta de atraer a los cinéfilos al séptimo arte y posicionarse como las favoritas en términos de taquillas en República Dominicana.
La comedia pese a que tuvo solo 71 de los 257 estrenos entre 2011-2023, logró movilizar a 8,603,534 dominicanos. Esta asistencia permitió un recaudo de RD$ 1,522.5 millones, para el 66.3 % del monto total que ascendió a RD$ 2,293.9 millones.
No es de extrañar que Tubérculo Gourmet (2015), Archie López, recaudó RD$ 99.1 millones por 538,808 visitantes. Además, Lotoman (2011) fue de RD$ 96.4 millones por 673,759 visitas, aportando a que la comedia se instaure en el gusto popular de los dominicanos.
Estadísticas de la Dirección General de Cine (DGCine) establecen que el género drama fue usado para la creación de 122 películas que atrajeron a 2,880,278 visitas y generaron RD$ 604 millones por ventas de boletas, es decir, el 26.3 % del total.
El drama se impuso con las películas de Frank Perozo, Colao y Que león, que reportaron RD$ 71.5 millones y RD$ 102.1 millones, respectivamente. Colao llevó 341,598 cinéfilos, mientras que a la segunda reunió 424,907 personas.
¿Quién manda?, de Ronni Castillo, en 2013, recaudó RD$ 45.7 millones. Movilizó 82,682 dominicanos. ¿Pá qué me casé?, del director Roberto Ángel Salcedo, recaudó RD$ 43.6 millones por las 232,891 visitas.
Las siete producciones de acción vendieron 320,217 boletos por un monto total de RD$ 56,019,501, esto significa que cada unidad costó en promedio RD$ 174.9.
La producción Código paz, de Pedro Urrutia, se coronó como la de mayor recaudación en este segmento, al contabilizar RD$ 23.5 millones por la venta de 132,098 boletos. En segundo lugar fue la película de Leticia Tonos, Cristo Rey, con RD$ 12.7 millones y 76,737 visitas; y Oro y polvo, de Félix Limardo, con RD$ 9.2 millones y 49,418 espectadores.
Las 10 películas de suspenso movilizaron 306,353 dominicanos a los complejos del séptimo arte con RD$ 51.1 millones, lo que evidencia no sólo la cantidad, sino la calidad de las producciones, las historias y los personajes encarnados por diferentes actores dominicanos que atraen al público a los distribuidores cinematográficos.
Conforme datos de la entidad estatal, seis producciones biográficas recaudaron RD$ 30.9 millones por la venta de 120,930 boletos.
Veneno primero caída: el relámpago de Tabaré Blanchard en 2018 generó RD$ 15.2 millones, por las 63,036 asistencias.
Freddy y María Montez, recaudaron RD$ 9.4 millones y RD$ 4.1 millones, respectivamente. La película de Vicente Peñarrocha sobre la actriz dominicana en Hollywood, María Montez, atrajo a 19,596 espectadores, mientras que la de Giancarlo Beras-Goico, que retrató una despedida simbólica hacia el fallecimiento de su padre, reunió 27,649.
El largometraje animado 3 al rescate, de los hermanos Jorge y Luis Morillo, logró superar en recaudo las tres de terror (RD$ 905,615) y posicionarse sólo detrás de los 34 documentales (RD$ 7,439,750), al reportar RD$ 7,399,375. Mientras, las tres de crimen totalizaron RD$ 13.4 millones por 60,673 taquillas vendidas.
La gunguna, de Ernesto Alemany, recaudó RD$ 9.9 millones, es decir, los distribuidores vendieron 47,733 boletos en 2015. Es una producción de crimen.
Los documentales con Yo soy la salsa, de Manuel Villalona, logró movilizar a 7,691 cinéfilos, que representaron RD$ 1.7 millones de ingresos. En tanto, el género suspenso se destacó El teniente amado, que recaudó RD$ 26.2 millones por 152,788 visitas. Fue creada por Félix Limardo en 2013.
La fiesta, de Francisco Alberto Rodríguez, se llevó el primer lugar del género terror de las más taquilleras, con una asistencia de RD$ 462,315 y 1,840 personas. Convivencia le pisó los talones con RD$ 388,175 y 1,227 personas.