El Colegio Médico Dominicano reaccionó al discurso de rendición de cuentas del presidente Luis Abinader y se refirió específicamente a los logros que el Gobierno dice haber alcanzado en el sector salud.
Senén Caba, presidente del gremio, indicó que la agrupación pone en duda la inversión que el mandatario aseguró haber destinado a la salud y que por tal, el discurso no llenó sus expectativas.
“La única inversión en la salud que no se pone en duda es el dinero invertido en vacunas, lo demás habrá que probarse”, expresó.
Puso como ejemplo el caso del Hospital Padre Billini, el cual fue anunciado por Abinader como uno de los hospitales remozados en 2021, pero que aún sigue cerrado.
Asimismo precisó que todavía hay miles de profesionales de la salud doblando esquina y cruzando calles en el desempleo. A esto se le suma un grupo de jubilados que todavía no han recibidos los beneficios de su pensión.
En su alocución, Abinader informó que en 2021 a la salud se le inyectó 1,100 millones de pesos y que para este 2022 se le agregarían otros 2,700 millones de pesos, sin embargo, el Colegio Médico reiteró que dicha inversión no está siendo focalizada.
Agregó que los fondos que deberían ser destinados a la salud debiera ser un 5 % del PIB y no un 2.9 % como lo es en la actualidad.
"Hemos superado la pandemia"
El Colegio Médico dijo que concuerda con Abinader al expresar que la pandemia ha sido superada en el país.
“La pandemia está en declive. Vimos como 17 provincias no reportaron casos durante varios días. No podemos decir que se ha debido a la vacuna necesariamente, pienso que el contagio con la variante ómicron ayudó mucho y está a unos niveles no vistos desde que empezó la pandemia en el país”, manifestó Caba.
Sin embargo, aclaró que ese declive en los contagios no quiere decir que ha terminado la pandemia. Pues todavía hay pacientes que están conectados a ventiladores.
Para el Colegio Médico el único desacierto del Gobierno en materia de pandemia ha sido “la ineficacia en la estrategia de comunicación para motivar la vacunación en la población”.
“Al gobierno no le interesó desarrollar una estrategia que entusiasmara y preocupara a la gente a vacunarse, y si lo hizo, lo hizo de una manera muy tímida. La estrategia de comprar millones de vacunas fue acertada, lo que no fue acertado fue la estrategia de entusiasmar a la gente como ocurrió en un principio”, concluyó.