Quienes conocen bien el origen de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer se detienen a aclarar que no se trata de celebrar una fiesta en honor a la mujer.
El origen del 8 de marzo tiene como antecedente luchas de trabajadoras; la propuesta de la revolucionaria judío alemana Clara Zetkin, una mujer comunista, nacida en el 1857, Alemania y fallecida en el 1933, Rusia. Disponible en https://es.wikipedia.org/wiki/Clara_Zetkin.
En distintos países durante décadas se discutía la fecha, se propuso febrero, agosto, mayo, marzo y distintos días. También variaban los motivos, el alcance del porqué; el anarquismo no apoyaba las elecciones, se hablaba sólo de las trabajadoras; existía una parte de mujeres que luchaban por el voto como interés principal de la clase media…Etcétera. Un verdadero hervidero de contradicciones y de diversas fechas en los diferentes países. Disponible en: https://www.baseis.org.py/el-verdadero-origen-del-8-de-marzo-dia-internacional-de-la-mujer-trabajadora/
“En 1914, por primera vez, en Alemania, Clara Zetkin y las mujeres socialistas marcan la fecha del Día de la Mujer para el 8 de marzo. Ibid
Las mujeres trabajadoras, tejedoras, modistas, fueron claves para empujar la caída del absolutismo en Rusia y por sus demandas de libertades como mujeres.
Expongo un relato detallado de este proceso realizado por la institución de investigación BASE Investigaciones Sociales, ONG paraguaya, Ibíd.
“En Rusia, bajo de la opresión del zar, el primer Día de la Mujer sólo fue conmemorado el 3 de marzo de 1913. En 1914 todas las organizadoras del Día de la Mujer cayeron presas y con eso no hubo conmemoración.
En plena Guerra Mundial, en 1917, en Rusia, las mujeres socialistas realizaron su Día de la Mujer el 23 de febrero, por el calendario ruso. En el calendario occidental, la fecha correspondía al 8 de Marzo. Era el mismo día que, en Alemania, había sido escogido en 1914. Fue ese día el que explotó la huelga espontánea de las tejedoras y modistas de Petrogrado.
Ese día, un gran número de mujeres obreras, en la mayoría tejedoras y modistas, contrariando la decisión del Partido, que consideró que aquel no era el momento para cualquier huelga, salieron a las calles en manifestación por pan y paz. Se declararon en huelga. Esa manifestación fue la espoleta del comienzo de la primera fase de la Revolución Rusa, conocida después como la Revolución de Febrero.
(…) Kollontai escribe: «El día de las obreras, 8 de Marzo, fue una fecha memorable en la historia. Ese día las mujeres rusas levantaron la antorcha de la revolución.»
El 23 de febrero era el Día Internacional de la Mujer. Los elementos socialdemócratas se proponían festejarlo en la forma tradicional: con asambleas, discursos, manifiestos, etc. A nadie se le pasó por las mentes que el Día de la Mujer pudiera convertirse en el primer día de la revolución. Ninguna organización hizo un llamamiento a la huelga para ese día. La organización bolchevique más combativa de todas, el Comité de la barriada obrera de Viborg, aconsejó que no se fuese a la huelga.
(…) Al día siguiente, haciendo caso omiso de sus instrucciones, se declararon en huelga las obreras de algunas fábricas textiles y enviaron delegadas a los metalúrgicos pidiéndoles que secundaran el movimiento. «La idea de la acción había madurado nadie pensaba en aquel entonces que el día 23 de febrero señalaría el principio de la ofensiva declarada contra el absolutismo.”.
Es evidente, pues, que la Revolución de Febrero empezó desde abajo, venciendo la resistencia de las propias organizaciones revolucionarias; con la particularidad de que esta espontánea iniciativa corrió a cargo de la parte más oprimida y cohibida del proletariado: las obreras del ramo textil, entre las cuales hay que suponer que habría no pocas mujeres casadas con soldados. Las colas estacionadas a la puerta de las panaderías, cada vez mayores, se encargaron de dar el último empujón»
En 1921 se realizó, en Moscú, en la URSS, la Conferencia de las Mujeres Comunistas que adopta el día 8 de Marzo como fecha unificada del Día Internacional de las Obreras. A partir de esa Conferencia, la 3ª Internacional, recién-creada, esparcirá la fecha 8 de Marzo como fecha de las conmemoraciones de la lucha de las mujeres. Ibíd. (Las negritas son de Mildred Dolores Mata).
Esta investigación, de la cual extraigo este relato recoge las informaciones que aclaran que el origen del 8 de marzo no tiene que ver con la fecha de 1857 y con la quema de 129 mujeres dentro de una fábrica. Se trata de una confusión que se fue repitiendo, aunque si murieron unas ciento y pico de mujeres textiles en New York pero en el año 1911.
En síntesis, en este escrito quiero destacar que fue largo el proceso para definir el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer, y que los movimientos socialistas y de trabajadoras fueron fundamentales para este reconocimiento. Que tuvieron que luchar y aún tienen que luchar con los hombres de los sindicatos y partidos que estiman que son luchas que debilitan los aspectos generales de sus luchas.
Por lo que el 8 de marzo tiene un origen significativo en el socialismo, y una lucha principalmente de las mujeres socialistas con el apoyo de hombres como Vladimir Lenin y León Trotski y por los derechos de las mujeres a conseguir su libertad, autonomía, en lo civil, económico y político. A Clara Zetkin en estos proceso de luchar por este Día de la Mujer dentro de los partidos socialistas la acompañaron, la también alemana Rosa Luxemburo y la rusa Alexandra Kollontai.
También el 8 de marzo se debe a otros movimientos civiles esencialmente sufragistas.
En la Organización de las Naciones Unidas ONU, es el año 1972 que se decide que el 8 de marzo, para el año 1975 sea el Día Internacional de la Mujer.
En República Dominicana es el año 1942 que se permite una de las conquistas civiles ciudadanas de las mujeres, el derecho al voto, con las sufragistas, a través de Acción Feminista Dominicana AFD, con Abigaíl Mejía, Petronila Angélica Gómez, Delia Weber, Ercilia Pepín, Celeste Woss, Aida Cartagena Portalatín, Gladys De los Santos y Amanda Nivar, entre otras.
Rosario Espinal: Disponible en: https://acento.com.do/opinion/las-sufragistas-dominicanas-9199427.html