En esta misma semana, el gobierno, con base en informaciones de la Dirección Nacional de Presupuesto, hizo una publicación en donde se detalla la inversión pública en el período que va desde enero hasta principios de mayo del presente año 2025.

En el detalle de las inversiones se establece un monto para el periodo señalado de RD$19,720.38 millones, de los cuales se señala que entre la provincia de Santo Domingo y el Distrito Nacional se han hecho inversiones de RD$8,762.95, o sea que el 44.3% se ha realizado en el Gran Santo Domingo; así también se destacan inversiones en María Trinidad Sánchez DE RD$1,236.25 millones, en provincia Duarte DE RD$934.36 millones y en Santiago DE RD$876.64 millones, y así sucesivamente.

Aparentemente, con esas inversiones públicas señaladas, el gobierno está dando respuestas efectivas y a tiempo a las necesidades de obras en las diversas comunidades.

Pero si vemos los principales proyectos que más promueve el gobierno, notaremos que las obras no han avanzado lo suficiente en los últimos 4 años y mucho menos en el período de enero a abril, y eso se puede comprobar con obras como la extensión del metro desde el kilómetro 9 de la autopista Duarte hasta Los Alcarrizos, que de paso expertos en el tema de infraestructura han denunciado fallos en la construcción de dicha obra, amén de la lentitud con que ha venido siendo ejecutada; también el monorriel de Santiago, que el actual presidente Luis Abinader inauguró una primera etapa y se había prometido que para la fecha actual ya estaría funcionando la totalidad del proyecto, pero no ha sido así.

A todo esto le podemos agregar lo del Malecón de Nagua, que fue anunciado con bombos y platillos en junio del año 2021 con una inversión de RD$2,700 millones, pero a más de tres años desde que se anunció dicha obra, que tiene un significado extraordinario desde el punto de vista turístico y urbanístico, no solo para los pobladores de Nagua, sino también para Sánchez, Samaná, Cabrera y Río San Juan, la misma en el mes de marzo del año 2024fue prácticamente paralizada y a la fecha no se vislumbran avances significativos en su ejecución.

Debemos también destacar que las principales obras de la Provincia Duarte, entre ellas el Hospital Regional, que el presidente hace varios años ha venido prometiendo su definitiva terminación, sin que esta hasta el momento se haya convertido en una realidad; otra obra también significativa para esta dicha provincia es la de la avenida circunvalación, que también se ha hablado cada vez que el presidente, en los últimos cuatro años,  ha visitado la esa lugar sobre su terminación y a la fecha no se vislumbra de cuando será inaugurada porque se evidencia retrasos en su ejecución, estas obras han sido de las principales demandas que organizaciones populares han reclamado en movimientos de huelgas.

Pero el señalar el monto de inversión pública, hasta este mes de mayo de alrededor de RD$19,700 millones, evidencia como la inversión pública, más que aumentando, ha venido reduciéndose, pues si comparamos hace tres años, en el año 2022, en donde las inversiones públicas de este mismo gobierno en dicho año rondaron RD$31,000 millones, esto da señales claras de la reducción dramática que tendrán esas inversiones al final del año 2025, que estarán casi a los niveles del año 2022.

De no mejorar la proporción del gasto que se destina a inversiones públicas, cuya reducción ya está teniendo un impacto significativo desde el punto de vista del retraso de las obras que el gobierno se ha comprometido a ejecutar en las distintas comunidades, esto está teniendo y tendrá en el futuro efectos en el empleo que generan las inversiones públicas y la provisión de servicios, ya sea de salud, educación, vial y de toda índole, que demandan de infraestructura.

Juan E. Taveras Vargas

Juan E. Taveras Vargas Economista y profesor universitario UASD. Masters en negocios y relaciones económicas internacionales, masters en políticas publicas y globalización, especialidad en docencia virtual Especialista en planificación estratégica y formulación de proyectos. Promotor cultural.

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